Prepa 8, cuna de la halterofilia en la UNAM

En la Escuela Nacional Preparatoria Plantel 8 Miguel E. Schulz de la UNAM, se practica la halterofilia desde 1998. En sus instalaciones se han formado atletas de alto rendimiento como las egresadas Leticia González y Yara Ríos.

El entrenador César Jiménez Vázquez destacó que la rama femenil ha tenido buenos resultados como el primer lugar del equipo femenil en la Universiada 2019. Leticia González, estudiante de la Escuela Nacional de Trabajo Social (ENTS) de la UNAM, obtuvo el segundo lugar en la Universiada y en la Olimpiada nacionales en la categoría de 76 kilogramos, y recientemente, ganó el primer lugar en los Juegos Universitarios en la categoría de 81 kg.

“Me empodera mucho mi deporte, siento mucha satisfacción al levantar tanto peso, me siento muy poderosa”, expresó la deportista universitaria y agregó que la halterofilia la ha vuelto más disciplinada y saludable.

Por su parte, Yaira Ríos resaltó que aparte de un escape de la vida cotidiana, la halterofilia es un estilo de vida que practica desde que ingresó a la Preparatoria.

En ese sentido, la práctica de esta disciplina en la UNAM ha permitido el desarrollo de deportistas universitarios quienes representan a nuestro país a nivel internacional.

Raras. Ensayos sobre el amor, lo femenino y la voluntad creadora, de Brenda Ríos

Cuando llegó Raras a mis manos lo primero que pensé fue en si sería una referencia a Los raros, de Rubén Darío. ¿Me encontraría con biografías o semblanzas de mujeres escritoras que Brenda admira? ¿Serían 19, 21? ¿Mexicanas, internacionales? ¿Cómo sería una adaptación de un texto publicado hace más de 120 años? ¿O quizá sólo se trataba de un guiño en el título? La curiosidad me llevó al índice. Y entonces mi interés siguió aumentando: después de repasar la lista resultó que no conocía a la mayoría de las mencionadas.

Veinticinco nombres femeninos entre los que apenas reconocí a Clarice Lispector, Inés Arredondo, Elena Garro, Anaïs Nin, María Zambrano y Amy Winehouse. Seis personajes que ya me dejaban entrever que se trataba de perfiles de diferentes edades, países y profesiones. La lectura se antojaba.

Un anzuelo más: había escuchado cosas maravillosas de las letras de la autora y ya tocaba leerla; Brenda Ríos, desde Acapulco primero y ahora desde Ciudad de México, nos deleita con poesía, crónica y ensayo y en su currículum ya brillan dos premios: el Premio Estatal de Poesía María Luisa Ocampo y el Premio Nacional de Poesía Ignacio Manuel Altamirano. Conocerla en persona fue además la confirmación de que su talento estaba bien acompañado de una gran personalidad, caracterizada por una contagiosa alegría, un gracioso ingenio, una seductora seguridad, un gratificante entusiasmo y un encomiable humor. Por si esto no bastara, una guinda al pastel: la editorial Turner, garantía de textos siempre actuales, interesantes, que invitan a la reflexión, a la conversación y cuya lectura siempre te deja con ganas de más. Ésta no fue la excepción.

¿Por dónde empezar? ¿Cómo emprender esta obra? Una lexicógrafa, ante una duda, siempre acude a su mejor socio: el diccionario.

raro, ra Del lat. rarus adj. Que se comporta de un modo inhabitual. adj. Extraordinario, poco común o frecuente. adj. Escaso en su clase o especie. adj. Insigne, sobresaliente o excelente en su línea. adj. Extravagante de genio o de comportamiento y propenso a singularizarse.

Si cada una de estas vidas se ajustaba a una o varias de estas acepciones habría merecido el hecho de abrir este libro. Rarus, en latín, se refería a alguien notable, excepcional, a una persona de las que hay pocas. Mujeres ha habido millones en la historia de la humanidad, pero de las que se haya tenido noticia o cuyos méritos hayan sido reconocidos, seamos sinceros, no tantas.

En estos días en los que se discute sobre la mujer, su papel en la civilización, en la sociedad actual, en los ámbitos laboral y familiar, sobre su reivindicación de equidad, y se hacen propuestas para lograrlo, se denuncian situaciones de discriminación y se producen numerosos enfrentamientos de pensamiento y de formas de expresarlo, se agradecen las voces constructivas, no como ejemplo, sino como invitación al diálogo, la cavilación y el cuestionamiento. Todo un reto al que debería resultar difícil resistirse.

Este libro se suma a esas voces. Sin polemizar, Brenda Ríos sencillamente habla de veinticinco mujeres que lograron defender su proceder, que confrontaron su vida constantemente, vivieron con pasión sus carreras, sus relaciones y sus metas, en las que desarrollaron su creatividad y en las que consiguieron destacar y ser felices.

Les costó momentos de duda, temor, soledad, fueron juzgadas, criticadas, llamadas rebeldes, locas, inconformes, pero lo cierto es que fueron conscientes de transitar un camino con tropiezos en el que se plantearon muchas preguntas, a veces con más de una respuesta y otras veces sin llegar a una concreta. El resultado siempre valió la pena.

Ríos cuenta cómo llegó a ellas, en qué contexto, bajo qué interés o si fue casualidad y de manera muy honesta y amena nos permite asomarnos a esas historias que se convierten en nuevas voces, nuevos lenguajes. Repasa algunas anécdotas, datos y logros y lo mismo señala sus aciertos como sus contratiempos o resbalones, lo que produce un efecto de credibilidad que se agradece enormemente.

Empecé por Becky G. Me llamó la atención su nombre. No tenía ni idea de quién era. Y al parecer, la autora tampoco cuando la vio por primera vez en un televisor en el fondo de un bar ruidoso. Aquella latina llenaba la pantalla, desafiaba al telespectador y dominaba todo tipo de movimientos coreográficos adornados de una estética destinada a atraer la atención. Y ahí estaba ella, en plena protesta corporal a través de la música, en un mundo en el que la mujer no acostumbra a llevar la voz cantante en el poder sexual. Pasamos de mujeres que le cantaban al dolor, al desamor, al abandono y a la espera del ser amado a una joven que parece querer hacer la revolución a través de sus letras y bailes.

De repente, a partir de un sencillo video musical entre cervezas, Brenda Ríos enlaza todo un análisis sobre el idioma en el que se canta, los estereotipos en los géneros y los cambios en la escena artística. Y lo hace de un modo tan sutil, tan entretenido y tan lleno de puntos en los que pararse a pensar, que convierte la lectura en una charla enriquecedora. Una a una se suceden de forma similar relatos que uno puede leer página a página o dando brincos en el volumen.

Así conocí a la poeta española Berta García Faet y en su texto aparece también mencionada Erika Martínez con una demoledora poesía; porque cada reseña está repleta además de alusiones, referencias y un surtido listado de libros, canciones y obras que correrás a buscar después de cada punto final; a la tapatía Xel-Ha López, con la que confirmamos que los versos mexicanos están en buenas manos, o a la australiana Hannah Gadsby, una standupera y cómica que la autora descubrió en uno de los maratones de series que todos hacemos. Todas se ligan, se relacionan, se mencionan en una y otra narración sin a priori tener nada que ver. Porque de eso se trata, de demostrar que en cada historia siempre hay algo en lo que podemos identificarnos, motivarnos, proyectarnos.

¿Me sirve de algo conocer la vida de otros? Pues en esta ocasión, sí. Para abrir los ojos ante otras formas de vivir, de pensar, que nos sirva, quizá, para replantearnos la vida propia, el pensamiento propio, cuestionarnos lo que sentimos, opinamos, conocemos y, en una de ésas, impulsarnos para cambiar, para explorar, transitar por sendas no planeadas y, en el mejor y último de los casos, llegar a un lugar en el que nos sintamos más felices, más plenos, más completos. Y entonces, estar listos para mostrar el camino a otros. Porque la lectura puede llevarnos a muchas experiencias y sensaciones, puede abrirnos a la posibilidad de entablar diálogos con otras personas, en otros lugares, de otros tiempos.

Este libro, sin duda, también es una reivindicación, una idea de visualizar esas vidas menos conocidas porque reciben menos focos, una pregunta a la que quizá alguien encuentre una respuesta satisfactoria, un incentivo que nos haga dar ese paso que no nos atrevíamos a dar, salirnos de un molde que nos constreñía, explorar recovecos desconocidos, conocer y conocernos mejor y sentir que en cada página tenemos una cómplice, una aliada, un apoyo y un aliento que nos dé fuerza.

Es, sobre todo, un homenaje y un agradecimiento a las que allanaron (y nos siguen allanando) el paso. Si lo que buscan es una lectura que no los deje indiferentes o un tema de conversación que llevar a su siguiente sobremesa, sin duda este libro será una buena compañía. Brenda, felicidades, esperamos otras veinticinco raras más.

Turner, Ciudad de México, 2019

 

Texto original: https://www.revistadelauniversidad.mx/articles/091e8795-d95b-474d-8590-6e0d7041d74c/raras-ensayos-sobre-el-amor-lo-femenino-y-la-voluntad-creadora-de-brenda-rios

FIL de Guadalajara entrega reconocimiento póstumo a Miguel León-Portilla

La Feria Internacional del Libro de Guadalajara otorgó el premio Homenaje al Bibliófilo José Luis Martínez a Ascensión Hernández y de manera póstuma al escritor Miguel León-Portilla. Reconocieron su trabajo de investigación y por mantener vivo el legado de las culturas mesoamericanas.

Hacer este reconocimiento a dos de las mentes más importantes para el rescate de la historia precolombina de nuestro país nos llena de regocijo, aseguró  Sergio López Ruelas, coordinador de bibliotecas de la Universidad de Guadalajara.

Este premio es otorgado por la FIL desde hace 19 años para destacar la labor de aquella persona que ama los libros, que siente pasión, interactúa con ellos y los cuida como un preciado tesoro. “Cuando un bibliófilo contempla su biblioteca admira el amor y dedicación por las obras que conforman su colección, los libros son pensamiento escrito a través del cual la memoria se conserva viva y el universo puede reflejarse a manera de palabras”, explicó López Ruelas.

Expresó su reconocimiento para Ascensión Hernández, mujer visionaria, amante de la cultura, la historia y estudiosa de los antepasados, “son muy pocos los pensadores que se han empeñado en rescatar a nuestros antepasados prehispánicos con un estudio perfecto del náhuatl y el exilio español”.

Por su parte, Hernández recordó que el amor a los libros los unió siempre, para los dos eran algo importante en su vida, “les dimos un uso de conocimiento. De la materia que hablara (Miguel León-Portilla) hacía una broma, tenía la cualidad de estar contento, de estar con la gente que lo quería. Fue un padre excelente, un abuelo que le encantaban sus nietos y me apoyó en todo”.

Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP) 2019

La vida abierta

“Cuando era niña, mi mamá tenía en su casa un cuadrito de papel amate con un fragmento escrito a mano de un poema de López Velarde que se llama Todo: “Uno es mi fruto: / vivir en el cogollo / de cada minuto”. Me intrigaba porque la caligrafía no me dejaba distinguir la palabra cogollo, y aunque la hubiera distinguido, seguramente no hubiera sabido qué significaba. Mi abuela tenía un cuadrito igual en su casa, pero el suyo tenía un fragmento de León Felipe que decía “Nadie fue ayer, / ni va hoy, / ni irá mañana / hacia Dios / por este mismo camino / que yo voy”. Eran versos que estaban en mi inconsciente”.

En el marco de la Feria Internacional del Libro de los Universitarios, Filuni 2019, la Dirección General de Publicaciones y Fomento Editorial dio a conocer a la ganadora de la segunda convocatoria del Premio Poesía Joven UNAM, Valeria List, estudiante universitaria quien actualmente cursa la maestría en letras españolas.

El poemario ganador es un compendio de sesenta textos, escritos en verso y en prosa, a través de los cuales la autora habla del duelo. Los textos fluyen a lo largo de las páginas, conversando a veces con actores de los recuerdos como Ramana Maharshi, Harry Partch o Hito Steyerl; o dialogando con otros escritores como Lorenzo García Vega, Steiner, Marx, Olvido García Valdés, Unica Zürn, René Char, entre otros.

Originaria de Puebla, Puebla, Valeria List no podría decir exactamente qué la llevó al camino de la poesía, pero recuerda que cuando estaba en la carrera, un día salió de la Biblioteca Central y vio carteles pegados que decían “¿TE GUSTA LA POESÍA? ¿Crees que es la única manera de vivir? ¿No te imaginas un mundo sin ella?”. Estos avisos convocaban a reuniones que hacía un amigo suyo, Daniel Torres, profesor del Colegio de Estudios Latinoamericanos, en las que leían poesía y narrativa, además de funcionar como una especie de taller.

Cuando leyó ese cartel se preguntó si la poesía era así de vital para ella, si, en efecto, no se podía existir sin poesía, si el mundo no podía ser sin ella, y la respuesta fue afirmativa e innegable. “Tiempo después, en una clase de David Huerta, él dijo algo así como que hay quienes no pueden vivir sin poesía, y yo ya me asumía como una habitante de ese mundo”.

Para la edición 2019 del Premio Poesía Joven UNAM el jurado fue conformado por María Baranda, Eloy Urroz y Eloy Sánchez, quienes resolvieron de manera unánime declarar como ganador el libro La vida abierta, “en virtud de su logrado desarrollo de un mundo íntimo, propio y definido a partir de imágenes personales. De su aliento poético que revela conocimiento y dominio del género por su habilidad para establecer un diálogo entre la poesía y una voz lírica de corte formal”.

Valeria conocía uno de los libros ganadores de la edición 2018, Cosas inútiles, de Iván Palacios Ocaña, esto fue un aliciente para interesarse en la convocatoria del año siguiente. Además, reflexionó que entre sus manos ya tenía un libro terminado, que deseaba poder publicar, por lo que el premio que otorga la UNAM le abría esa oportunidad.

Algunos de los poemas en prosa los escribió desde hace tres o cuatro años, siente que en esta forma de escritura tiene mayor libertad para tratar temas sociales o hacer alusión a varias autoras y autores que le interesan. Aunque ya tenía una primera versión del libro en verso, pensó que en realidad ambas maneras de escribir son complementarias para el discurso que quería expresar, y que descubrió hasta un momento avanzado de su construcción.

Para Valeria List la promoción de la poesía en nuestro país es prácticamente inexistente, tanto para jóvenes como para cualquier otro grupo poblacional, cree que si se sigue consumiendo es porque se sigue produciendo de manera constante. Por ello, considera que el premio de la UNAM es una gran iniciativa y tiene potencial para ser uno de los premios de poesía joven más importantes de México, le emociona que la nueva edición no sólo convoque a poetas, sino también a cuentistas jóvenes, y sobre todo que sea un proyecto inclusivo de las lenguas indígenas.

“Es un poco extraño describirse a sí mismo, pero hay cosas que me gustan como caminar por la ciudad, la música brasileña y bailar. En general, tiendo a ser más alegre que melancólica, creo que de mi melancolía justamente salen algunos de los poemas que escribo, mi mamá siempre me dice que son tristes”.

La convocatoria 2020 del Premio Poesía Joven UNAM se publicó el pasado 31 de agosto, esta vez en conjunto con la Secretaría de Educación, Ciencia, Tecnología e Innovación de la Ciudad de México para convocar también a los jóvenes de las IEMs. Se seleccionarán de una a tres obras que se publicarán en coedición entre la UNAM y la SECTEI, los poemarios se recibirán desde la fecha de publicación hasta las 15 horas del viernes 29 de noviembre de 2019 y el fallo se dará a conocer el 28 de febrero de 2020.

La vida abierta se presentará por primera vez el viernes 6 de diciembre de 2019, en el estand de Libros UNAM dentro de la Fil Guadalajara, el libro estará a la venta a partir de ese momento en todas las librerías de la UNAM.

Karina Gidi da voz al clamor acallado de ‘La China’ Mendoza

(…) Era el agobio de nuestra carne y su electricidad que tenía tantas calles desconocidas. Torres de encaje y sirenas de barcos. Sonidos jamás oídos por mí (…)

En la Feria Internacional del Libro de Guadalajara 2019, Karina Gidi leyó fragmentos de De Ausencia, novela escrita en 1974 por María Luisa ‘La China’ Mendoza.

La obra forma parte de Vindictas, una nueva colección que la Dirección General de Publicaciones y Fomento Editorial (Libros UNAM) recientemente lanzó para conmemorar la labor de escritoras latinoamericanas que “el canon literario las volvió invisibles”.

Hasta el momento, la serie reúne las plumas de Luisa Josefina Hernández, Tita Valencia, María Luisa ‘La china’ Mendoza, Tununa Mercado y Marcela del Río, mujeres a quienes se les reivindica la urgencia de leerles.

Necesitamos reconocer que la mujer dejó de ser estática 

En la mayoría de las antologías de narradores, ensayistas y poetas del siglo XX, menos del 10 por ciento son mujeres, lamenta la escritora Brenda Ríos.

“Tú decías: ‘¿qué estaban haciendo las señoras en esa época? ¿Estaban cocinando para los maridos escritores o cuidando a los hijos?’, y siempre ha habido escritoras, el problema es que uno las lee como de culto, piensa en Josefina Vicens, quien es prácticamente desconocida a pesar de que se siguen editando sus libros”.

Entrevistada por UNAM Global, refiere que se puso de moda el hablar del ser femenino y de los derechos de la mujer. “Me parece importante que tratemos de hacer un discurso que considere que las mujeres necesitan ser leídas, vistas, que vayamos al cine a ver películas de mujeres, que vayamos al museo a ver cuadros de mujeres. Necesitamos reconocer que la mujer dejó de ser estática hace mucho”.

Brenda Ríos es ensayista, poeta y traductora. Estudió la maestría en Letras Latinoamericanas en la UNAM. Indica que su libro “se llama Raras, ensayo sobre el amor, lo femenino y la voluntad creadora, editado por Turner. Es un libro que quise hacer a partir de la referencia Los Raros, texto donde Rubén Darío cuenta un poco de las personas que él admira, de los escritores y poetas que él admira, que son todos franceses del siglo XIX”.

Afirma que quiso hacer un homenaje a ciertas mujeres, “no todas son escritoras, están aquí incluidas Anaïs Nin, Andrea Arnold, la reguetonera Becky G, Elena Garro, Emily Dickinson, Chantal Maillard, María Zambrano. El abanico es muy amplio, entre poetas, filósofas, narradoras”.

En el texto no sólo se encuentran mujeres célebres, canónicas, “también escritoras jóvenes como Xel-Ha López, Bertha García, que son escritoras menores de 30 años que quizá dejen de escribir, no lo sabemos. Quise ponerlas en diálogo, ponerlas a conversar en un espacio común”.

Señala que todo mundo le pregunta qué tienen en común Anaïs Nin, Anne Sexton y Elena Garro. “Tienen en común que son mujeres que hicieron una obra a pesar de muchas circunstancias, independientemente de su contexto histórico, lograron trasponer muchas reglas, muchas convenciones para hacer un mundo muy personal. Algunas veces este sacrificio fue mayúsculo, y otras veces, el mismo contexto les favoreció”.

Precisa: “Me gusta que está reconociéndose el trabajo de las mujeres. Creo que sí hay un boom, si vas a las mesas de novedades de las editoriales aquí en la FIL hay muchos libros escritos por mujeres, y creo que también era justo y necesario. No hay tiempos para compensar lo que no se había hecho, tan sólo en el contexto mexicano el Fondo de Cultura recuperó la obra de mujeres importantísimas como Elena Garro, Inés Arredondo, Amparo Dávila”.

Brenda Ríos es autora del poemario Escenas del Jardín (Mantis editores, 2015); de los libros de ensayo Empacados al vacío, ensayos sobre nada (Calygramma, 2013), Las canciones pop hacen pop en mí. Ensayos sobre lo ridículo, lo cotidiano, lo grotesco (IVEC, 2013), Del amor y otras cosas que se gastan por el uso. Ironía y silencio en la narrativa de Clarice Lispector (Tierra Adentro 2005); del cuento ilustrado para niños El vuelo de Francisca (Pehuén, 2011).

Actualmente, imparte talleres de escritura creativa y poesía en distintos espacios de la Ciudad de México.

Por una ciudad más incluyente

Con un esfuerzo por fomentar espacios donde las personas pueden ser ellas mismas y el talento se valore sobre las etiquetas, la empresa AT&T  promueve a través de políticas y buenas prácticas, la participación equitativa de grupos vulnerables a la discriminación, expresó Mayra Chio, vicepresidente adjunto de Diversidad e inclusión de AT&T México.

De acuerdo con Mayra Chiu, la empresa de telecomunicaciones cuenta con más de 100 colaboradores con algún tipo de discapacidad, quienes tienen posiciones de tiempo completo e igualdad de condiciones. Todos los colaboradores de AT&T cuentan con los mismos beneficios y acceso para participar en las redes de empleados y herramientas para su desarrollo.

En ese contexto, en el marco del día internacional de la discapacidad, del 3 al 5 de diciembre, la AT&T Experience Store Torre Diana contará con un laboratorio para concientizar sobre cómo las personas con discapacidad viven su día a día.

América Latina: la irrupción de actores sociales y procesos de regresión

América Latina en los últimos meses ha vivido uno de los periodos más intensos en sus luchas sociales. Millones de personas han salido a las calles, se han ido a huelga y enfrentado a la policía. Se generaron procesos de subjetivación en el que múltiples actores sociales cuestionan el orden establecido y configuran nuevos horizontes.  También los sectores más conservadores han entrado en escena. La extrema derecha se ha desplegado como no lo hacía en mucho tiempo.

El proceso está en marcha y la disputa entre los diferentes sujetos está muy lejos de definirse. Aquí hago énfasis en los actores que están movilizados y me pregunto en qué medida podemos hablar de un ciclo general en el proceso político de la región.

 

Del reggeaton en Puerto Rico a la whipala en Bolivia

Las movilizaciones sociales abarcan a varios países y se han involucrado sectores sociales muy diversos: de los indígenas en Ecuador o Bolivia a los estudiantes colombianos o artistas puertorriqueños. La diversidad de los actores expresa la heterogeneidad política y cultural que existe en la región.

En Puerto Rico, las protestas fueron encabezadas por los jóvenes y contaron con el apoyo simbólico de cantantes muy reconocidos como Bad Bunny, Residente e incluso Ricky Martin. El detonante de la acción colectiva fueron unos comentarios homofóbicos del gobernador Ricardo Rosello, pero las demandas iban mucho más lejos y reflejaban un hartazgo frente a la corrupción y las políticas antisociales. Se trató de un actor nuevo, inesperado, en el que millones de jóvenes salieron a las calles. El movimiento fue tan masivo y contó con tanta legitimidad que en unas cuantas semanas el gobernador tuvo que renunciar.

Por su parte en Haití, las protestas frente a un aumento en el precio de la gasolina también fueron iniciadas por los jóvenes a través de las redes sociales, pero desembocaron rápidamente en una alianza pluriclasista. Organizaciones cívicas y  de derechos humanos se sumaron a las protestas junto con sectores populares que han instalado barricadas y se han enfrentado a las fuerzas represivas. Hasta ahora se tienen registrados más de 40 personas fallecidas durante los enfrentamientos.

En Ecuador las movilizaciones también se gestaron ante el alza de los precios de la gasolina, pero con un entramado organizativo dominado por las comunidades indígenas. La Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE) con su larga tradición de lucha y sus formas comunitarias fue el sostén de las protestas que cercaron la capital. El gobierno de Lenín Moreno tuvo que echar atrás su paquete de medidas económicas neoliberales.

Por su parte en Chile, uno de los países con mayor estabilidad económica, los estudiantes fueron quienes iniciaron las protestas ante el aumento en el costo del transporte público. Muy pronto otros actores como sindicatos y organizaciones populares se sumaron a las movilizaciones que exigieron un cambio profundo en el modelo político y económico. Las luchas se están organizando de manera autónoma y cuestionan los viejos consensos que, durante décadas, permitieron que muchos elementos de la dictadura de Pinochet se perpetuaran en el orden político. Por eso una de sus demandas es una nueva Constitución.

De manera similar en Colombia una coalición muy amplia de organizaciones estudiantiles, sindicales y populares se ha movilizado en contra de las medidas económicas del gobierno de Duque. El 21 de noviembre se organizó un paro nacional que movilizó a millones de estudiantes y trabajadores por todo el país. La respuesta del gobierno ha sido muy represiva, declarando toques de queda y sacando a los policías a las calles.

También estos meses se han caracterizado por las movilizaciones feministas en toda la región. En Argentina  en la marea verde miles de mujeres se han movilizado para defender la legalización y la despenalización del aborto. En México las protestas en contra de la violencia de género se han hecho presentes en muchas universidades y calles de varias ciudades.

Finalmente, en Bolivia la crisis política llegó a los niveles más dramáticos. Lo que inició como un conflicto postelectoral, derivó rápidamente en un Golpe de Estado. Siguiendo una tradición histórica de luchas sociales muy larga, se movilizaron los indígenas, sindicatos, pobladores urbanos de El Alto y otras zonas populares y un sinnúmero de organizaciones populares. Del otro lado, en apoyo al golpe también se desplegaron organizaciones con un discurso religioso y de derecha como el del Comité Cívico de Santa Cruz. El conflicto está lejos de resolverse y la represión ha dejado decenas de muertos. Sin duda, la intervención de los militares para imponer un nuevo gobierno es uno de los peores retrocesos políticos que se están viviendo en la región.

Así, en las acciones colectivas se han expresado una gran cantidad de actores sociales: los indígenas con sus formas comunitarias, los estudiantes y los jóvenes con su festividad y el manejo de las redes sociales, los sindicatos y las organizaciones populares. Se trata de una emergencia de actores heterogéneos pero que tienen en común el cuestionamiento a sistemas políticos que no estaban estableciendo relaciones democráticas con sus sociedades. El problema es que las alternativas tampoco están claras y en ese contexto, se asoman grupos conservadores y de extrema derecha.

¿Un ciclo común en la región?

El ascenso en las movilizaciones sociales abarcó a una diversidad de países y de actores que es difícil equipararlos en un mismo proceso. Sin embargo no se puede negar el efecto de contagio que los movimientos han tenido entre sí. Aunque se trata de realidades locales muy diferentes hay que preguntarnos si es posible agrupar estas luchas en un mismo ciclo.

Antes de la irrupción de estos movimientos algunos investigadores ya hablaban de ciclos en la región. El primero a principios del siglo con el agotamiento del modelo neoliberal y la irrupción de una serie de luchas sociales como la Guerra del Agua (2000) y del Gas (2003) en Bolivia y el alzamiento popular argentino de diciembre del 2001. Después el ciclo de gobiernos progresistas que hicieron algunos cambios y construyeron estabilidad por más de una década. Finalmente, a partir del 2015 se comenzó a hablar del agotamiento del ciclo progresista con la derrota de algunos gobiernos de este signo ideológico en la región.

Hoy, con la irrupción de un nuevo proceso de luchas parece que la situación es mucho más incierta e inestable. Junto a la emergencia de actores sociales que promueven la ampliación de derechos sociales y cuestionan al neoliberalismo, también emergen los grupos evangélicos y otros de extrema derecha.

No está claro cómo se van a resolver muchos de los conflictos sociopolíticos que se intensificaron en los últimos meses. Lo que sí podemos observar es la riqueza y la complejidad cultural de los sujetos que están emergiendo en la sociedad civil latinoamericana. Los movimientos indígenas, estudiantiles, sindicales, feministas y populares constituyen actores que enriquecen y dinamizan la vida política de la región. Enfrentan, sin embargo, actores conservadores y gobiernos que en muchos casos han decidido enfrentar sus demandas a través de la represión. Por eso es momento de impulsar la solidaridad y afianzar a los movimientos sociales que hoy son no sólo son un dique frente a la extrema derecha sino que también significan la posibilidad de un cambio de modelo y la ampliación de los derechos sociales.

[1] Doctor en Ciencias Políticas y Sociales y profesor en la FFyL.

La última clase de mi maestra

Hace unos días me encontré en una librería de viejo una antología de cuentos judíos que la maestra me prestó hace 22 años. En esa ocasión leí el libro en una semana y regresé por más. Leía los libros de su biblioteca y dejaba al final los que tenía que leer para la escuela. No importaba, sus recomendaciones eran mejores. Con mi maestra Toibe se discutían los libros en la sala, en la cocina, en el salón de clases, en los pasillos, camino al estacionamiento, en el teléfono. Nunca dejó de leer, nunca dejó de darle oportunidad a nuevos autores, ningún tema le era ajeno. Cuando se puso de moda leer El Capital en el Siglo XXI de Piketty ella ya lo había leído y pedía opiniones. “Lo siento maestra, no estoy al día como usted”, le dije.

Los años pasaron y yo también les llevaba libros. Don Hersch se había unido al club de lectura, le encantaba la novela negra. Cuando les conté que había un autor sueco llamado Henning Mankell que me encantaba aceptó mi recomendación. “Es muy sangriento, pero me gusta”, nos dijo en una de las tantas conversaciones que teníamos los sábados.

Los sábados calificábamos los trabajos de los alumnos, se convertían en horas de conversación. “¿Ya arreglaron el mundo?”, preguntaba Don Hersch y siempre se incorporaba a la plática. “Ya lo arreglamos”, le contestábamos. Sabíamos que no tiene arreglo.

Siempre que algún amigo o colega me recuerda que la UNAM estuvo cerrada durante diez meses sonrío y le digo: ahí hubiera estado, en primera fila, en las trincheras, haciendo guardias, cerrando escuelas y en las marchas para defender la educación pública y gratuita… pero conocí a la maestra y la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM ya no fue la misma para mi. No me hizo cambiar de opinión, pero me mostró que se puede luchar de muchas formas, que las lecciones en el aula son tan valiosas como una marcha, que las ideas se pueden defender de muchas formas.  Que formar a un ser humano es tan valioso como una protesta en las calles contra el sistema.

Cuando alguien se quejaba de su clase siempre le decía: aprenderás a leer y escribir. ¿Qué más quieres? Pocos querían leer el periódico a diario, enfrentarse a las preguntas de la maestra, a dominar a un tema, al rigor de la escritura. “Si sienten que es mucho trabajo dejen las otras cuatro materias y quédense con la mía”, nos recordaba.

La última conversación que tuve con mi maestra Celia Toibe Shoijet Weltman fue sobre la fecha límite de calificaciones. Así era mi maestra. Siempre pensaba en sus alumnos, la misma atención, el mismo cariño y empeño para preparar su clase, lo mismo si era un grupo de 50 alumnos que uno de dos… y sin salón, como lo fue en su último semestre de clases. La burocracia académica nunca le perdonó su independencia, su libertad, nunca fue parte de un grupo y siempre dijo con esa voz firme, que se escuchaba más allá del salón, lo que pensaba.

Las últimas clases las dio en una sala de juntas. No importaba. Ahí vimos durante dos sesiones la serie The Newsroom, fue la última clase que compartimos juntos. Estaba asombrada que una serie de televisión pudiera explicar tan claramente cómo funcionaba una sala de redacción de un noticiero. Me preguntó por más series y películas. Sé que ya tenía en su cabeza lo que daría el próximo semestre. Y en ese momento pensé lo que siempre había pensado desde que la conocí: quiero ser así, hacer planes sin pensar en el final de la vida.

Celebran fin de semestre con MAC Day

Al inaugurar las actividades del MAC Day, el licenciado Christian Carlos Delgado Elizondo, jefe del Programa de Matemáticas Aplicadas y Computación de la Facultad de Estudios Superiores Acatlán, indicó que este evento ha evolucionado, esta edición se compuso de cuatro áreas: exposición en foro, exposición in situ, infografías y carteles científicos.

Otra de las innovaciones, mencionó Delgado Elizondo, fue que los estudiantes fueron evaluados de forma electrónica; los profesores emitieron sus observaciones mediante tablets del programa PC Puma. Además, los alumnos recibieron comentarios de sus compañeros, quienes votaron por los trabajos con los códigos QR.

El jefe de programa también señaló que esta ocasión se buscó estrechar el vínculo entre cuatro empresas y los estudiantes, en especial IBM, patrocinador del evento. Agradeció la participación de 23 profesores y más de 170 alumnos que se integraron a las jornadas.

La actuaria Luz María Lavín Alanís, jefa de la División de Matemáticas e Ingeniería, agradeció la participación de quienes hicieron posible esta edición, la cual es resultado de lo trabajado este semestre y “que nos permite ver cuáles son nuestros avances, en dónde estamos posicionados y hacia dónde pensamos llegar”.

Los alumnos presentaron infografías con temas como la pornografía infantil y realidad aumentada, videojuegos y programación; así como carteles sobre cálculo fraccionario y exposiciones como el blockchain y smart contracts, entre otros.

Adiós querida maestra

Le gustaba debatir todos los temas. Nada de lo que se afirmara en clase debía ser a la ligera. Argumentar, siempre. Fue en una de esas clases donde me dio su mejor lección. En esos años los neonazis se habían manifestado en las calles de Alemania y en otras partes de Europa y Estados Unidos. Era la parte final del siglo XX. Mi maestra defendía con vehemencia, como siempre, que se recordarán las atrocidades que los nazis habían cometido en la segunda guerra mundial. No estuve de acuerdo. “No creo que deba ser así”. Ella me vio y me pregunto que si sabía de lo que hablaba, que si tenía idea de lo que habían hecho. Dije que sí, cité una docena de libros, y en mi defensa argumenté que si los provocábamos, que si banalizábamos el tema y lo poníamos sobre la agenda en todo momento, perdería seriedad. Mi amiga Lorena Meneses, quien estaba sentada a mi lado, me pidió en voz baja que ya no discutiera, que me sentara. Por supuesto que no le hice caso, tenía 19 años, ¿por qué tendría que sentarme y dejarme ganar por una maestra que hablaba fuerte y que creía saberlo todo?

Salí muy enojado del salón, sin despedirme de nadie. A la siguiente clase no me presenté. No abandoné el curso, eso no estaba en mi cabeza. Cuando llegó la hora de volvernos a ver lo primero que me dijo fue: “faltaste a mi clase”. Ya usaba bastón. La miré y antes de que pudiera decirle algo ella habló: “Discúlpame. A veces me sobresalto. Es un tema que me llega, es mi pueblo (los judíos)”.

Desde esa clase no volví a faltar. Celia Toibe Shoijet Weltman me abrió el mundo. De pronto mi Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM no era sólo el lugar donde le podía reclamar al poder, ir a conferencias en las que se habla en contra del sistema o discutir sobre las desigualdades. Ahora era el centro del mundo, de la reflexión. Siempre me quedaba al final de su clase. “Maestra, estoy leyendo a Hemingway, a Kundera, Kafka…”. Y la acompañaba al estacionamiento. Un recorrido de 5 minutos que hacíamos en una hora. En cada polémica se detenía y me pedía mi opinión. La mayor parte de las veces respondía a sus cuestionamientos de la misma forma: “¿Cómo resolvemos eso?”. “No lo sé”. Y de verdad no lo sabía. Le preocupaba su país, el que le dio asilo a ella y a su familia. Judíos de la ex Unión Soviética que tuvieron que huir (otra vez) de la persecución de los comunistas.

Fui su ayudante de profesor desde que me lo pidió hace 24 años. Los primeros años nos reuníamos los sábados en su casa para calificar los trabajos, para discutir sobre los temas más importantes, y sobre todo, para hablar de libros. Todos. Desde historia, economía, filosofía, literatura. Nunca dejó de pedirme que le recomendara lecturas. Su bondad con sus alumnos era así, infinita. Ella nos hacía creer que aprendía de nosotros. Pero nosotros fuimos los que nunca dejamos de aprender de ella.

Siempre que la escuchaba planear sus clases pensaba, sin decírselo, que admiraba esa forma de vivir la vida: planearlo todo como si nunca nos fuéramos a morir. Hace algunas semanas, cuando tuvo una fuerte recaída de salud, Don Carlos, su chofer, me llamó para preguntarme por la fecha de entrega de las calificaciones y por la del inicio del nuevo semestre. Así era mi maestra Toibe. Sus alumnos siempre encabezaron la lista de sus prioridades. Nos hará falta su voz fuerte, firme, con ánimo de debatir querida maestra.

Festival Internacional de Danza se presenta en la UNAM

En la sala Miguel Covarrubias se presentarán 24 agrupaciones y 10 artistas de Estados Unidos, Chile, Suiza, Austria, Italia, Bélgica y Alemania

La IV edición del Festival Internacional de Danza Contemporánea de la Ciudad de México (FIDCDMX), se llevará a cabo del 31 de julio al 11 de agosto en las sedes del Teatro de la Danza, la Sala Miguel Covarrubias, el Centro Nacional de las Artes (CENART) y el Centro Cultural España.

Virginia Gutiérrez, jefa de Programación de la Dirección de Danza de la UNAM, destacó que en la sala Miguel Covarrubias se presentarán 24 agrupaciones y 10 artistas de Estados Unidos, Chile, Suiza, Austria, Italia, Bélgica y Alemania. Asimismo, participarán las compañías mexicanas Tándem, Óscar Ruvalcaba y La Fábrica de Danza.

Gutiérrez enfatizó que las agrupaciones mostrarán propuestas alternativas que van desde solos con música industrial o en silencio. Además, expresó que el tipo de obra es muy variada porque la característica principal del festival es proporcionar un panorama de la danza contemporánea internacional.

El festival es organizado desde el 2016 por los coreógrafos y bailarines mexicanos Raúl Tamez y Rodrigo González. El FIDCDMX, único en su tipo, se especializa en danza contemporánea. En 2017 y 2018 el festival ganó el Premio Lunas del Auditorio Nacional.

Las funciones se presentarán en la Sala Miguel Covarrubias del Centro Cultural Universitario (CCU), el 2 y 3 de agosto a las 19:00 horas, y el 4 de agosto a las 18:00 horas. Costo: 80 pesos.

Para más información consulta: https://www.facebook.com/FIDCDMX/

La fotografía se convierte en tu vida: Emmanuel Lubezki

El ganador del Premio Oscar dictó la conferencia magistral La visión del artista de nuestra generación como ícono de la fotografía en México

Emmanuel Lubezki, ganador del Premio Oscar por mejor fotografía en El renacido, Birdman y Gravedad, dictó la conferencia magistral La visión del artista de nuestra generación como ícono de la fotografía en México, en el Centro Cultural Universitario (CCU) de la UNAM.

El Chivo, como se le conoce en el medio cinematográfico, expresó que su inquietud por la fotografía comenzó cuando vio por primera vez una cámara retina en casa de sus padres.

A partir de ese momento, empezó a estudiar en libros de fotografías y revistas, pero un momento trascendental fue cuando el fotógrafo Pedro Meyer lo invito a un taller de fotografía, ahí fue donde decidió su vocación.

En el marco de la IV edición de Canon Zoom in Project, Lubezki destacó que actualmente los jóvenes tienen los medios para crear contenido, pero es necesario ser un contador de historias.

Durante la conferencia, se exhibieron diferentes fragmentos de su trabajo en filmes como El Jinete sin CabezaY tu mamá tambiénGravedad El árbol de la vida. Refirió que durante los rodajes de esas cintas se le presentaron retos complejos que aprendió a resolver cada vez con mayor experiencia.

Lubezki subrayó que el cinematógrafo no es un artista, sino un artesano y requiere aprender usar las cámaras, observar  y comunicarse con los directores.  Además, indicó que cualquier fotógrafo, en algún momento, debe olvidarse de su equipo fotográfico para observar la luz y su incidencia en los objetos.

Mundo en fuego, encuentros teatrales franco-mexicanos

El público se mostró interesado en la escritura en México por la gran diferencia que existe entre la escritura de ambas culturas

La Escuela Superior de Técnicas Teatrales (ENSATT) de Lyon realiza encuentros teatrales franco-mexicanos en colaboración con el Centro Universitario de Teatro (CUT) de la UNAM.

La poeta Luisa Manero Serna realizó un intercambio de dramaturgia entre México y Francia. Asimismo, Adolfo Sánchez Sánchez, actor y estudiante de Lengua y Literatura Hispánicas, escribió la obra Paredes abiertas, elegida por la directora francesa Sylvie Mongin-Algan para representar a México en el encuentro Mundo en Fuego en Lyon, Francia.

Durante su estancia, tuvieron la oportunidad de crear un espectáculo diferente y nuevo por tres días. Éste se escribía a las siete de la mañana entre los dramaturgos franceses y mexicanos, pulían y construían el espectáculo. Posteriormente, se montaba, ensayaba y musicalizaba para ser presentado en la noche al público francés.

Manero Serna destacó que el público se mostró interesado en la escritura en México por la gran diferencia que existe entre la escritura de ambas culturas.

Por su parte, Sánchez Sánchez recalcó que en nuestro país la propuesta teatral es más escénica enfocada hacia el juego y las intervenciones, en contraposición a la francesa que le da prioridad a la parte teórica y filosófica, de pensamiento.

Los participantes tuvieron la oportunidad de difundir su trabajo en Radio Francia Internacional (RFI); además, se reunieron con el ministro de Cultura francés, Franz Riester,  y el cónsul honorario de México en Francia, quienes expresaron su beneplácito por la participación de jóvenes mexicanos en este tipo de trabajo artístico.

La matanza de El Paso, obstáculo en la reelección de Trump.

Lorenzo Meyer refirió que a Trump no le importa la tragedia de El Paso, pero sí le importa que ese hecho sangriento incida en su reelección

El historiador Lorenzo Meyer Cossío, entrevistado en el espacio informativo Primer Movimiento de Radio UNAM, habló sobre la matanza de El Paso, Texas. Observó que en Estados Unidos ya se han producido este tipo de reacciones violentas con un trasfondo discriminatorio.

Mencionó que el nacionalismo blanco se encuentra presente en varias sociedades donde las personas catalogadas como blancas son mayoría, pero se han visto reducidas. Ante esta dicha reducción hay una reacción de miedo y de violencia.

El investigador del Colegio de México aseveró que este discurso de odio es apoyado por el presidente Donald Trump. Es parte de un nacionalismo blanco que no defiende o no pretende defender a la nación norteamericana, sino a la nación blanca que es una parte de Estados Unidos.

“En ese sentido, el presidente Trump se pone al frente abiertamente de una parte de Estados Unidos, pero deja afuera a la otra, la no blanca, ya sea que esté ahí de manera legal, residentes con sus papeles o ya nacionalizados norteamericanos o que ya nacieron en Estados Unidos y de padres extranjeros”.

Meyer Cossío señaló que a Trump no le importa la tragedia de El Paso, pero sí le importa que ese hecho sangriento incida en su reelección.

“La reacción de Trump ante el hecho fue desencajada porque puede significar un obstáculo que no esperaba en su camino a la reelección, sus palabras ahora no corresponden para nada con las del pasado inmediato o más tiempo atrás y con los hechos”.

El historiador mencionó que El Paso es una ciudad, que según las últimas estadísticas del año pasado, el 87 por ciento de su población es de origen hispano y de éstos el 80  por ciento son de origen mexicano. Los “blancos” representan el 14 por ciento, esto es un símbolo de hacia dónde se dirige Estados Unidos.

Acotó que “nuestro nacionalismo se expresa como defensa a esa invasión que fue la pérdida de la mitad del territorio, la pérdida de la guerra, etcétera; pero ahora resulta que los que ganaron esas invasiones violentas se sienten agredidos por nosotros, por esta invasión silenciosa y aquí tenemos dos nacionalismos en choque, ambos se consideran defensivos. Es evidente que nuestro nacionalismo no pretende agredir a nadie, pretende defenderse, simplemente defenderse, pero el otro, el de la gran potencia también se pone ahora como víctima”.

Finalmente, Meyer Cossío refirió que el discurso de odio puede tener algunos efectos legales, pero el terrorismo es mucho más “porque entonces se puede ir directamente a la fuente de las armas que usan los terroristas que es lo que no ha querido hacer el gobierno norteamericano”.

 

El paso devastador de Dorian

La investigadora Christian Domínguez Sarmiento, del Centro de Ciencias de la Atmósfera (CCA) de la UNAM, habló sobre el huracán Dorian categoría 5 que ha causado el cierre de aeropuertos, estaciones de trenes, así como la suspensión de clases y la evacuación en los estados de Georgia y Carolina del Sur de los Estados Unidos.

En el programa informativo Prisma RU de Radio UNAM, Domínguez Sarmiento refirió que Dorian se presentó el 24 de agosto y se esperaba que se disipara el 29 de agosto. Sin embargo, el huracán se intensificó y el pronóstico de la trayectoria cambió debido a la presencia de aguas calientes (características de la temporada).

La investigadora afirmó que los sistemas que interactúan con el fenómeno provocan que su movimiento sea cuasi estacionario, es decir, afectará continuamente un mismo sitio lo que lo vuelve más peligroso.

Se estima una velocidad del viento de 295 kilómetros por hora, acompañado de lluvias extremas de 300 milímetros por día, “eso es casi lo que llueve en una temporada en la Ciudad de México, toda esa cantidad de agua en un solo día, lo que ocasionará daños a la infraestructura, a los ríos, a las carreteras”.

Domínguez Sarmiento apuntó que se pronostica una trayectoria hacia Carolina del Norte, con una categoría menor (1 o 2), sin embargo, Dorian aún representa peligro por los vientos y lluvias.

Finalmente, la investigadora explicó que la presencia de anticiclones con una dirección contraria retrasa el flujo del huracán, lo hace más lento, y por ende, más devastador.

“El maíz es tan cercano a nuestro corazón”

MasAgro es posible gracias a los agricultores que le abrieron las  puertas de sus casas y le permitieron contar sus historias

Tania Eulalia Martínez Cruz, ingeniera agrónoma, es la primera mujer indígena mixe en obtener la beca Fulbright-García Robles. Actualmente, es candidata a doctora en Ciencias Sociales por la Universidad Wageningen, de Holanda. Asimismo, en 2016 fue galardonada con el Premio Nacional de la Juventud, en la categoría Logro Académico, por el gobierno mexicano.

Martínez Cruz destacó que su trayectoria académica ha sido apoyada por el Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT), y por los diversos colaboradores del proyecto MasAgro (Modernización Sustentable de la Agricultura Tradicional), el cual promueve una intensificación sustentable de la producción de maíz y trigo en México.

Enfatizó que el proyecto es posible gracias a los agricultores que le abrieron las puertas de sus casas y le permitieron contar sus historias.

“Actores que van desde los agricultores que producen de manera comercial, hasta los que cultivan la milpa como parte de su cultura y de su identidad. Ese maíz que es tan cercano a nuestro corazón”.

La ingeniera agrónoma señaló que son necesarios enfoques diferentes para desarrollar estrategias inclusivas que “señalen cómo se pueden disminuir las brechas de inequidad, además de otras propuestas para resolver problemas globales como la seguridad alimentaria, el cambio climático y la reducción de la pobreza”.

Fundación Moshinsky impulsa proyectos de investigación de jóvenes científicos mexicanos

https://www.facebook.com/ColegioNacional.mx/videos/581386262391078/

Marcos Moshinsky Borodiansky fue físico e investigador mexicano de origen ucraniano. Discípulo del físico Eugene Wigner, ganador del Premio Nobel en 1963 por su aplicación de Principios de Simetría y, en particular, de la Teoría de Grupos en la Física Moderna.

Moshinsky continuó la labor de Wigner en la UNAM con la búsqueda de las propiedades del oscilador armónico: un sistema físico que tiene simetría porque después de transformarse queda invariante. Por ejemplo, al girar una esfera sobre alguno de sus ejes su forma es exactamente igual antes y después de la rotación. Este concepto fue aplicado por Moshinsky para explicar las estructuras del núcleo atómico en un oscilador armónico.

Pero, ¿qué es un oscilador armónico? El oscilador se asemeja al comportamiento de un resorte que cuando se estira tiende a regresar a su estado normal y comienza a oscilar. Se le llama armónico porque en este ejercicio de estirar y regresar se genera una sola frecuencia que depende de la fuerza del resorte y de lo pesado de la masa que mueve.

Moshinsky logró simplificar los cálculos en la estructura nuclear usando los que él llamo Paréntesis de Transformación. Sus estudios cobraron tal relevancia que la comunidad científica se refería a ellos como los Moshinsky Brackets.

Las indagaciones de Moshinsky obtuvieron fórmulas exactas que llamo coeficientes de Wigner, con estas pudo calcular muchas propiedades de la mecánica cuántica como la invariancia del sistema simétrico conocido como Grupo de SU (3). Gracias a sus teorías en física nuclear el oscilador armónico es una herramienta útil a nivel cuántico que permitió darle continuidad a otros estudios relacionados con la simetría. Moshinsky no sólo se convirtió en referencia mundial, sino que ha dejado un legado en las ciencias exactas.

Como homenaje a su carrera científica la Fundación Marcos Moshinsky continúa con sus ideales otorgando las cátedras que llevan su nombre, este es un programa anual que impulsa la trayectoria y proyectos de investigación de jóvenes científicos mexicanos en las áreas de física, matemáticas y las ciencias químico-biológicas.

Gana la UNAM premio al mejor estand en la FIL Guadalajara

La UNAM recibió el premio al mejor Estand categoría Platino de la 33 Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara. El jurado ponderó que “es difícil que coincida una presentación de un pabellón con identidad propia, junto con un emblema tan iconográfico como es el de la institución, y esa misma integración la vimos en el manejo de materiales naturales con tecnología, y finalmente, lograr un gran pabellón en una área que invita, que está diseñado para que uno pueda pasearse siendo accesible, pero al mismo tiempo con todos estos elementos que integran a todo el estand”.

En ese contexto, Jorge Volpi, titular de la Coordinación de Difusión Cultural de la UNAM, agradeció el reconocimiento a nombre del Rector y felicitó a todo el equipo de la Dirección General de Publicaciones y Fomento Editorial por su trabajo. En las ediciones del 2013 y 2016 el estand de la Máxima Casa de Estudios también ganó la distinción Platino de la FIL Guadalajara.

Cuarenta y siete mobiliarios para la exhibición de 50 mil ejemplares en una extensión de 390 metros cuadrados. La distribución de los títulos se basa en la temática donde los visitantes encontrarán 750 novedades.

Para esta edición, la UNAM propuso un espacio en el que prevalece la transparencia y la apertura. El resultado invita al público a acercarse a los textos, a transitar por los pasillos que equilibran amplitud y comodidad en un espacio acogedor. Desde la planeación, se destacó el elemento de la iluminación cálida que fomenta el encuentro entre lectores y libros.