Cátedra Extraordinaria Ingmar Bergman en cine y teatro invita a las actividades académicas: Mesas de reflexión y Master class

Después de más de 57 años de contribuir en la realización de importantes investigaciones científicas, descubrimientos de estrellas de neutrones, observación de planetas y detección de peligrosos asteroides en trayectoria cercana a la Tierra, es una enorme pérdida para la comunidad científica lo que sucedió con el Telescopio de Arecibo.
Construido en la década de los sesenta con fondos del Departamento de Defensa de Estados Unidos, el radiotelescopio de Arecibo fue inaugurado en 1963. Dio seguimiento a objetos cercanos a la Tierra, permitió descubrimientos como el del periodo orbital de Mercurio, que es de 59 días y no de 88 como se pensaba, se hicieron investigaciones que condujeron a un premio Nobel y determinar si un planeta es potencialmente habitable.
De acuerdo con Gloria Delgado Inglada, investigadora del Instituto de Astronomía de la UNAM, el diámetro del telescopio ubicado en Puerto Rico era equivalente a la altura de la Torre Eiffel acostada y se le consideraba como el “monumento mundial a la astronomía”. Gracias a las investigaciones hechas en este lugar se descubrió hielo en los polos sur y norte.
En agosto de 2020 una parte del telescopio colapsó y se derrumbó, estrellándose desde 120 metros de altura hacia el fondo del plato cóncavo de 305 metros de largo de radio. En noviembre de 2020 otro cable más se dañó y provocó daños a su estructura. Se anunció que el telescopio sería desmantelado por motivos de seguridad. Pero el 1 de diciembre los otros cables que lo sostenían desde 3 pilares terrestres no soportaron más su peso de 900 kilos y el radiotelescopio se precipitó al vacío.
Con el objetivo de crear impacto y visibilizar a las mujeres científicas mexicanas, María Fernanda Veloz, científica e investigadora, tomó como reto personal trabajar para que se reconozca la labor de todas las mujeres que se dedican a la ciencia en México.
Especialista en química y nanotecnología e ingeniería molecular, se interesó en participar en la editona, una jornada de edición colectiva y simultánea de artículos en #Wikipedia, realizada por mujeres, sobre mujeres, para consulta de todo mundo.
Explicó que de cada 10 biografías que hay en la enciclopedia virtual, sólo una está dedicada a mujeres, “en México sí se hace ciencia por mujeres y deben de ser reconocidas”. En ese contexto, surge wikicientíficas mexicanas, una jornada que buscó editar biografías de científicas mexicanas en la historia o crearlas desde cero para “hacer escuchar sus voces”.
Esta jornada se llevó a cabo del 10 al 14 de noviembre de 2020, fue una edición de mujeres, por mujeres, para mujeres y así inspirar a más niñas para convertirse en científicas.
Gobiernos de todo el mundo no respondieron con suficiente rapidez al COVID-19, según el comité de revisión independiente que analiza la respuesta internacional.
El panel asegura que “si se hubiese aplicado el principio de precaución”, tanto la OMS como las autoridades nacionales y locales podrían haber emitido advertencias más oportunas y firmes sobre la posible transmisión entre personas.
El grupo sigue investigando, pero en su segundo informe provisional apuntan que “lo que está claro” es que “las autoridades sanitarias locales y nacionales de China podrían haber aplicado medidas de salud pública más contundentes en enero”.
El comité recuerda que a finales de enero de 2020 ya había pruebas de casos en varios países que deberían haber aplicado medidas de contención de salud pública inmediatas. “No lo hicieron”, concluyen.
El panel dice que “no está claro” por qué el Comité de Emergencias, establecido en virtud del Reglamento Sanitario Internacional, no se reunió hasta el 22 de enero, “ni tampoco por qué no pudo ponerse de acuerdo sobre la declaración de una emergencia de salud pública de importancia internacional en su primera reunión”. El 30 de enero se declaró la emergencia, pero, “el grado en que los países respondieron a esa declaración no fue el esperado”.
El Grupo se pregunta “si habría sido de ayuda el que la OMS hubiese utilizado el término «pandemia» con anterioridad”. Aunque ese término no se utiliza ni se define en el Reglamento Sanitario Internacional (2005), aclaran, “su uso sirve para llamar la atención sobre la gravedad de un problema de salud. La OMS no utilizó ese término hasta el 11 de marzo”, señalan.
Además, creen que a la Organización Mundial de la Salud “le ha faltado poder para hacer el trabajo que se espera de ella”.
Ante la pandemia de Covid-19 los niños plantean una paradoja: por un lado son los más resistentes al virus, al menos en lo físico; por el otro son los más vulnerables al confinamiento y, con frecuencia, presentan deficiencias a nivel motriz, cognitivo y socioafectivo a consecuencia del encierro, alerta la maestra Montserrat Espinosa, de la Coordinación de Psicología de la Educación, de la Facultad de Psicología.
“Si bien se suele bromear conque a ellos no les gusta ir a la escuela, en realidad el que vayan les es muy necesario y no sólo por la cuestión académica, sino porque más allá de la ortografía y las tablas de multiplicar ése es un espacio donde aprenden a relacionarse, lo cual pasa por compartir, pelearse, cooperar, resolver problemas y negociar”.
Por todo ello la maestra Montserrat se dice muy preocupada por estas generaciones de infantes y adolescentes a las cuales, sin aviso alguno, se les arrebató la posibilidad de llevar con normalidad una de sus etapas formativas más importantes. “Si a los adultos nos parece que hemos sido despojados de mucho, pensemos en los niños. Al menos nosotros ya atravesamos ese periodo tan crítico de primaria y secundaria, donde dimos forma a nuestra vida social, mientras que ellos apenas construían esa vida cuando, de súbito, se vieron obligados a pausar el proceso”.
Para amortiguar las consecuencias negativas en los menores la maestra Espinosa sugiere cerrar filas como familia, pero entendiendo que lo que hagamos en casa siempre será un sustituto y no un equivalente de lo ofrecido por las aulas, la calle o el parque. Puede que el pequeño tenga cinco hermanos con quienes jugar y estudiar y, sin embargo, le faltará aún algo: la tan necesaria interacción con sus pares.
“Privarlos de esas experiencias tendrá repercusiones en el mediano y largo plazos, y ¿qué tan graves serán? Eso dependerá de la familia y de sus esfuerzos por mantener al niño estimulado”.
Red de apoyo familiar
Como psicóloga, la profesora Montserrat Espinosa ha platicado con muchos niños sobre su confinamiento y la mayoría de ellos le han evidenciado cierta inconformidad con las clases a distancia pues sienten que no aprenden igual de una computadora o de un televisor que de las aulas físicas, pero todos le han compartido lo mismo: que lo único bueno del encierro es que pasan mucho más tiempo con sus mamás.
“Eso nos debería hacer pensar en el tipo de relación que llevábamos con nuestros hijos y en las dinámicas de antes, cuando los padres que trabajan apenas veían a sus hijos por las mañanas y noches, y cuyos intercambios verbales con ellos básicamente se reducían a espetarles un ‘¡levántate y báñate, que se te hace tarde para el colegio!’, y un ‘¡duérmete en este momento, que temprano debes estudiar!”.
Por ello, la académica invita a todas las cabezas de familia a hacer un alto, reflexionar sobre qué pueden cambiar en lo sucesivo y, sobre todo, pensar en la marca que dejará este 2020 y 2021 en los niños. “La pregunta aquí es: ¿cómo quiero que mis hijos recuerden este episodio?, ¿como cuando mis papás me reprendían para que estuviera quieto y pusiera atención a una clase por computadora o televisión, o como los años en que me enseñaron a jugar ajedrez, scrabble o turista mundial?”.
A decir de Montserrat Espinosa, es evidente que los adultos tienen ante sí dos rutas: la de ser indolentes a las peticiones de atención de sus hijos o la de acompañarlos durante todo este trance, darles herramientas para crecer mejor y estar cerca hasta que todo pase.
“Afectaciones habrá pues no son tiempos normales y los menores están llevando una vida mucho más solitaria de la debida, sin sus amigos de la escuela, sin sus clases presenciales y sin sus juegos de correr y brincar. Por desgracia no los podemos devolver a lo de antes, pero lo que sí podemos hacer es estimularlos para que maduren de la mejor manera posible pese a las limitantes, y esto debe hacerse en todas las áreas de desarrollo, lo cual no es tan difícil como suena”.
Dar a los niños una cuerda de saltar o pintarles un avioncito en el patio (o recortarles uno en cartón si vivimos en un departamento alfombrado) basta para combatir la falta de actividad, que además de provocar sobrepeso, muy rápido incide en lo motriz y en una deficiente coordinación visoespacial, cuyo efecto más notorio es que los pequeños midan mal los espacios, parezcan torpes y se tropiecen con frecuencia.
“También algo sencillo y que suele soslayarse es la importancia de hacer que escriban a mano, pues las neuronas se activan de manera diferente al arrastrar el lápiz que al sólo golpear letras en un teclado”.
Sin embargo, pese a la tentación que plantea el decirles qué hacer y cómo a nuestros hijos, en especial ahora que seguimos tan de cerca sus clases, la profesora Espinosa pide recordar que somos sus padres y no sus maestros y que, en vez, de enseñarles, nos toca acompañar.
“Los niños se equivocarán al sumar o al escribir y es normal, no motivo para reprenderlos. Como psicólogos sabemos de la importancia de validar las emociones infantiles, pero los adultos suelen minimizar esto y, cuando los pequeños les comparten su aburrimiento por las clases o su dificultad para seguir un tema, en vez de preguntarles ¿y a qué se debe?, suelen revirar con un ¡cállate y pon atención a la computadora!”.
Justo estos son los escenarios a evitar, pues atravesamos tiempos en que se ha disparado la violencia familiar y, a decir de la profesora Espinosa, si en vez de ceder al hartazgo por el encierro le apostamos a la empatía, estaremos tendiendo puentes de comunicación con nuestros hijos que se mantendrán de por vida.
“Y ello pasa por ser muy honestos y hablarles de lo que está pasando ahí afuera. Atravesamos momentos difíciles, pero no por ello debemos ocultarles nada; por el contrario, debemos abrir las puertas para que se acerquen, pregunten y sepan que de nosotros obtendrán la verdad”.
Enseñar con el ejemplo
Antes de levantar vuelo, en los aviones suele advertirse: “En caso de perder presión caerán al frente mascarillas de oxígeno. Los adultos que viajen con niños deberán colocarse su máscara primero y luego la del pequeño”, consejo que a decir de Montserrat Espinosa deberíamos seguir en muchos más escenarios de nuestras vidas.
“Lo que nos sugieren las azafatas es muy importante: no podemos salvar a nadie si no estamos bien antes nosotros y, por ello, en estos tiempos de pandemia debemos cuidar mucho de nuestra salud mental y emocional, pues los menores de 12 años son particularmente susceptibles a los estados de ánimo de sus padres”.
A decir de la profesora Espinosa, uno de los vicios más repetidos entre quienes laboran desde casa es creer que la modalidad home office implica trabajar 12 horas diarias y estar siempre al pendiente del teléfono, lo cual envía un mensaje muy negativo a los niños.
“De ahí que muchos pequeños crean normal el estar todo el día frente al ordenador en sus encargos escolares, o en el celular, cuando en realidad no deberían pasar más de 60 minutos frente a una pantalla (al menos no de corrido), pues ello impacta negativamente en su espalda, postura y capacidad de asimilar información, ya que cuando un pequeño se aburre pierde atención, y ello le genera trastornos de aprendizaje”.
En un video recién viralizado, al enterarse de la cantidad de deberes que le dejaron en sus clases en línea, un pequeño colombiano de seis años explota contra su abuelita y le dice: “¡Siete tareas!, ¡no jodas, Rosa! ¡Ya estoy harto de dibujar!”, a lo que la abuela responde, “y cuando cumplas siete serán 100 tareas porque irás en un grado más avanzado”, situación que, aunque tiene tintes cómicos, para la maestra Espinosa refleja uno de los mayores errores al diseñar programas de estudio: el creer que imponer una gran carga de trabajo repercutirá en más cosas aprendidas y en un mayor rendimiento de los alumnos.
Debemos entender –señala la académica– que los seres humanos poseemos procesos cognitivos básicos (sensación, percepción, atención y memoria) que se ven rebasados ante cantidades desmedidas de información. Si hacemos que los niños pasen seis horas frente a una computadora y después los ponemos a hacer tareas sin fin, les generamos una sobreestimulación, es decir, impedimos que todos esos estímulos lleguen y se decodifiquen de forma adecuada.
“En los últimos meses hemos visto que, en vez de imponerles muchas actividades, es más efectivo plantearles un solo proyecto vinculado con su realidad que los lleve a aprender de forma permanente, pues la primera estrategia los lleva a divagar y a aburrirse, mientras que la segunda los mantiene atentos y asimilando conocimiento”.
Por ello, para Montserrat Espinosa es muy importante que los padres eviten estas saturaciones y promuevan que el niño se dé un respiro de la computadora o el televisor de vez en cuando. “Y lo más importante, debemos mostrarles que no es necesario dedicar todo el día a la escuela y lo crucial de distribuir bien el tiempo, algo que sólo entenderán si nos ven respetar nuestros horarios de trabajo y que no estamos en el home office mañana, tarde y noche, pues los niños aprenden mucho más de lo que nosotros hacemos, y no tanto de lo que les decimos”.
A una distancia de 60 millones de años luz, en las galaxias Antena, existen 38 regiones de cúmulos con cuatro mil estrellas masivas, llamadas Wolf-Rayet. Hasta hace algún tiempo eran desconocidas, pero un golpe de suerte llevó a Mauricio Gómez González, investigador del Instituto de Radioastronomía y Astrofísica a descubrirlas.
“El año pasado impartía una clase a estudiantes de maestría y descargué unos datos públicos del telescopio de Canarias para mostrárselos, y ahí encontré la huella digital de estos objetos en su espectro”, señaló el investigador.
La mitad son estrellas ricas en nitrógeno y la otra mitad en carbono. Las Wolf-Rayet son descendientes de las estrellas más masivas, con hasta 50 o 100 veces la masa del Sol. Al ser tan grandes sus procesos de fusión son mucho más eficientes que en astros de masa baja, por lo tanto, viven poco tiempo.
Comparadas con el Sol (con baja masa y que podrían existir hasta nueve mil millones de años) estas estrellas masivas duran de dos a cuatro millones de años, una cifra muy pequeña en el ámbito del cosmos. De hecho, su última fase de evolución es la llamada Wolf-Rayet y representa el 10 por ciento de su edad.
Se caracterizan por importantes pérdidas de masa mediante fuertes vientos que enriquecen el medio interestelar en donde se encuentran. “Una estrella en fase Wolf-Rayet pierde sus capas externas como si fuera una cebolla mediante fuertes vientos”.
Actualmente, las galaxias Antenas se fusionan y “esto las hace muy interesantes por el fenómeno en sí, pero también porque son progenitoras de cierto tipo de supernovas que producen estallidos de rayos gamma”.
Para esta investigación, el equipo de la UNAM liderado por Gómez González utilizó observaciones públicas del Telescopio Very Large (VLT), ubicado en Chile y así identificaron la región.
Dos tipos de escenario
De acuerdo con el astrónomo de la UNAM en este cúmulo se encuentran dos tipos de estrellas: de carbono y de nitrógeno. “Esto nos brinda un parámetro importante para comparar dos modelos de evolución de estrellas, ya sea por la vía individual o por un sistema de binarias”.
“En el primer escenario tenemos a la estrella individual que pierde sus capas y deja expuestas las internas que son más calientes, éstas son capaces de calentar o ionizar el ambiente que la rodea y así surge la estrella Wolf-Rayet”.
En el segundo escenario existe un grupo de estrellas girando alrededor de un centro de masa. Por ejemplo, en un sistema binario la estrella Wolf Rayet pierde sus capas externas poco a poco porque transfiere su material a su estrella compañera.
Al dejar expuestas sus capas más calientes fue que el investigador de la UNAM las pudo detectar desde la Tierra, es decir, observó en su espectro elementos como helio, nitrógeno, carbono y oxígeno.
Al final de su vida, se plantea que estos astros evolucionan como supernovas y del remanente podría quedar o una estrella de neutrones o un agujero negro. De hecho, “en la fase de supernovas pueden generar fenómenos astrofísicos muy interesantes como es un estallido de rayos gamma”.
Desde que estas estrellas se descubrieron en 1867 por Charles Wolf y George Rayet en el observatorio de París, nunca se ha observado que una explote como supernova. “Encontrar miles de Wolf-Rayet incrementa esta probabilidad para que la humanidad pueda observarlo”.
Por supuesto, existen supernovas que han sido estudiadas, pero ninguna que haya sido previamente clasificada como estrella Wolf-Rayet, concluyó el académico universitario.
El director general de la OMS ha criticado la actitud “egoísta” de los países ricos y las farmacéuticas frente a las vacunas del COVID-19. Tan solo, 25 dosis, han llegado a los países más pobres, dijo Tedros Adhanon Gebreyesus que advirtió que el mundo está ante un “catastrófico fracaso moral”.
Durante un discurso ante el comité ejecutivo de la Organización Mundial de la Salud, que se reúne de forma virtual, Tedros aseguró que los países ricos están acaparando el suministro de las vacunas en detrimento de los más pobres.
“Ya se han administrado más de 39 millones de dosis de vacunas en al menos 49 países ricos. Solo 25 dosis se han repartido en un país pobre. No 25 millones; no 25.000; solo 25. Tengo que ser franco. El mundo está al borde de un catastrófico fracaso moral, y el precio de ese fracaso se pagará en vidas y medios de subsistencia en los países más pobres del mundo”
Tedros dijo que algunos países que tienen un discurso favorable al acceso equitativo a las vacunas, en realidad están dando prioridad a sus propios acuerdos con los fabricantes, aumentando los precios y saltándose las listas de espera de suministros.
El director general criticó que las farmacéuticas prefieren obtener licencias en países ricos, donde obtienen más beneficios, a enviar los datos para una aprobación mundial
“Este enfoque egoísta no sólo pone en peligro a los más pobres y vulnerables del mundo, sino que también está condenado al fracaso”, advirtió. “Estas acciones sólo prolongarán la pandemia y nuestro sufrimiento, así como las restricciones necesarias para contenerla”.
La autora de la saga de Ripley, entre otras novelas, así como de varios libros de relatos, siempre se sintió atraída y fascinada por la maldad y la culpa
Estuvo a punto de no nacer, pues su padre presionó a su madre, una ilustradora de la famosa revista de moda Women’s Wear Daily, para que abortara. Sin embargo, Patricia resistió la trementina que su progenitora ingirió y vio la luz del mundo el 19 de enero de 1921 en Fort Worth, Texas, Estados Unidos.
Bautizada como Mary Patricia Plangman, el apellido con que se volvería célebre –Highsmith– lo recibió del segundo marido de su madre. En 1927 se trasladó con ésta a Nueva York y, tras
egresar de la Julia Richmond High School, se inscribió en el Barnard College, donde estudió filología inglesa.
Posteriormente, recomendada por su amigo Truman Capote, autor de A sangre fría, pasó ocho semanas en Yaddo, la comunidad de artistas de vanguardia ubicada en Saratoga Springs.
En 1945 publicó su primer cuento en la revista Harper’s Bazaar y, en 1950, su primera novela: Extraños en un tren, la cual fue llevada al cine un año después, con el mismo título, por Alfred Hitchcock.
En 1952 apareció su novela El precio de la sal pero, debido a su trama lésbica, tuvo que firmarla con el seudónimo Claire Morgan (en 1987 sería reeditada bajo el título Carol, con el verdadero nombre de su autora).
Tres años después, en 1955, salió de la imprenta la primera novela que le dedicó a Tom Ripley, un estafador y asesino muy inteligente y carismático: El talento de Mr. Ripley. A ésta le seguirían La máscara de Ripley (1970), El juego de Ripley (1974), Tras los pasos de Ripley (1980) y Ripley en peligro (1991).
Highsmith escribió otras novelas, como Ese dulce mal (1960), Las dos caras de enero (1961), La celda de cristal (1964) y Crímenes imaginarios (1965), así como varios libros de relatos, entre los que destacan Once (1970), Pequeños cuentos misóginos (1974), A merced del viento (1979) y Catástrofes (1987). Siempre se sintió atraída y fascinada por la maldad y la culpa.
En 1963, la escritora estadounidense dejó su país natal para establecerse en Europa. Primero vivió en Irlanda, luego en Inglaterra y Francia, y, a partir de 1982, en Suiza.
Alcohólica desde su juventud y fumadora compulsiva, falleció el 4 de febrero de 1995 en un hospital de Locarno, a causa de una anemia aplásica y un cáncer pulmonar.
Su amigo Graham Greene escribió acerca de ella: “Es una escritora que ha creado su propio mundo, un mundo claustrofóbico e irracional, en el cual entramos cada vez con un sentimiento de peligro personal, con la cabeza inclinada para mirar por encima del hombro, incluso con cierta renuencia, pues vamos a experimentar placeres crueles […]. Patricia Highsmith es una poetisa de la aprensión y el recelo más que del miedo. […] A mi modo de ver, su mejor novela es El temblor de la falsificación y si me preguntaran por su tema, respondería que es el recelo, la aprensión.”
Basadas en El talento de Mr. Ripley, se han filmado las películas A pleno sol (1960), dirigida por René Clément y protagonizada por Alain Delon; y El talento de Mr. Ripley (1999), dirigida por Anthony Minghella y protagonizada por Matt Damon.
A partir de La máscara de Ripley se ha rodado Mr. Ripley: el regreso (2005), dirigida por Roger Spottiswoode y protagonizada por Barry Pepper.
Y basadas en El juego de Ripley, se han filmado El amigo americano (1977), dirigida por Wim Wenders y protagonizada por Dennis Hopper; y El juego de Ripley (2002), dirigida por Liliana Cavani y protagonizada por John Malkovich.
Sobre este singular personaje, Ripley, la misma Highsmith dijo alguna vez: “Me gusta porque crea historias por sí mismo, es amoral y hace cosas ilegales.”
Con un claro de triunfo por 3 a 0 sobre Puebla en el Estadio Cuauhtémoc, el equipo femenil de los Pumas alcanzó su segunda victoria seguida en el Guard1anes Clausura 2021 de la Liga BBVA MX Femenil.
Las auriazules ocupan de manera momentánea el liderato general de la competencia, con seis puntos y una diferencia de goles de +5, aunque aún están por jugarse cuatro encuentros más en la jornada y podrían verse desplazadas de la primera posición.
La victoria de las visitantes comenzó a forjarse desde los primeros minutos de la contienda. Al minuto 10, Daniela García abrió el marcador con un disparo raso a la entrada del área de las poblanas. En el 21’, Paola Chavero superó la marca de dos defensas y perforó la meta local con un tiro que la guardameta no alcanzó a desviar lo suficiente.
Y el último tanto se produjo en el primer minuto del tiempo de compensación de la parte complementaria. Después de escaparse por la banda izquierda, Laura Herrera se plantó frente a la portera Brissa Rangel y envió el balón al fondo de las redes al lanzar un disparo cruzado.
La directora técnica de las Pumas, Ileana Dávila, manifestó: “Trabajamos para cualquiera de los rivales igual: Monterrey, Puebla o como se llame. Todos los días hay que ir mejorando e ir puliendo los detalles para lograr nuestros objetivos”.
Al preguntársele sobre las jugadoras que llegaron al plantel para esta campaña, dijo: “Se están adaptando apenas al nuevo sistema. Llegaron casi al final de la pretemporada y todavía van agarrando el ritmo, el estilo de juego que tenemos en Pumas. Tienen calidad y van a tener oportunidad. Me parece que cualquiera de las jugadoras que tengo puede desempeñar bien el trabajo”.
En su próximo compromiso, las felinas iniciarán la actividad de la Fecha 3 cuando reciban a las Rayadas de Monterrey, el jueves 21 de enero a las 15:45 horas, en las instalaciones de la Cantera.
En el México de los años 80 el dólar pasó de los 22.95 pesos a los dos mil 483 pesos con 37 centavos; el gobierno en turno consideró más importante organizar mundiales de futbol que reconstruir una capital devastada por un sismo; el narco se consolidó y asesinó a agentes de la DEA a fin de mandar mensajes al más puro estilo Corleone y, sin embargo, las planas de los diarios solían recrearse con historias sobre los chavos banda (o panchitos), aquellos jóvenes marginados y marginales tildados de criminales, drogadictos, violadores y resentidos.
“Fuimos una cortina de humo para el Estado, un distractor. Se nos pintó como los responsables del terror y la inestabilidad política y social del país cuando, a decir verdad, las culpas estaban en terrenos muy distintos”, reflexiona uno de esos (hoy no tan) chavos banda que aparecen en Sin tantos Panchos, documental de la directora Verónica de la Luz, el cual recién obtuvo los premios Coyote, del Festival de Cine de Barrio, y el Ojos de Perro contra la Impunidad, otorgado por el colectivo homónimo donde participa el periodista Témoris Grecko, quien destacó la notable investigación que posibilitó el proyecto.
“El esfuerzo fue mucho. Fueron cinco años de trabajo y 36 horas de grabación destiladas en apenas 68 minutos”, explica la directora, quien con este largometraje obtuvo el título de maestra por la Escuela Nacional de Artes Cinematográficas de la UNAM.
Y aunque Sin tantos Panchos bien puede considerarse una tesis fílmica, para Verónica es más bien una película independiente creada a base de esfuerzo y autogestión, receta seguida por casi todos quienes desean hacer cine en México y no pertenecen a una de esas élites que siempre terminan acaparando apoyos económicos y reflectores.
“Hicimos todo con recursos muy limitados y de mucho de lo retratado en pantalla no pagamos derechos, de plano no nos alcanzaba. Ante esta restricción presupuestal mejor optamos por llegar a acuerdos con los directores cuya obra aparece en el filme, lo mismo hicimos con quienes nos prestaron sus archivos fotográficos e incluso logramos que una de las hijas del cantautor José Luis DF (el llamado padre del rock macizo) nos donara toda la música ahí empleada”.
Sin embargo, para Verónica lo más difícil fue rastrear a aquellos chicos banda pues hoy, a sus casi 60 años, siguen viendo con recelo a quien llega con una cámara o un micrófono. “Ya están hartos de que los reporteros se acerquen a preguntarles lo mismo, siempre con morbo y amarillismo. Mi aproximación fue distinta, les expliqué que mi investigación era académica y que buscaba entender cómo fue en realidad su vida en los 80, sin estigmas ni prejuicios. Esto fue la clave para que bajaran la guardia, confiaran en mí y me contaran su historia”.
Abriendo puertas a las siguientes generaciones
Verónica de la Luz nació y creció en el Ecatepec (o Ecatepunk, como se le dice coloquialmente) de los años 80 y, por lo mismo, no es ajena al ambiente de los chavos banda. De niña los veía pasear cerca de su casa y de su escuela, e incluso dos de sus tíos pertenecieron a algunas de esas pandillas; de ahí su inquietud por saber qué fue del colectivo.
“En aquellos tiempos se escuchaba a cada rato en los medios: los Panchitos robaron aquí, los Panchitos violaron allá, los Panchitos armaron trifulca acullá, y este discurso era tan insistente que permeó en la gente, la cual terminó por morirse de miedo, hasta que un día, de la noche a la mañana, se les dejó de mencionar. Mi pregunta era, ¿qué pasó?, ¿desaparecieron? No podía quedarme así, debía saber más”.
A fuerza de preguntar y tocar puertas, eventualmente Verónica dio con Pablo El Podrido, exintegrante de los Mierdas Punks, de Ciudad Neza; después contactó a José Luis El Hacha, uno de los fundadores de Los Panchitos (la mítica banda de la colonia 16 de septiembre que dio nombre a todo chico banda, pues sin importar su pandilla, en el imaginario colectivo cualquiera de estos chavos era un panchito), y finalmente llegó con El Toluco, quien perteneció a Los Nenes de Jalalpa cuando la Álvaro Obregón era delegación y la Ciudad de México, el DF.
Para filmar Sin tantos Panchos, Verónica de la Luz leyó libros como Las bandas en tiempos de crisis, de Francisco Gómezjara; ¿Qué transa con las bandas?, de Jorge García-Robles, o La banda, el consejo y otros panchos, de Fabrizio León, y también repasó muchas cintas mexicanas de culto, como Nadie es inocente (1987), de Sarah Minter; Sábado de mierda (1988), de Gregorio Rocha; La neta no hay futuro (1988), de Andrea Gentile, o Fonqui (1984), de Juan Guerrero, película del CCC que inauguró lo que despectivamente se bautizaría como el cine naco.
“Hay muchísimo material de la época y con lo recolectado, y con lo que me dijeron El Nene, El Hacha y El Podrido, pude reconstruir aquellos días y ver que estos jóvenes, pese a ser retratados por la prensa como delincuentes y escoria, en realidad eran muchachos inquietos que con frecuencia eran vejados por la policía tan sólo por su forma de vestir y peinarse, por ser jóvenes y por oír a todo volumen rolas de punk y rock”.
Sobre qué fue de los chicos banda, y más allá de la obviedad de explicar que crecieron y envejecieron, Verónica encontró que muchos de ellos fueron cooptados por partidos políticos como militantes, otros trabajan de burócratas, algunos siguen en la cárcel, un puñado está en el panteón y hay quienes terminaron dando clases como académicos.
“Aunque quizá lo más interesante es observar que, a nivel generacional, pasaron la estafeta y se convirtieron en los primeros punks de la Ciudad de México, y después se transformaron en algo más, ya que las tribus urbanas siempre están cambiando, nunca dejan de evolucionar”.
A decir de Verónica, la principal enseñanza que le deja el haber filmado Sin tantos Panchos fue el constatar que los chicos banda, más que desestabilizar a la sociedad, en realidad le abrieron brecha a quienes vendrían después, pues tanto ella como los más jóvenes se han visto beneficiados por sus reclamos de espacios y por sus exigencias de mejores viviendas, trabajos y educación.
“Con otra cosa que me quedo es con la reflexión formulada por los mismos chavos banda tras ver la cinta. Prácticamente todos dijeron que fue un error darse en la madre entre sí cuando los enemigos eran el gobierno y los medios. Todos admiten que eran muy jóvenes como para sopesar las consecuencias, pero que hoy saben que la historia hubiera sido muy distinta si, en vez de pelear por un territorio, se hubieran unido para plantarle cara a las autoridades y parar tanto abuso contra ellos”.
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El Instituto del Deporte, en coordinación con la Secretaria de Educación, Ciencia y Tecnología, Secretaría de Salud de la Ciudad de México y el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición “Salvador Zubirán”, realizan una guía de ejercicios físicos de recuperación para pacientes que hayan padecido Covid-19.
Con el apoyo de la subdirectora de Medicina del Deporte del INDEPORTE, doctora Leslie Carbajal, y los fisioterapeutas Paulo Espinosa y Marcela Vázquez, se realizaron cuatro rutinas en video: “Guía de ejercicios de respiración”; “Guía de ejercicios en cama”; “Guía de ejercicios en silla”; y “Guía de ejercicios de pie”.
El director general del INDEPORTE, Rodrigo Dosal Ulloa, explicó que en estos tiempos de emergencia sanitaria la dependencia que dirige ofrece a la ciudadanía conceptos prácticos de salud, a través de la activación física.
El virus SARS-Cov2, causante de la enfermedad Covid-19, infecta principalmente a los pulmones y al sistema respiratorio superior; no obstante, también es importante restablecerse a nivel muscular, pues puede dejar secuelas.
Cualquier terapia de recuperación deberá consultarse con un médico para su aprobación y seguridad del propio paciente.
Por su parte, los terapeutas que apoyaron la realización de los videos, coincidieron que es una gran iniciativa del Gobierno de la Ciudad de México, porque mucha gente que ya padeció Covid-19 no tiene la información adecuada “y le vendrá muy bien realizar un trabajo tanto preventivo como activo durante el proceso de recuperación”.
Los terapeutas hicieron énfasis en la importancia de realizar una terapia post Covid-19, porque es una “área que se estaba dejando un poco aparte, ya hemos visto varias secuelas en personas que padecieron la enfermedad, tanto a nivel neuropático como pulmonar”.
Es justo decir que cualquiera puede beneficiarse de las técnicas de respiración profunda propuestas en los videos, pues estas juegan un papel especialmente importante en el proceso de recuperación después de haber padecido Covid-19. Los ejercicios pueden iniciarse en casa durante el aislamiento e incorporarse fácilmente a la rutina diaria.
Asimismo, es importante la asesoría médica y no realizar estas rutinas si se presentan síntomas de fiebre, dificultad para respirar, dolor de pecho, hinchazón de piernas, entre otras molestias.
La guía de ejercicios físicos de recuperación para pacientes que hayan padecido Covid-19 se puede consultar en el sitio de internet del INDEPORTE: indeporte.cdmx.gob.mx y en la página “Salud en tu vida” del Gobierno de la Ciudad de México: prevencion.saludentuvida.cdmx.gob.mx
Además, en las redes sociales del INDEPORTE, en Facebook y Twiter: DeporteCDMX, en Instagram: deporte_cdmx y en el canal de Youtube: Instituto del Deporte de la Ciudad de México.
Durante su primera sesión plenaria del año, celebrada de manera remota el jueves 14 de enero, la Academia Mexicana de la Lengua eligió a la ensayista, narradora, poeta y catedrática Angelina Muñiz-Huberman como miembro de número de la institución; ocupará la silla VII, vacante por el deceso de Miguel León-Portilla.
Escritora prolífica, mujer universal; doctora en letras por la UNAM y en lenguas romances por la Universidad de Pensilvania y la Universidad de Nueva York, profesora universitaria de literatura medieval y de literatura comparada, Muñiz-Huberman es una de las voces más singulares de las letras hispanoamericanas, e investigadora acuciosa de la mística hebrea (inauguró los estudios sefardíes en México) y la cabalística como referente de la crítica literaria. Al respecto, ha escrito los libros El atanor encendido. Antología de cábala, alquimia y gnosticismo, Las raíces y las ramas: Fuentes y derivaciones de la cábala hispanohebrea, El sefardí romántico y En el jardín de la Cábala. Otros ejes de su pensamiento y labor creativa, además de la autobiografía, la transgresión y la intertextualidad, son el exilio español, la Guerra Civil y la muerte, como puede constatarse en obras como El canto del peregrino. Hacia una poética del exilio, Dulcinea encantada, La sombra que cobija y Rompeolas, su poesía reunida. Además, es precursora de la novela neohistórica en la literatura mexicana, con Morada interior, y creó el género de las seudomemorias, con Castillos en la tierra, Molinos sin viento y Hacia Malinalco.
Entre los galardones que ha recibido Muñiz-Huberman destacan los premios Xavier Villaurrutia, Universidad Nacional, Sor Juana Inés de la Cruz y Nacional de Artes y Literatura; el reconocimiento Escuela Nacional de Altos Estudios de la Facultad de Filosofía y Letras, UNAM, y la Medalla Arqueles Vela, que concede la Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística.