Mensaje que dirigirá el Rector Enrique Graue Wiechers al Cuerpo Directivo de la UNAM

ULAMA, EL JUEGO PREHISPÁNICO QUE SE RESISTE A MORIR

Según se cuenta en el Popol Vuh, el mundo fue creado a partir de un juego de pelota, uno donde la luz y la oscuridad se enfrentaron para equilibrar vida y muerte, y poner al universo en movimiento.

A fin de recrear este choque de fuerzas tan opuestas como complementarias, hace tres mil 500 años los pueblos mesoamericanos comenzaron a practicar el juego de pelota con las nalgas ullamalitztli (“juego del hule”, voz náhuatl que, castellanizada, se transformó en ulama), un encuentro donde dos equipos rivales golpeaban con las caderas un esférico de olli/hule que debía mantenerse siempre en el aire, tal y como hacen el Sol y la Luna.

“Hablamos de una actividad que al mismo tiempo es un deporte y un acto ritual”, explica Alan Zúñiga Lazcano, estudiante de la Facultad de Química y capitán de los Texocelotzin (o ‘jaguares azules’), el representativo de ulama de la UNAM formado en 2020 a instancias de académicos y alumnos decididos a que esta tradición perviva.

A decir de la profesora Emilie Carreón Blaine, del Instituto de Investigaciones Estéticas (IIE) y una de las principales impulsoras del equipo universitario, basta remontarnos pocas décadas atrás para constatar que este juego mesoamericano estuvo a punto de desaparecer. “Las principales amenazas eran la falta de jugadores, de interés y de pelotas; de ahí la importancia de promover su práctica”.

El estudio del ulama es un proyecto de Emilie Carreón en el IIE que inició en 1990; tiene dos libros sobre el tema: El olli en la plástica mexica y El Tzompantli y el juego de pelota.

Desde hace seis años Alan comenzó a entrenar ulama de cadera (existen dos modalidades más, una en la que la bola es rechazada con el antebrazo y otra con una maza de madera), y el joven señala que comprometerse con esta disciplina modificó su manera de ver el mundo. “Me siento más próximo a mis antepasados y a su pensamiento”.

Como apunta el químico, convertirse en jugador de ulama –o taure– implica reprogramarse y modificar muchos hábitos que desde la infancia se nos han vuelto una segunda naturaleza, como el instinto de recibir la pelota con las manos o, en su defecto, patearla. “Golpear una esfera de caucho con la cintura te da otra memoria muscular, reacciones distintas y una forma bastante singular de moverte”.

De hecho, es imposible confundir a los taure o ulameros con otros deportistas, y no sólo por la explosividad con la que arrojan su cintura y muslos hacia una pelota que, aunque elástica, pesa lo que una bola de boliche ligera (de tres a cinco kilogramos), sino porque suelen ir descalzos y, en vez de playeras de marca, portan un braguero artesanal de gamuza llamado “fajado”, y un cinturón de cuero diseñado para resistir mejor los impactos del esférico, denominado chimali.

“En el ulama todo tiene significado”, señala Alan, quien agrega que por eso ser uno de los “jaguares azules” de la UNAM no sólo es un orgullo, sino una lección de vida, y por lo mismo invita a quien quiera a entrenar con ellos, sin importar edad o género (en el equipo hay tres mujeres).

“Nos reunimos en CU a las dos de la tarde, los miércoles y jueves en los espacios deportivos de Las Islas, y los martes en el estacionamiento de la Facultad de Filosofía y Letras. Pueden buscarnos ahí, o en la página de Facebook Ullama Sierra Tonantzin Tlalli–Xochitecpatl.”

En el siglo XVI, el cronista fray Diego Durán ya advertía la fuerte carga cosmogónica del ulama, y por ello lo consignó en su Historia de las Indias de Nueva España e islas de tierra firme: “En aquel conjuro que a la pelota hacía invocaba a los cerros, las aguas y fuentes… el Sol, la Luna, y las estrellas, y finalmente todas las cosas creadas”.

Alan Zúñiga se dice un apasionado no sólo de los aspectos físicos del juego sino también de su filosofía subyacente, una que la profesora Emilie Carreón ha estudiado durante tres décadas y les comparte a los texocelotzins de distintas maneras, pues la académica busca que practicar esta disciplina en la UNAM implique también el descubrir otra cultura.

Por ello, cada vez que el químico se coloca el chimalli se imagina a sí mismo como un puente entre el pasado y presente, o al menos eso dice. “Me hace sentir no tan distante de los jugadores prehispánicos. Ellos golpeaban la pelota de hule para que la vida de su comunidad continuara, nosotros lo hacemos para que el ulama no muera”.

Con vida propia

Cristóbal Colón regresó de su segundo viaje por las Américas con un esférico de hule, material desconocido en España que causó sorpresa ya que ahí se jugaba con las llamadas pelotas de viento, que en realidad eran una vejiga de cerdo inflada con aire y recubierta de cuero.

Escribía el cronista Gonzalo Fernández de Oviedo en su Historia general de las Indias: “Estas pelotas saltan más que las de viento sin comparación, porque de sólo soltarla de la mano en tierra suben mucho más. Y dan un salto y otro y otro y otro y muchos, disminuyendo en el saltar por sí mismas como las pelotas de viento, pero muchísimo mejor”.

Que una esfera tuviera tal potencial cinético provocó asombro y sospecha por partes iguales. “Sabemos que Hernán Cortés era un gran entusiasta, tanto que en 1529 se llevó a un grupo de jugadores para que hicieran una gira de exhibición por España e Italia, mientras aquí había evangelizadores que veían como antinatural el que una bola de caucho rebotara como si tuviese vida propia, y argumentaban que dicho fenómeno era obra del diablo, por lo que el juego de pelota terminó por prohibirse en el virreinato”, abunda la profesora Emilie Carreón.

Tras décadas de estudiar el tema, la antropóloga está muy consciente de que, para que el ulama sobreviva, es necesario preservar también el arte de elaborar pelotas de hule, proceso lento, laborioso y realizado a mano que no admite sustitutos, ya que por fuerza estos esféricos deben ser de la goma de un árbol cuyo apelativo indígena es ulquahuitl, mientras que su nombre científico en latín es Castilla elastica.

“A diferencia de los balones, el esférico de ulama no admite almacenamiento; está hecho para ser jugado y mantenerse activo”, expone la profesora Carreón Blaine, por lo que las ocho pelotas adquiridas por el IIE de la UNAM han sido prestadas en comodato a diversos taure para que divulguen el juego en sus comunidades.

Alan Zúñiga, quien tiene a su resguardo uno de estos objetos, explica que además de humectarlos con regularidad y protegerlos del Sol, cuando las pelotas no son usadas deben mantenerse colgadas, pues al dejarlas sobre el suelo o en una estantería se achatarán por la gravedad de la Tierra en combinación con la dureza de la superficie.

Las bolas de ulama no son piezas de museo, sino objetos vivos, como describía fray Diego Durán tras asistir a uno de estos juegos: “Tienen una propiedad de que salta y repercute hacia arriba y anda saltando de aquí para allá, que primero cansa que la tomen los que andan tras ella”.

Para la profesora Carreón Blaine, el prestar estas pelotas a jóvenes comprometidos con el ulama ha comenzado a dar frutos. “Hablamos de objetos difíciles de conseguir que deben ser cuidados casi cual bebés. Esta estrategia nos ha permitido que los esféricos se mantengan en buena condición, y lo más importante, en movimiento y botando”.

LAS HECES DE TU PERRO SIRVEN PARA HACER COMPOSTA, AQUÍ TE EXPLICAMOS CÓMO

La mayoría de los hogares mexicanos disfrutan de animales de compañía, pues según datos de la primera Encuesta Nacional de Bienestar Autorreportado (ENBIARE, 2021) del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, hay 80 millones de mascotas en el país, de las cuales casi 44 millones son perros.

Algunos dueños o dueñas lamentablemente no son tan responsables de sus mascotas, ya que tenerlas implica no sólo su cuidado, salud y alimentación, sino también recoger sus heces fecales en la vía pública cuando las sacan a pasear.

Esto ocasiona que la materia fecal se quede en las calles, causando problemas ambientales y de salud, pues los residuos de los perros se deshidratan, se pulverizan y se mezclan en el aire.

Ante este panorama, académicos de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Acatlán crearon una metodología para hacer composta a partir de hojarasca, lombrices rojas californianas y heces caninas, con el propósito de que se haga en un tercio del tiempo de lo que se elabora de forma tradicional (sin lombrices) y, además, reducir su carga patógena.

“El compostaje tiene que ver con la reutilización de residuos generalmente orgánicos para obtener un producto que pueda incorporarse al suelo. En este caso la estrella principal es la lombriz roja, ya que acelera el proceso de los residuos para obtener un valor nutrimental y entonces poderla manipular”, afirmó César González Guerrero, académico de la FES Acatlán.

Acotó que por el gran volumen de residuos de jardinería pensaron en esta opción de composta, ya que requiere de un aporte de carbono brindado por la hojarasca, y una parte de nitrógeno, que se cumple gracias a las heces caninas y los restos de comida que se generan en las casas.

Hace tiempo, dijo, se usaba el estiércol de cualquier ganado de manera directa en la agricultura; pero se dieron cuenta de que el composteo de esos residuos y de cualquier otro promueve la calidad nutrimental del producto, ya que el humus de la lombriz roja lo tritura, lo digiere y se convierte en uno de los principales componentes de un suelo sano para sembrar y que las plantas o cultivos crezcan bien.

“El problema de las heces caninas es que tienen una alta carga patógena y por eso se pensaba que eran poco funcionales para el compostaje; pero debido al procesamiento que se le da a la lombricomposta con estos residuos, en la que se eleva la temperatura a unos 60 o 70 grados, va reduciendo patógenos y posteriormente cuando es ingerido por la lombriz se reduce aún más”, esclareció el especialista en Ingeniería Ambiental.

Agregó que en cada estadio del proceso de la composta va desapareciendo la apariencia de heces fecales y se van convirtiendo en algo que parece más tierra; los olores también se van perdiendo.

Modo de preparación

“Hemos experimentado hacer composta con residuos de cocina y lodos activados resultantes de la planta de tratamiento de aguas residuales, por lo que nos preguntamos ‘¿qué otra cosa podría funcionar para enriquecer nuestros suelos?’. Entonces revisamos emprendimientos que se han hecho alrededor del mundo y vimos que en Sudamérica se comenzaba a trabajar con heces caninas, así que decidimos intentarlo también”, aseveró González Guerrero.

Después de varias pruebas, la metodología a seguir para obtener una composta útil y fácil es contar con un espacio para hacerla, un compostero de 10 o hasta 100 litros, cinco litros de hojarasca triturada (fuente de carbón), cinco litros de residuos de cocina y cinco litros de heces caninas (fuentes de nitrógeno), así como 100 lombrices rojas, todo dependiendo de cuál es la cantidad de composta que se realizará.

“Lo que tenemos que hacer primero es una premezcla y dejar que se precomposte aproximadamente unos 15 días; después se hace la inoculación de las lombrices dependiendo del número de éstas, y lo tenemos que poner con un poco de composta. Las lombrices irán buscando los alimentos y se dispersarán por el compostero, y si el ambiente les agrada se van a reproducir, la población crecerá y también la degradación”, explicó.

La recomendación del jefe del Departamento de Tecnología Ambiental es que para tener suficiente para los jardines o macetas se coloquen varias compostas pero en distintos estadios, es decir, poner uno y dejar que se composte por completo e ir alimentando otro y así hasta que vaya saliendo composta continua.

“Una ventaja de la lombricomposta a base de heces fecales es que se gestiona el residuo que ya es un problema muy grande, y lo estamos incorporando en otro proceso que, al final, redundará en un producto bastante beneficioso”, sostuvo.

Para las personas que tienen animales de compañía, sobre todo perros, y además son amantes de las plantas pueden apoyar a que todos respiremos un aire más sano a través de recoger las heces fecales y hacer este compostaje.

Recuperación de la capa de ozono, ¿Qué se espera en los próximos años?

¿QUÉ HAY DETRÁS DE LA NUEVA CANCIÓN DE SHAKIRA? UNA ESPECIALISTA DE LA UNAM LO EXPLICA

Depresión, segunda causa de discapacidad a nivel mundial

• De acuerdo con la OMS, se estima que será la primera en 2030 si no hay cambio de estrategias para atenderla a tiempo, alertó Laura Barrientos Nicolás
• Identificar tristeza persistente durante dos semanas junto con incapacidad de sentir placer, tener ansiedad o alteraciones en el sueño o la alimentación es importante para buscar ayuda, dijo Lucía Amelia Ledesma Torres
• Mañana se conmemora el Día Mundial de la Lucha contra la Depresión

Muchas veces oculta en el aislamiento, la soledad o en estados de ánimo sin entusiasmo ni ganas de vivir, la depresión es un trastorno mental presente en diferentes países, que no distingue edades, género o culturas, coincidieron especialistas de la UNAM.

“La tristeza es una emoción que puede llegar a presentarse en diversas ocasiones, y es absolutamente normal. Sin embargo, vamos a tener un trastorno depresivo cuando la tristeza dura más de dos semanas y es sólo un síntoma dentro de otros más”, explicó la académica del Departamento de Psiquiatría y Salud Mental de la Facultad de Medicina (FM) de la Universidad Nacional, Laura Barrientos Nicolás.

Reconoció que es un trastorno mental frecuente. “Se habla de que alrededor de 350 millones de personas en el mundo tienden a presentar depresión, una cifra muy alta”.


En conferencia de medios a distancia, la especialista añadió que: cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS) revelan que es la segunda causa de discapacidad a nivel mundial, y se estima que en 2030 será la primera si no existen cambios en las estrategias para atenderla a tiempo, pues afecta en los ámbitos emocional, laboral, social y económico.

México, abundó, ocupa el lugar 16 en el orbe en este padecimiento, el cual afecta al ocho por ciento de la población y tiene una prevalencia de cinco a 17 por ciento. Las mujeres están hasta tres veces más en riesgo de padecer depresión, pero cuando es grave los hombres cometen suicidio mediante ahorcamiento, con armas de fuego o se lanzan al vacío.

En este contexto, Barrientos Nicolás destacó la labor de la UNAM para brindar información y servicios profesionales en el Departamento de Psiquiatría y Salud Mental de la FM, en los servicios asistenciales de la Facultad de Psicología (FP) y en los cursos de formación de posgrado para tener nuevos especialistas en este campo.

En su oportunidad, la académica de la División de Estudios de Posgrado de la FM, Lucía Amelia Ledesma Torres, dijo que los síntomas a los que se debe estar atentos son: tristeza continua durante dos semanas, episodios de ansiedad, incapacidad para sentir placer (anhedonia), cambios en el apetito (aumenta o disminuye) y en los patrones de sueño (dormir mucho o tener insomnio), irritabilidad y dificultad para iniciar el día (por ejemplo para levantarse de la cama o bañarse).

La experta estimó que 50 por ciento o más de la población no identifica la depresión y tampoco acude a consulta, por lo que es importante identificar los síntomas y tener información sobre este padecimiento que se presenta en todas las etapas de la vida, especialmente de los 20 y 50 años (edad productiva); en edad infantil y adolescente (se ha manifestado en 11.5 por ciento de pacientes de cuatro a 16 años), y entre adultos mayores (la proporción es de 50 a 74 por ciento, muchas veces asociadas a otras enfermedades).

Ledesma Torres refirió que más del 50 por ciento de los suicidas han padecido depresión, razón por la cual es fundamental diagnosticar y atender a tiempo.

Acerca de la depresión y la pandemia, la especialista compartió que, de acuerdo con la Organización Panamericana para la Salud, durante la contingencia se registró el aumento de 25 por ciento, a nivel mundial, en los trastornos depresivos y de ansiedad.

En tanto, 2020 fue el año con más suicidios en México durante una década, pues mientras en 2010 ocurrieron cinco mil 12, en 2020 hubo siete mil 896, de acuerdo con cifras del INEGI.

Ledesma Torres sugirió contar con un adecuado diagnóstico, monitoreo y evaluación de los síntomas; identificar factores asociados y estresores para disminuir su impacto; favorecer el autocuidado y la adopción de estilos de vida saludable que refuercen el bienestar psicológico; psicoeducar a la población y a los familiares de los enfermos para que puedan identificar los síntomas; además de desarrollar normativas dirigidas a la salud mental a través de campañas de detección oportuna.

LOS INCUNABLES y la Colección mexicana, memoria viva de nuestra historia bibliográfica

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Se encuentran en el Fondo Reservado de la Biblioteca Nacional de México, el cual es una cápsula del tiempo que nos muestra cómo era esa entidad hasta 1920. La sala fue inaugurada en 1993, obra del arquitecto Orso Núñez, y fue pensada como un auditorio

Para explicar –y rápido– qué es el Fondo Reservado de la Biblioteca Nacional de México (BNM) podríamos decir que es una cápsula del tiempo que nos muestra cómo era esa entidad hasta 1920, refiere Alberto Partida Gómez, responsable de dicho acervo, el cual se divide en: obras raras y curiosas, fondo de origen, archivos y manuscritos, y colecciones especiales.

De entre las colecciones del Fondo son dos las que más llaman la atención: la Mexicana, por ser un retrato vivo del pensamiento de la Nueva España y por estar en una de las salas más hermosas de la Universidad, y la de Incunables, por tratarse de objetos que nos remiten a un momento único de la historia en el que los textos dejaron de ser copiados a mano, pero pese a ese avance tecnológico aún estaban lejos de parecerse al libro moderno.

Decía Borges que, de entre todos los objetos creados por el hombre, el más asombroso es el libro, pues mientras los demás son extensiones de su cuerpo, como el telescopio lo es de la vista, éste lo es de la memoria. Por ello la BNM –nacida en 1867 por decreto de Benito Juárez y en custodia de la UNAM desde 1929– ha establecido como su misión el ser divulgadora y guardiana justo de eso: de la memoria bibliográfica de México.

Memoria bibliográfica de México

¿Cuántos años caben en una habitación? Ésta es una pregunta que rara vez hace sentido, pero al hablar de la Sala Mexicana la respuesta es clara. “Aquí hay 267 años”, apunta Alberto Partida, para luego exponer que ello se debe a que el ejemplar más antiguo de la colección ahí albergada, el Dialectica Resolutio de fray Alonso de la Vera Cruz, data de 1554, mientras que el más reciente es de 1821 y se llama Poesías, es de José María Moreno y fue editado en Puebla poco antes de que el emperador Iturbide entrara a la Ciudad de México, encabezando al Ejército Trigarante.

Este espacio inaugurado en 1993 –está por cumplir 30 años– es obra del arquitecto Orso Núñez, quien creó una estructura cónica de 10 metros de altura, recubierta de madera color caoba. El tener una pared curva y continua permite que la Colección Mexicana sea acomodada en orden cronológico y que descienda, desde un primer nivel a la planta baja, gracias a una estantería dispuesta en espiral. Al centro hay una gran mesa con forma de anillo rodeada por 32 sillas con respaldos y asientos forrados en cuero, tal y como muchos de los libros ahí guardados.

“Lo que tenemos aquí es la historia bibliográfica de la Nueva España, una que inicia con la llegada de la primera imprenta a América, que abarca todo el movimiento de Independencia y que cierra con la caída del Virreinato, justo antes del nacimiento de México como país.”

A decir del jefe del Fondo Reservado de la BNM, revisar la Colección mexicana es una oportunidad inmejorable de observar, y en primera fila, la evolución del pensamiento novohispano, pues debido a que los ejemplares están acomodados por año, es muy fácil detectar qué temas interesaban a la Colonia según determinados momentos históricos.

“En una primera época predominan los textos relacionados con el choque de las culturas europea e indígena: aquí abundan los diccionarios, vocabularios y textos que profundizan en las lenguas originarias. Con el correr de los siglos cobrarán importancia otro tipo de textos, como los sermonarios y demás herramientas de evangelización. Ya hacia el final, en el siglo XVIII, es cuando vemos gacetas y textos científicos y literarios.”

Para ingenieros y arquitectos, las características de la Sala mexicana son algo a estudiar debido a su manejo de los espacios, pero para los bibliotecarios el espacio plantea un reto, pues Orso Núñez no consideró que la habitación terminaría como reservorio de libros, sino que la pensó como auditorio, por lo que en su construcción empleó materiales no óptimos para la conservación de textos antiguos, como la madera, y colocó un gran ventanal que permite el paso del Sol, cuya luz es muy dañina para los libros.

Frente a ello, el personal de la BNM ha desarrollado una serie de estrategias para mantener a la Colección mexicana en óptimo estado: el vidrio de la ventana tiene un filtro especial que evita el paso de los rayos UV, la madera fue tratada de tal manera que es imposible que albergue hongos o insectos y, en el sitio, hay una serie de aparatos que mantienen la humedad relativa entre 45 y 55 por ciento y la temperatura entre los 18 y 20 grados.

“Además, tratándose de títulos tan especiales hemos limitado el acceso a la sala. De hecho, ningún usuario puede entrar”. Sin embargo, todos los textos están a disposición del público, basta con llenar una forma para que cualquier usuario tenga acceso a la Colección Mexicana en su totalidad.

Se preguntaba Borges, “¿qué es un libro si no lo abrimos?”, a lo que él mismo respondía, “es simplemente un cubo de papel y cuero con hojas”. Alberto Partida es de la misma opinión, pues cree que un escrito no leído pierde todo su sentido. “Me gustaría que más gente se acercara a ver lo que hay en esta colección. Estos ejemplares aún tienen mucho por decir. Aunque escritos para lectores novohispanos, sé que nos tienen reservadas un par de sorpresas si nos damos el tiempo de hojearlos.”

La primera infancia del libro

Al hablar de libros, mencionar “incunable” evoca cierto misticismo, pues casi todos saben que estos ejemplares son considerados objetos excepcionales por los bibliófilos, pero pocos podrían precisar por qué.

Sobre esto, Partida detalla que la palabra incunable significa “en la cuna” y fue acuñada en 1640 por Bernhard von Mallinckrodt a fin de designar a los libros creados en esa franja de cinco décadas que va de la aparición de la imprenta de Gutenberg, en 1453, a 1500. “La BNM tiene una colección de 173 de estas piezas, aunque en realidad son 182 títulos, porque un volumen puede contener tres o cuatro obras del mismo autor o tema.”

Para el jefe del Fondo Reservado, uno de los aspectos más interesantes de estos objetos es la enorme cantidad de datos que aportan con sólo mirarlos. Y es que si los libros fueran un ser vivo, observar un incunable sería como ver la foto de algún amigo cuando era muy pequeño y darnos cuenta de que ciertos rasgos incipientes hacen que el rostro nos sea familiar, pese a que aún le falten muchas de las características que tendrá de adulto.

“Una de las cosas que de inmediato notamos es que no tienen portada, y no por haberla perdido, sino porque en su época de creación ese elemento no existía, eso fue un añadido posterior. Lo mismo pasa con la numeración de las páginas, por poner tan sólo un par de ejemplos.”

Lo primero que sorprende a quien ve uno de estos objetos de cerca es lo bien conservados que se encuentran a sus 550 años, en especial si se considera lo mal que han resistido al tiempo muchos ejemplares impresos hace pocas décadas, apenas en el siglo XX.

“Ello se debe a que los incunables fueron manufacturados con papel de trapo y no con pulpa de madera, como se hace ahora. El problema es que, al entrar en contacto con la luz, se generan procesos que hacen que las hojas pierdan humedad, se resequen y se tornen quebradizas.”

Mantener un incunable en estado óptimo no es tan difícil como se creería –añade Partida–, pues una vez que los hemos sometido a exámenes de laboratorio para comprobar que sus materiales están libres de agentes nocivos lo único que debemos hacer es mantener las condiciones adecuadas de humedad y temperatura, y limpiarlos con frecuencia.

Sin embargo, ello no implica que los 173 ejemplares de la Universidad Nacional no muestren mellas, manchas, grietas y una infinidad de desperfectos, algo que a decir de Alberto Partida no se debería ocultar, sino destacarse.

“Esos pequeños accidentes nos comparten muchísima información, como a quién pertenecieron e incluso su valor, como podemos apreciar en cierto título que a mí me interesa en lo particular, ya que por las anotaciones hechas en sus páginas sabemos que le fue obsequiado al escritor Ignacio Manuel Altamirano en 1869 y que su costo en esos años era de 200 pesos en las librerías de París, lo cual equivalía a una pequeña fortuna.”

Por ello, ante quienes sostienen que los incunables deben ser restaurados para restituirles su apariencia de nuevos, Alberto Partida se manifiesta contrario, pues opina que éstos deben ser aceptados tal y como son, con todo y sus defectos. “Eso refleja que el libro fue consultado, leído, útil y que transmitió el mensaje. Todo eso, al final, deja marcas, pero también un testimonio.”

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UNAM brinda cursos gratuitos en línea para el público en general

Desde aprendizaje de Excel, economía, alimentación y hasta cómo elaborar un CV, cantar y sobre sexualidad, son los cursos que la plataforma Aprendo+ de la Coordinación de Universidad Abierta, Innovación Educativa y Educación a Distancia (CUAIEED) ofrece al público en general.

“La idea surgió después de hacer un análisis, hace siete u ocho años, de lo que faltaba en la Universidad sobre cultura general en línea. No teníamos cursos que atendieran las necesidades de la comunidad en general y de la sociedad. Entonces comenzamos con un proyecto al que denominamos cursos de cultura general, y en 2016 los bautizamos como Aprendo+”, explica Jorge León Martínez, director de Proyectos de Educación Abierta y a Distancia de la CUAIEED.

Académicos y académicas de la Universidad, e incluso de otras entidades que no son de la UNAM, desarrollan los cursos de la plataforma. “Por eso tenemos también de Protección Civil y de las sedes de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México. En algún momento trabajamos con ellos, vieron el proyecto y se animaron a agregar temas a Aprendo+”, comenta Edith Tapia Rangel, subdirectora de Proyectos de Educación Abierta y a Distancia de la CUAIEED.

Los cursos están basados en las cuatro áreas de conocimiento de la UNAM: ciencias físico-matemáticas y de las ingenierías; ciencias biológicas, químicas y de la salud; ciencias sociales; humanidades y de las artes. Jorge León menciona que “durante la pandemia fueron muy socorridos los cursos del área médica y sobre las tecnologías. Había personas fuera de la UNAM, incluso familias, que necesitaban aprender ciertas herramientas y nos consultaron”.

Se busca que los estudios sean de interés general y que tengan un impacto en la sociedad. “Lo importante de esta plataforma es el brindar parte de nuestros conocimientos a la sociedad de una forma muy sencilla, sobre un tema que podría ser complicado. Por ejemplo, hay uno que se llama Cuando el amor acaba el divorcio empieza. El nombre es curioso, pero es algo que debe tenerse en mente, y que a veces no pensamos en esa parte legal cuando pasamos por un suceso de este estilo”, comenta León Martínez.

¿Cómo acceder?

La plataforma (https://aprendomas.cuaed.unam.mx/) cuenta con casi 80 cursos gratuitos a los que puede acceder el público en general, para ello únicamente se necesita un registro que les permitirá ingresar al curso en cualquier momento del año. Éstos son autogestivos; es decir, no cuentan con asesores, cada persona debe completar las actividades, y al terminar cada unidad, generalmente, se realizan autoevaluaciones para que puedan conocer sus avances.

Al finalizar cada curso se otorga una constancia que no tiene valor curricular, “su fin solamente es dar cultura general a las personas, permitirles resolver alguna situación, apoyarlas y darles conocimientos”, explica Edith Tapia.

Agrega que “los cursos Aprendo+ son de la Universidad para México en un principio, y Latinoamérica en un segundo plano, porque somos hispanohablantes, y para cualquier otra persona a la que puedan apoyar. Son cursos hechos con mucha dedicación y esfuerzo. Se decidió hacerlos como parte de la extensión de la cultura y el conocimiento, y con el fin de devolver a la sociedad lo que ésta le da a la Universidad”.

Actualmente la plataforma tiene más de un millón 600 mil usuarios y usuarias, “y queremos llegar lo más pronto posible a dos millones, no tanto por la cifra, sino porque eso quiere decir que es necesario este tipo de proyectos para la sociedad y que la educación en línea es un buen medio de lograr esa formación”, concluye Jorge León.

Cumbre de América de Norte: una oportunidad

• Silvia Núñez García refirió que este encuentro manda una señal positiva
• A pesar de las diferencias en migración o seguridad, el comercio florece: Roberto Zepeda Martínez
• María Cristina Rosas González consideró que la relación entre México y Canadá es el eslabón más débil
• Para Tomás Milton Muñoz Bravo, México debe evitar le transfieran las obligaciones de EUA en materia migratoria

En la relación de los tres países de América del Norte es absolutamente indispensable que existan proyectos de largo alcance centrados en otros temas como salud y educación, más allá del comercial. A partir de que inició la primer Cumbre de Líderes de la región no se ha logrado un sentimiento de comunidad y, más que avanzar en las coincidencias, prevalecen las divergencias, señalaron expertos de la UNAM.

Para hacer frente a tópicos como prosperidad económica, cambio climático, migración o pandemias, es imprescindible la cooperación internacional, y en especial la regional. Los estados se ven obligados a trabajar juntos confiando en los esfuerzos colectivos y como prueba de la interdependencia entre las naciones, añadieron en la conferencia de medios a distancia ¿Qué, con la X Cumbre de Líderes de América del Norte?

Silvia Núñez García, directora del Centro de Estudios Mexicanos UNAM-Los Ángeles, e investigadora del Centro de Investigaciones sobre América del Norte (CISAN), expuso que este encuentro envía una señal siempre positiva donde se mantiene el diálogo. En un escenario, regional y global, complejo, pospandemia, quedan asignaturas pendientes como el rescate de las economías.

Sin embargo, cada uno de los líderes tiene una serie de temas estratégicos -que no necesariamente se atienden con un enfoque trilateral- y que refieren a las prioridades de sus naciones. Ejemplo de ello es apuntalar a la clase trabajadora para que escale a las clases medias o la movilidad laboral, en Canadá; el tema migratorio, para Estados Unidos; o la inseguridad en México, que manda una señal de preocupación para los inversionistas extranjeros.

En ese sentido, comentó la especialista, esperaría que los presidentes de EU y México, y el primer ministro de Canadá, no se limiten a una mirada “cortoplacista” la semana entrante.

En la relación hay una serie de esfuerzos -bilaterales e incluso trilaterales- donde se puede ir “bordando fino” hacia un futuro compartido, aunque no llegará mientras la interdependencia sea profundamente asimétrica como lo es entre México, Estados Unidos y Canadá, ya que estos dos últimos tienen otro nivel de desarrollo en contraste con nuestro país.

Roberto Zepeda Martínez, también académico del CISAN, recordó que a partir del Tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) se ha generado mayor integración económica y hay cadenas de suministro integradas, en industrias como la automotriz o electrónica.

América del Norte, destacó el universitario, es una de las regiones más competitivas del mundo, con 500 millones de consumidores, 30 por ciento de la producción de bienes y servicios a escala mundial, y por ser la zona de libre comercio más grande del planeta.

Además, precisó, 14 millones de empleos en la Unión Americana dependen del comercio con sus vecinos del norte y del sur; lo mismo ocurre en México, con 10 millones de puestos de trabajo, y en Canadá, con tres millones. A pesar de las diferencias en temas como migración o seguridad, el comercio florece.

Aunque la relación trilateral no es profunda, dijo, existe. Prueba de ello son estos encuentros, y la generación de oportunidades de empleo, protección a los trabajadores, garantía de sindicalización, aumento de los salarios y generación de nuevas inversiones en industrias manufactureras vitales. Ahora se abre la oportunidad de que México insista en un acuerdo que propicie migración regulada, segura y con respeto a los derechos humanos. “Hay que ver a estas cumbres como la oportunidad de hacer frente a los problemas comunes y fortalecer a la región”.

María Cristina Rosas González, académica de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS), consideró que la relación entre México y Canadá es el “eslabón más débil”; aunque se ha fortalecido en lo comercial, las inversiones y el turismo, “la realidad es que se ha distinguido por la incomprensión, la lejanía geográfica y la retórica”.

La experta recordó que México prometió al inicio de la negociación del T-MEC ir “codo a codo” con los canadienses, pero de repente se desprendió de ese compromiso por su relación con Estados Unidos durante la administración de Donald Trump.

Ese, entre otros puntos, dañó la relación bilateral México-Canadá y no se ha dado una “operación cicatriz”; no ha habido un acercamiento ni gestión política ni diplomática para sanar esas “heridas”. En ese sentido, se esperaría que, a partir del lunes próximo, durante la reunión del presidente mexicano con Justin Trudeau se avance en esa meta y que los temas que han enturbiado la relación bilateral sean solventados.

Podría haber voluntad de las dos partes para realizar mejor gestión política y mirar al presente, pero sobre todo al futuro, en un momento complicado en el cual el mundo es convulso, resurge la pandemia y es necesaria la recuperación económica. México requiere inversiones y relaciones comerciales más predecibles, aseveró.

De acuerdo con Tomás Milton Muñoz Bravo, también integrante de la FCPyS, las comitivas en la Cumbre establecen una idea de los temas a tratar: EUA se centraría en seguridad y migración; México trabajaría en los mismos tópicos; pero la de Canadá “es escueta”, con la presencia de las ministras de Asuntos Exteriores y de Pequeñas Empresas, por ejemplo, y “probablemente se amplíe”.

El académico externó que en las cumbres IX y X hay continuidad de temas, entre ellos promoción de la salud, fomento de la competitividad en el mundo, así como seguridad (enfocada al narcotráfico y tráfico de personas y armas), además de migración y medio ambiente. “Hay que dar seguimiento a cada uno, porque no todos los elementos a los cuales se comprometieron los tres mandatarios en la cumbre pasada han tenido avances significativos”.

Muñoz Bravo recalcó que México no debe ser un país inseguro para los migrantes, ni aceptar que las obligaciones de Estados Unidos en la materia se le transfieran. En la práctica, nuestro país sigue admitiendo a una gran cantidad de migrantes, solicitantes de asilo y de refugio; eso significa que están saturadas numerosas ciudades del norte del territorio, pero sin un compromiso claro de los estadounidenses para apoyar.

El suelo, base de la vida

• Silke Cram Heydrich participó en una iniciativa en la que evaluó la calidad del suelo del Bosque de Chapultepec como soporte de la vegetación

De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en el mundo la pérdida de nutrientes en el suelo es uno de los principales procesos de degradación que amenaza la nutrición, la seguridad alimentaria y la sostenibilidad.

En los últimos 70 años, añade, el nivel de vitaminas y nutrientes de los alimentos se ha reducido de manera drástica y se estima que más de dos mil millones de personas en el planeta sufren deficiencia de micronutrientes, también conocida como “hambre oculta”, debido a que es difícil de detectar. Por ello, es necesario voltear a ver los suelos y nutrirlos para que, a su vez, lo hagan con las plantas y los organismos. Suelos sanos y una vida sana.

Son la base de la vida en la superficie terrestre, pues en todos lados que no están cubiertos de agua hay uno que se ha formado a partir de factores específicos, y es el soporte de vegetación y vida de los organismos terrestres.

“La Organización Mundial de la Salud habla de que debe haber al menos nueve metros cuadrados de áreas verdes por cada habitante, para el bienestar del ser humano. Se habla de un déficit de naturaleza cuando no tenemos acceso a áreas verdes y para contar con zonas de calidad, debe haber suelos de calidad.

Otra cosa, tal vez aún más importante, es que requerimos de los suelos para producir alimento. Los que vivimos en la ciudad y compramos en el mercado se nos olvida que todo eso creció en algún momento sobre un suelo”, expuso la investigadora del Instituto de Geografía de la UNAM, Silke Cram Heydrich.

Para que funcione adecuadamente y tenga calidad o salud, debe estar en contacto con las otras esferas de la Tierra -la hidrosfera, la biosfera y la atmósfera- para fomentar un ciclaje de nutrimentos y que haya minerales, las raíces absorban esos minerales y contribuya a los ciclos biogeoquímicos del ecosistema, abundó.

De acuerdo con la experta, el suelo se forma a partir de una roca o un material parental que, sobre la base de la interacción con agua, aire, temperatura y tiempo, da lugar al que conocemos y soporta la vegetación en un proceso que tarda miles de años, por eso su destrucción genera un problema importante, porque no se regenerará en los tiempos de vida de un humano y es un recurso no renovable.

El pulmón de la CDMX

Un estudio en el que participa Cram Heydrich revela que el Bosque de Chapultepec cuenta con 3.82 hectáreas de caminos en desuso o abandonados, que son revegetados de manera natural, que pueden recuperarse mediante la eliminación, o bien, la ruptura de la capa del concreto o cemento.

La investigadora detalló que actualmente en estas áreas se observa regene­ración de plantas anuales que crecen entre el asfalto intemperizado, lo cual es indicativo de la resiliencia del suelo y del potencial que tienen estas áreas para incrementar la biodiversidad.

Los resultados del trabajo, presentados en la revista Investigaciones Geográficas, del Instituto de Geografía, titulado “Sellamiento del suelo en el Bosque de Chapultepec y propuestas de restauración”, también indican que, básicamente, la primera y segunda sección -que son las más visitadas- tienen suelos modificados por el ser humano, con 45 y 52 por ciento de sellamiento, respectivamente.

Cram Heydrich explicó: “Es muy fácil decir qué bonito está el Bosque, y asociarlo inmediatamente a poner alguna infraestructura como, por ejemplo, un quiosco que requiere una base de cemento y así ya se selló otro pedacito de suelo, y con ello se anuló la función ecológica que cumple. Justo queríamos llamar la atención de que es importante evaluar o considerar estas funciones y la necesidad de mantenerlas para que el Bosque de Chapultepec sea realmente un sitio de bienestar y recreación para los seres que lo habitan o pasean”.

La tercera sección, que se encuentra alejada de las princi­pales vías de comunicación públicas, presenta 14 por ciento de sellamiento; en el lugar se encontraron aproximadamente 26 quioscos abandonados que cubren un área de cinco mil 955 metros cuadrados, destacó la experta.

Al respecto, Cram Heydrich consideró que lo ideal no es quitar las estructuras (quioscos, mesas de concreto u otras), sino romperlas para que esto permita la entrada de agua, semillas, acumulación de sedimentos y materia orgánica producto de la caída de hojarasca.

Debido a que en las dos primeras secciones la posibilidad de contar con los servicios ecosistémicos como infiltración y purificación de agua, captura de carbono y conservación de biodiversidad está fuertemente limitada, los expertos han sugerido a las autoridades del Bosque reconsiderar la necesidad de realizar nuevas construcciones y, de acuerdo con el caso, planear mejor su distribución para reducir, en la medida de lo posible, la superficie sellada.

La revisión del suelo surgió como una iniciativa impulsada por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) para evaluar la calidad del Bosque; participaron varios grupos de especialistas que revisaron el arbolado, la flora y la fauna, así como la calidad del agua superficial, lo relacionado con este recurso natural y sus corrientes. En la iniciativa, Cram Heydrich, junto con Helena Cotler Ávalos, del Centro de Investigación en Ciencias de Información Geoespacial del Conacyt, evaluaron la calidad del suelo como soporte de la vegetación.

Cumbre de Líderes de América del Norte

La obra de Raúl Tamez, un espacio donde danza y sociología dialogan

Hay noches que pueden cambiarnos la vida; para Raúl Tamez fueron dos. La primera tuvo lugar hace unos 20 años, cuando estaba por cumplir los 17 y, al no encontrar boletos para el teatro, entró a una función de danza contemporánea, sin saber muy bien de qué iba aquello. “Era una puesta llamada Espejo de linces, de Cecilia Lugo, y lo que vi sobre el escenario me dejó sin palabras. Ahí supe que mi futuro era ser bailarín”.

La segunda se remonta a 2013, cuando a falta de oportunidades en México migró a Barcelona. “Estaba muy triste, llevaba medio año sin encontrar trabajo dancístico; sólo me ofrecían empleos de mesero y en call centers, y contemplaba con seriedad renunciar al arte. Una noche el encargado del bar que frecuentaba, un catalán corpulento y algo entrado en años, al verme tan deprimido me dijo, ‘tú bailas, ¿cierto? ¿Por qué no, en vez de dolerte, montas tu propia coreografía? Te presto el foro y haces algo para los clientes. Así nació mi primera pieza: Payaso capital’”.

Hay un tercer evento que Raúl no cuenta entre los anteriores (y sólo porque no sucedió de noche, mas no por ello le resulta menos importante):  cuando se inscribió en la UNAM para estudiar Sociología, algo crucial para él pues, desde entonces, dicha disciplina ha marcado sus obras. Y es que —dice—, a diferencia de la danza clásica que repite siempre las mismas dramaturgias y se autolimita a Diana y Acteón o el Lago de los cisnes, la contemporánea se abre al mundo, dialoga con la actualidad y te permite reflexionar sobre la sociedad y sus problemas.

Desde Payaso capital, su ópera prima donde habla sobre los parados (desempleados) de España, hasta Migrant mother, inspirada en entrevistas que hizo en Nueva York a integrantes de la comunidad mexicana del Bronx, las piezas de Tamez son las de un coreógrafo convencido de que el arte es tan capaz de exaltar sentimientos como de revolucionar mentes.

“Mi deseo de lograr justo eso me llevó a revisar los planes de la UNAM. Al principio me debatía entre cursar Psicología o Sociología; al final elegí la última y la estudié a distancia. Yo hice la secundaria en sistema abierto así que la modalidad no me intimidaba; además, sólo así podía compaginar mis estudios con algo tan demandante como el baile”.

Ganador en 2016 del Premio Nacional de Danza Guillermo Arriaga, la crítica especializada ha sido entusiasta al destacar las propuestas frescas y arriesgadas de Tamez, algo que él aduce a su forma de crear, una donde las ciencias sociales y el arte dialogan. “Intento establecer puentes que vayan de la teoría a lo artístico y viceversa, aunque la finalidad siempre es estética, nunca la de generar una tesis o un tratado”.

¿Un bailarín metido a sociólogo? Raúl refiere que ésta es una de las preguntas que más le formulan y cuando la escucha  suele responder que para él esto es como abarcar un espectro que va del ying al yang, “pues si bien en lo académico te mueves en el campo de lo objetivo, en lo artístico prima la subjetividad”. Y en ello no encuentra ninguna contradicción; para él los marcos teóricos le han servido para ver, con otros ojos, al arte.

“Por ejemplo, y para usar un concepto de Ricoeur, yo diría que la danza contemporánea, por su uso de la abstracción y la metáfora, genera exceso de sentido”, añade Tamez en alusión a aquel fenómeno descrito por el antropólogo francés donde el lector accede a nuevos entendimientos si acepta que hay ideas opuestas que, al colocarse juntas, revelan verdades evidentes, como la de que existen alegrías tristes, silencios atronadores o días con la capacidad de cambiarnos la vida que son, en realidad, noches.

A Tamez le gusta reflexionar sobre su arte y no lo oculta. “¿Y por qué lo haría? La danza me lo ha dado todo, la posibilidad de conocer gente interesante, de vivir en siete países y de viajar a 36”, y aunque se presente siempre como bailarín, casi de inmediato añade que es también sociólogo, como si fuese lo más natural del mundo. “Nos demos cuenta o no, la danza es sociológica: todo el tiempo representa lo que vivimos socialmente”.

UNAM desarrolla instrumento para obtener imágenes espaciales más nítidas y más lejanas

FRIDA, instrumento desarrollado en la UNAM, se instalará en 2023 en el Gran Telescopio Canarias (GTC), el telescopio óptico infrarrojo más grande del mundo, que le permitirá obtener imágenes de mayor nitidez. Su tecnología es similar a la que utiliza el James Webb de la NASA, por lo que se espera que pueda observar objetos muy lejanos y con gran precisión.

FRIDA (inFRared Imager and Dissector for Adaptive optics) permite hacer imagen y espectroscopía integral de campo en un sólo instrumento en el infrarrojo cercano, según explica Beatriz Sánchez y Sánchez, investigadora del Instituto de Astronomía de la UNAM y responsable técnica y gerente del proyecto FRIDA, en el que también colaboran científicos españoles y estadunidenses.

La experta comenta que “FRIDA es un instrumento que recibirá el haz corregido del Gran Telescopio Canarias mediante técnicas de óptica adaptativa, que corrige –aunque no al cien por ciento– la turbulencia que produce la atmósfera y entrega la imagen más nítida posible, por lo que tendrá una gran resolución espacial y espectral, similar a la de un instrumento colocado en el espacio. Dado que trabaja al límite de difracción y en el infrarrojo cercano, será capaz de ver objetos fríos en el universo. Esto requiere que el instrumento esté contenido en un gran criostato que opera a un alto vacío y muy bajas temperaturas, inferiores a -150 grados centígrados”.

El GTC recolectará una gran cantidad de luz porque tiene un espejo primario de 10.4 metros de diámetro. Se trata del telescopio más grande en este momento en base tierra. Gracias a esas dimensiones y con el sistema de óptica adaptativa, FRIDA producirá imágenes con muy alta resolución espacial. “De esa manera, podrán tomarse imágenes directas de objetos que están muy cercanos y, además, hacer espectroscopía integral de campo de alta resolución espectral, necesaria para saber en qué longitudes de onda emiten”, apunta Beatriz Sánchez.

Operación al alto vacío y a muy bajas temperaturas

Los elementos que conforman al instrumento FRIDA son un parteaguas en la manufactura en México, pues sus criostatos de grandes dimensiones, a decir de Sánchez y Sánchez, nunca habían sido fabricados en el país. “También cuenta con ruedas de varios filtros que podrán cambiarse para observar las longitudes de onda deseadas, así como con una rueda de cámaras que permite cuatro escalas de resolución de imagen. Para la espectroscopía, se tiene una unidad de campo integral con rebanador de imágenes y un carrusel con rejillas de difracción para obtener una alta resolución espectral. Todo esto tiene que moverse con una altísima precisión y repetibilidad de posicionado. Esa demanda de precisión en los movimientos en sistemas criogénicos es algo que no se había desarrollado en México”.

La doctora en Astrofísica resume que “se trata, pues, de subsistemas muy complejos con componentes ópticos y mecánicos que trabajan conjuntamente, que se fabrican y ensamblan a temperatura ambiente, se alinean sobre un banco óptico y tendrán que operar a alto vacío y a muy bajas temperaturas”.

¿Cuáles serán sus aportes?

¿Qué aporta FRIDA a la astronomía mundial? Sánchez y Sánchez enfatiza: “El que el instrumento esté en un telescopio de 10.4 metros de diámetro permitirá una mayor captación de luz, para poder observar objetos mucho más lejanos. Contar con el sistema de óptica adaptativa y capacidades de FRIDA posibilitará mejorar nuestro conocimiento sobre la evolución de las galaxias, el comportamiento de los hoyos negros, las formaciones estelares. También podrán observarse nubes moleculares, entre otros objetos. En suma, las capacidades de FRIDA permitirán abordar una nueva y amplia gama de objetivos científicos”.

Debe señalarse que el Instituto de Astronomía ha colaborado con el Instituto de Astrofísica de Canarias desde hace mucho tiempo. “Cuando ellos empezaron el desarrollo del GTC –comenta Beatriz Sánchez– se nos invitó a ser socios y a colaborar en la construcción del GTC, en programas científicos y en el desarrollo de instrumentos. Nuestros grupos de instrumentación contaban con experiencia en la creación de instrumentos para nuestros observatorios, así que nos invitaron a colaborar desde hace más de dos décadas. De hecho, FRIDA es el tercer instrumento que genera nuestro grupo para el GTC.

La participación del IA en el desarrollo de los instrumentos mencionados, incluyendo a FRIDA cuando esté terminado en 2023, ha permitido que los astrofísicos de dicha instancia universitaria y de México cuenten con tiempo de observación en el GTC.

Por su parte, José Franco, también del Instituto de Astronomía, señala que “FRIDA es un instrumento con características que lo vuelven único”.

Para el especialista, la diferencia de FRIDA con los otros instrumentos es que la turbulencia de la atmósfera de la Tierra distorsiona la imagen de los objetos celestes. “Dicha turbulencia se origina por diferencias en densidad, temperatura y velocidad de las partículas que hay en la atmósfera, de tal forma que cuando vemos las estrellas parecen parpadear. Éste no es un efecto intrínseco de las estrellas, sino uno producido por la atmósfera que termina generando imágenes borrosas de los objetos del cosmos. FRIDA estará asociado a otro instrumento, un corrector de la turbulencia, o sea, un corrector de imágenes, el cual apenas se está implementando en el Gran Telescopio Canarias. Lo que hará este primer instrumento es utilizar un rayo láser para excitar las partículas que están en la parte alta de la atmósfera para que radien y generen una estrella artificial. Ésta, que será suficientemente brillante, se utilizará para saber cómo está la turbulencia en las diferentes capas atmosféricas. Y con esta información se puede deformar el espejo secundario del telescopio para que se compense la que viene de la atmósfera”.

Haciendo un símil, es parecido a los audífonos que cancelan ruido. Estos tienen un sensor que mide el ruido y electrónicamente generan la señal opuesta. Así que electrónicamente se produce la forma contraria al ruido, un “antirruido”, de tal manera que cuando se suman se elimina el ruido producido por el medio ambiente.

Franco explica: “En el caso de la imagen, se hace exactamente lo mismo. Se mide la deformación que tiene la onda de luz que llega al espejo principal del telescopio y electrónicamente se genera una deformación en el espejo secundario, justamente la contraria a la que viene en el haz de luz, de tal manera que se logra una magnífica corrección. Esto es justamente lo que hace este corrector de turbulencia. Para utilizar con eficiencia ese haz corregido, se necesitan instrumentos muy sensibles que puedan extraer la mayor información de ese haz corregido. FRIDA será el primer instrumento que hará uso del haz corregido y obtener tanto imágenes muy nítidas así como los espectros de los objetos del cosmos. Se trata de un instrumento muy complejo. Llevamos cerca de 10 años desarrollándolo y el Instituto de Astronomía ha estado liderando ese proyecto desde el inicio”.

Desarrollan proteína: nutre apropiadamente a adultos mayores

  • Atrajo el interés de un fondo de inversión de Estados Unidos, expuso Gabriel del Río Guerra
  •  Hay proteínas en polvo, pero no se producen de manera sustentable, dijo

Investigadores del Instituto de Fisiología Celular (IFC) de la UNAM elaboran una proteína que cuente con la cantidad adecuada de aminoácidos esenciales y nutra apropiadamente a adultos mayores y personas con diversas enfermedades, quienes no pueden procesar las proteínas de los alimentos naturales.

El investigador Gabriel del Río Guerra, quien dirige a este grupo de expertos, explicó que por la tecnología desarrollada hasta ahora se registró una patente ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial y ante la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual.

Su invención atrajo el interés de un fondo de inversión de Estados Unidos, el cual les apoya para desarrollar pruebas y escalar su producción, a fin de comercializarla.

Con su invento también buscan atender otras problemáticas. Al respecto, el investigador comentó que la forma en que actualmente producimos alimentos no garantiza que en el futuro se contará con todos los que requerirá la población mundial, en crecimiento. Esta elaboración no es sostenible en el largo plazo y tiene importante impacto en el medio ambiente.

Muestra de lo anterior, prosiguió, es que 92 por ciento del agua dulce que existe en el planeta se destina a la agricultura y ganadería -las cuales contribuyen de manera importante a la generación de gases de efecto invernadero-, y sólo ocho por ciento para nuestra higiene e hidratarnos.

¿Alimentos idóneos?

El experto en Bioquímica y Biología Estructural estimó que de 35 a 40 por ciento de la población no se beneficia con los alimentos actuales. Y ejemplificó: quienes tienen la enfermedad hereditaria de Fenilcetonuria no pueden procesar las proteínas de origen animal o vegetal, pues contienen el aminoácido esencial Fenilalanina.

“Al no poderlas degradar empiezan a acumular compuestos nitrogenados en el cuerpo que los intoxican. Estas personas no pueden consumir las cantidades de proteína que un humano requiere y tienen problemas de nutrición y desarrollo. Se estima que entre el uno y tres por ciento de los humanos presentan enfermedades como la Fenilcetonuria”, señaló.

Otro grupo lo representan aquellos con padecimientos crónicos de los riñones, problema en aumento en México y Estados Unidos, debido al incremento del sobrepeso y la obesidad que conllevan al Síndrome metabólico, alteraciones cardiacas y diabetes. En la Unión Americana se calcula que aproximadamente 15 por ciento de la población adulta enfrenta estas afecciones.

Se suman las personas de la tercera edad o mayores de 65 años. A partir de los 40 años inicia un proceso de envejecimiento fisiológico normal que implica la pérdida de la función y de masa muscular, conocido como sarcopenia, explicó Del Río Guerra.

“Se estima que, a partir de los 40 años, cada década pierde un ocho por ciento de masa o función muscular. En Estados Unidos, entre un cinco y 10 por ciento de los mayores de 65 años necesita de asistencia para moverse -bastones o algún tipo de aditamento- y entre las personas de más de 80 años aumenta al 50 por ciento.

“En Singapur, donde tienen una dieta menos rica en proteínas y son más vegetarianos, el 50 por ciento de las personas de 65 años ya requiere de asistencia para moverse, lo cual nos indica que para evitar que se presente la sarcopenia de manera acelerada, es necesario hacer ejercicio y tener una dieta rica en proteínas”, agregó.

Sin embargo, en la medida que envejecemos también se pierde apetito y los alimentos ricos en proteína con los que se cuenta, no son los adecuados para ese grupo de edad.

“Uno se puede comer, por ejemplo, un pastel con mucha grasa y carbohidratos y se siente lleno, pero si ingieres medio kilo de filete de res te puede generar sensaciones de taquicardia, sudoración, vómito, náuseas; la reacción del cuerpo ante un exceso de proteínas es mucho más crítica”, refirió el experto.

Del Río Guerra precisó que actualmente se ofrece proteína en polvo derivada de la leche de vaca o del chícharo, que pueden resolver parte del problema de la nutrición, pero no son suficientes y se producen bajo procesos no sustentables. Además, esta presentación en polvo no es muy agradable al gusto.

“Quienes promueven el consumo de proteínas en polvo son los atletas de alto rendimiento o personas que quieren desarrollar musculatura y están dispuestos a sufrir un poco en esa parte del gusto para conseguir el objetivo de desarrollar masa muscular”, dijo.

La proteína que desarrollan los científicos de la UNAM cuenta con la proporción óptima de los aminoácidos esenciales, es decir, los que se requieren consumir diariamente para el funcionamiento de nuestro cuerpo y para ello utilizaron diseño computacional. También se apoyaron en lo que se conoce como evolución dirigida para identificar una célula que produce más de la proteína que diseñaron.

En la naturaleza, insistió, no hay planta o animal con estas características pues no están diseñados para alimentarnos, sino para sobrevivir en el entorno donde crecen. “Nosotros hemos venido usándolos porque es la forma cómo aprendimos tempranamente a alimentarnos, pero hoy, gracias al entendimiento que tenemos de la nutrición, podemos ver que esto que hemos hecho a lo largo de miles de años no es lo óptimo”.

De la obra a la escuela

A mediados de los años setenta, la entonces Escuela Nacional de Arquitectura, hoy Facultad de Arquitectura (FA) de la UNAM, utilizaba sus instalaciones para impartir cursos a maestros de la obra, iniciativa que surgió a partir del movimiento estudiantil denominado “Autogobierno”, donde la democratización de la enseñanza y la vinculación popular fueron sus dos principios fundamentales, en los cuales se formaron miles de arquitectos mexicanos y una cantidad importante de extranjeros, en su mayoría latinoamericanos.

El movimiento estudiantil de Arquitectura ha dejado su huella en el quehacer académico y político de este país, al proponer una arquitectura sustentable, menos suntuaria, más acorde con la realidad económica y social, imaginativa, bella y funcional.

De acuerdo con Armando Carranco Hernández, jefe de la División de Educación Continua y actualización docente de la FA, a partir de 2015 se formalizó la manera de relacionarse con ese sector de la sociedad y de aportar a la comunidad.

Llevamos a cabo una relación contractual con Holcim, empresa cementera, que tiene el proyecto Escuela Mexicana de la Construcción, a través de la cual se impartió un curso piloto para maestros de obra que la compañía captaba en diversas colonias, donde tiene sus casas de materiales, con el objetivo de que fueran capacitados por profesores de la Facultad.

Después de la formalización, la FA desarrolló el programa académico, el material didáctico y se llevó a cabo el primer curso de lectura de planos. “La idea era que los maestros de obra aprendieran a leer planos arquitectónicos y estructurales; esperábamos tener entre 30 y 35 participantes y en aquella ocasión fueron más de 120 en la primera convocatoria, fue muy sorpresivo para nosotros”, recordó el arquitecto.

A partir de entonces la enseñanza se imparte de manera anual; hasta 2022, 800 maestros de obra han sido capacitados en temáticas como: lectura de planos, seguridad en la obra, elaboración de presupuestos, eficiencia energética y procesos de sustentabilidad.

Este año, para reducir las emisiones de dióxido de carbono y mejorar la comodidad en nuevos edificios en Latinoamérica, se desarrolló el proyecto “Fortaleciendo capacidades para la eficiencia energética en edificios en América Latina (CEELA)”, mediante el cual –en colaboración con la FA y Holcim México a través de la Escuela Mexicana de la Construcción– se implementó el Curso híbrido para profesionales de albañilería sobre Eficiencia Energética y Confort Adaptativo (EECA).

En 2022, en la primera etapa, mediante la modalidad a distancia se capacitó a 90 maestras y maestros de obra de México y a tres mil de Colombia, Argentina, Ecuador, Perú y otros países de América Latina.

Se enseñaron los 15 Principios de EECA elaborados por el Proyecto CEELA, entre los cuales resalta: el diseño integrado, energía incorporada, reducción de materiales tóxicos, diseño bioclimático en exteriores, manejo consciente de agua, autogeneración de energías renovables, entre otros.

En la segunda, los albañiles mexicanos asistieron a las instalaciones de la Facultad donde cursaron: sistemas constructivos tradicionales, trabajaron arquitectura de tierra, elaboración de adobe y bajareque; además de temas de eficiencia energética y materiales en los laboratorios de esa entidad académica.

Quienes terminan satisfactoriamente sus clases reciben la constancia por parte de la UNAM en una ceremonia a la que asisten autoridades de la Facultad de Arquitectura y familiares de alumnas y alumnos.

“Es un momento muy emotivo porque muchos de ellos no tienen ni siquiera la primaria terminada y de pronto están recibiendo un certificado de la UNAM; para ellos es algo muy emotivo de superación personal”, aseguró Armando Carranco.

El arquitecto refirió que quienes toman los cursos adquieren nuevos conocimientos que pueden ponerlos en práctica, de manera inmediata, en su vida laboral. Varios de ellos vuelven a inscribirse cada vez que cambia la temática para continuar con la actualización.

“Nosotros, arquitectos, quienes estamos en la industria, no seríamos nada sin los maestros de obra. El arquitecto y el albañil siempre van juntos, somos como hermanos, que estamos permanentemente trabajando, construyendo, sabemos lo valioso que son ellos, sabemos de sus capacidades, son personas que aprenden rapidísimo, que tienen muchas ganas de superación y nosotros como Facultad de Arquitectura sentimos ese compromiso social, sabemos que una de las funciones sustanciales de nuestra Universidad es la difusión y la extensión del conocimiento a toda la sociedad. Con estos cursos y con el apoyo de las empresas de la industria nos ayudan a fortalecer esa vinculación con los maestros de obra”, señaló Carranco Hernández.

De acuerdo con el experto, los “maestros albañiles” son los encargados de elaborar una especie de red de difusión de los cursos entre su gremio; son siete años continuos de actualización.

Estructuran ideas y pensamientos

Alfredo Hernández es maestro de la construcción desde que tenía 15 años de edad.  Eligió ese oficio y abandonó la escuela porque le parecía aburrida. Hoy, a sus 44 años, tiene el objetivo de terminar una carrera. “Prácticamente es todo mi mundo, es lo que conozco, realizo lo que la gente o el cliente me dice. Si me dicen: quiero una casa, le construimos una casa, nosotros estructuramos sus ideas, sus pensamientos” relató en entrevista.

Hace dos años se interesó en inscribirse en la capacitación que ofrece la UNAM de manera gratuita, pero debido a la alta demanda no había obtenido lugar. En el presente año inició –en formato a distancia– el curso junto con colegas de otros países.

No importó que tomara las clases a través de su celular; él se fijó una meta, “ser profesional en este trabajo, ya no nada más ser maestro de obra, tal vez seguiré siendo el mismo, pero quiero tener o ejercer la carrera de Arquitectura”, afirmó.

Por ello, a partir de junio dedicó tiempo de los sábados a tomar el curso. Al mediodía termina su jornada laboral para alistar sus cosas y recorrer varios kilómetros a pie y luego en transporte público para llegar a la Facultad de Arquitectura, minutos antes de las 15:00 horas. “En la actualidad, si no estás capacitado, pues no hay mucho trabajo para ti y quedamos obsoletos; además, es bien para nosotros y también para el planeta porque nos enseñan a disminuir los contaminantes”, enfatizó.

En la UNAM aprendió formas sustentables de construcción, conoció compañeros con quienes comparte situaciones laborales; es una nueva oportunidad para continuar preparándose. “Me ha servido mucho a usar la piedra, la piedra brasa, el lodo y también a reciclar la grava, la arena y los materiales que puedan ser reutilizados dentro de los proyectos”.

También encontró un nuevo rumbo para su vida, nuevos sueños y metas para transmitir a sus hijos que con esfuerzo y dedicación todo es posible, solo es cuestión de tener las ganas de hacerlo. “Ahora quiero formar una vida diferente a la que tenía, prepararme para hacer un examen y ver si soy apto para llegar a las aulas de la UNAM en el área de arquitectura”, finalizó.

Desarrolla egresado de la UNAM aplicación para preservar mazahua

Para César Cruz volver a San Antonio La Ciénega no sólo es regresar a su pueblo natal, es también retornar al mazahua o jñatrjo, a esa lengua que no pudo aprender de pequeño y que, sin embargo, ha comenzado a enseñar a los niños y adolescentes de la localidad. “El idioma estaba en riesgo; los únicos hablantes eran los ancianos, que son como 100 y cada vez nos quedan menos, por lo que era necesario hacer algo para evitar su muerte”.

Los mil 500 habitantes de este poblado campesino —ubicado al noroeste del Estado de México, a dos mil 600 metros sobre el nivel del mar y muy cerca de la frontera con Michoacán— suelen describir al sitio como un lugar donde no pasa nada, o donde no pasaba, pues desde hace unos meses se puso en marcha un novedoso programa de introducción al mazahua impartido en la primaria, secundaria y telebachillerato del lugar, basado en una aplicación para celular desarrollada por César como proyecto de tesis.

“Esta herramienta se llama MazahuaApp y fue creada mientras yo estudiaba Mecatrónica en la Facultad de Ingeniería de la UNAM. Estar tan lejos de casa te hace recordar a los tuyos y esa nostalgia me colocó frente a una computadora para darle forma a un software que, desde un inicio, fue pensado como una vía para devolverle parte de su esencia a mi comunidad”.

Y es que desde siempre la gente de San Antonio La Ciénega se ha sentido muy orgullosa de sus raíces indígenas, tanto que los lugareños se refieren al pueblo por su nombre mazahua, Roxaxi —‘el lugar donde hay rosas’—, pero fuera de esa palabra no conocen otras, pues desde hace cinco décadas, y muchos aún no entienden por qué, el pueblo dejó de hablar la lengua y a considerarla “cosa de abuelos”, situación que hoy buscan revertir.

Paula Segundo —una mujer septuagenaria de la localidad— recuerda que cuando era niña sólo se hablaba jñatrjo. “Antes lo raro era escuchar español; hoy es todo lo contrario”, comparte con tristeza. “Cuando me encuentro a los jóvenes en el campo les digo kjimidya (‘buenos días’), maxkjodya (‘adiós’), ¿pje gi kjatr’o? (‘¿qué haces?’), ¿ja gui jyasu̷? (‘¿cómo amaneciste?’), pero como no saben mazahua, no me contestan”.

César comprende muy bien esa situación porque él es uno de esos jóvenes. “Me gustaría hablar fluidamente con los mayores o ‘tíos’ (como se les dice en señal de respeto a la senectud), pero apenas sé pocas expresiones. Para desarrollar la aplicación y a falta de ese conocimiento tan necesario, me apoyaron dos egresados de la carrera de Lengua y Cultura en la Universidad Intercultural del Estado de México y vecinos del lugar: Avisahín Cruz y Diego Mateo. Yo me encargué de la informática, de la parte técnica y del diseño visual, ellos de los aspectos pedagógicos y lingüísticos”.

Su sueño es lograr que el mazahua se vuelva a hablar en San Antonio La Ciénega tal y como en tiempos de sus abuelos, y a esa tarea se han sumado numerosos aliados improbables. “Pese a desconfiar de las nuevas tecnologías, los ancianos fueron los más entusiastas con el proyecto. Nos abrieron las puertas de sus casas y, por primera vez, se enfrentaron a un micrófono. Las voces escuchadas en la aplicación son las de ellos, pues se dejaron grabar, a fin de que las nuevas generaciones sepan de primera mano cómo se pronuncia el jñatrjo verdadero, cómo se usa en la vida real”.

Persistir o desaparecer

Cuenta el mito que cuando nació el mundo, el Padre Sol y la Madre Luna se aparejaron para dar origen a una raza de gigantes llamados ma ndaa que desapareció, luego a otra de enanos, los mbeje, que tampoco sobrevivió, para finalmente engendrar a los jñatrjo, palabra que designa a los mazahuas y cuyo significado literal es ‘los que hablan’, una evidencia etimológica palpable de que, para esta cultura, si no hay lengua no hay pueblo.

César confiesa que una de sus mayores frustraciones es no haber asimilado el mazahua de pequeño. “Antes aprendí lenguajes computacionales que el idioma de mis ancestros”, y añade que  eso no se debió a falta de interés, “fue porque a mis padres tampoco se los enseñaron y el eslabón se rompió”.

Sobre la pérdida de tantos hablantes de una generación a otra (tan sólo de 2010 a 2020 pasaron de ser 136 mil a 132 mil quienes saben algo de mazahua, según el INEGI), Avisahín Cruz explica que dicha merma se debe, en gran parte, a los programas de “castellanización” impulsados por gobiernos del siglo pasado con el objetivo de borrar las lenguas indígenas.

El argumento —añade el coautor de MazahuaApp— era que con eso se fortalecía la identidad nacional, tal y como sostenía Justo Sierra en 1902 en un discurso donde disertaba sobre los ideales y metas de la educación pública: “Llamamos al castellano lengua nacional no sólo porque es la lengua que habló desde su infancia la actual sociedad mexicana y porque fue luego herencia de la nación, sino porque siendo la sola lengua escolar llegará a atrofiar y destruir los idiomas locales y así la unificación del habla nacional, vehículo inapreciable de la unificación social, será un hecho”.

Por fortuna, esa manera de pensar quedó atrás, asegura César, quien detalla que para poner en marcha los cursos de enseñanza del mazahua en San Antonio La Ciénega recibió apoyo por parte de la UNAM a través del Sistema de Becas para Estudiantes Indígenas y Afrodescendientes y del Instituto de Investigaciones en Matemáticas Aplicadas y en Sistemas (IIMAS), así como del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) y de la Universidad Intercultural del Estado de México. “Cada vez hay más conciencia, y a todos los niveles, de la importancia de preservar nuestras lenguas originarias”.

Noventa y nueve años después del discurso de Justo Sierra, en 2001, Miguel León-Portilla respondía a tales posturas en un congreso realizado en Valladolid, España: “Hay quienes consideran que la muerte de las lenguas indígenas es inevitable y que no hay razón para dolerse, pues la unificación lingüística es deseable. En contraste, estamos quienes pensamos que la desaparición de cualquier lengua empobrece, y en mucho, a la humanidad”.

Volver a la infancia

Los niños y adolescentes de La Ciénega llevan tres meses aprendiendo la lengua jñatrjo con la aplicación MazahuaApp y sus familias comienzan a ver los resultados y, sobre todo, a escucharlos, pues parte de las tareas es repetir las lecciones en casa y aprenderse el vocabulario.

“Si ya de por sí andan todo el día con el teléfono, qué bueno que ahora lo usen para estudiar”, dice una madre mientras su hija camina a pocos metros de ella, absorta en el celular, mientras oprime su dedo sobre el dibujo de un gato para hacer que suene la palabra mixi (cuya traducción es ‘carita peluda’) y luego sobre la de un perro, para hacer sonar dyø’ø.

La profesora Mariana Medina es la encargada de impartir el curso y asegura que los alumnos han comenzado a mostrar un interés creciente por la lengua. “No sólo me preguntan por tal o cual expresión, ahora van con sus abuelos a consultarles dudas y llegan a la clase con inquietudes nuevas. Quieren saber cómo se llama cierta parte del cuerpo, o algún color”.

César explica que MazahuaApp es una empresa en mejora constante, pues él mismo asiste a las sesiones para tomar nota de lo que no funciona e introducir mejoras. “Estamos en fase piloto, el objetivo es perfeccionar el software y, si obtenemos buenos resultados, lo siguiente es llevarlo a las comunidades vecinas aunque claro, adaptando la aplicación para que se ajuste a las variantes de mazahua habladas en esas zonas”.

Sobre por qué decidió hacer de este programa una aplicación de teléfono y no una página web, el joven detalla que todo se debe a razones prácticas, ya que en San Antonio La Ciénega sólo el tres por ciento de los hogares cuenta con internet, “y todos los menores aquí tienen acceso a un celular”.

Para el ingeniero, haber concretado este proyecto es, en parte, cumplir un sueño de infancia, ya que le hubiera gustado tener una herramienta así mientras cursaba la educación básica. “Hoy sería una persona diferente porque saber otro idioma te da una visión mucho más amplia del mundo”.

Por lo pronto, sólo corre en Android, por lo que uno de los planes de César es crear una versión para sistemas iOS, así como integrarle un sistema de reconocimiento de voz, algo que si bien le implicará esfuerzo, también le representa algo placentero. “Cada que trabajo en la app aprendo mazahua. Quizá de ahí venga mi involucramiento, pues para mí esto es recuperar el tiempo y tener hoy esa oportunidad que no se me dio de niño”.

Benjamín Paredes, universitario que toca el órgano monumental en la Basílica de Guadalupe

 

Inconfundible, solemne y vigoroso, así se escucha el sonido del Órgano Monumental de la Insigne y Nacional Basílica de Santa María de Guadalupe (INBG), que acompaña el rito y culto mariano desde hace casi medio siglo.

Ahí, sentado frente a cinco teclados con 60 piezas y 32 pedales que activan las 10 mil 222 flautas, uno de sus ejecutantes, Benjamín Paredes Aponte, licenciado Músico-instrumentista en órgano por la Facultad de Música (FaM) de la UNAM, comenta: “antes que nada la música es mi pasión”.

A propósito del 12 de diciembre, fecha en que se conmemora el 491 aniversario de las apariciones marianas en el cerro del Tepeyac, el ahora profesor de Órgano y de Armonía al teclado a nivel propedéutico y licenciatura en la FaM, asegura que la complejidad de ejecutar un instrumento se incrementa por el entorno en que se realiza.

“De entrada, lo más difícil es el hecho de que la Basílica de Guadalupe sea el segundo santuario católico más visitado de todo el mundo; es, sin duda, una referencia donde los ojos del mundo están puestos sobre nosotros, y entonces de alguna manera nuestra preparación y trabajo debe estar lo mejor hecho posible”.

La música la percibo como un medio para comunicarme, algo que puedo transmitir a los demás, pienso que empata bien en el plano laboral aquí, en la Basílica, y en el docente, en la FaM, donde enseño y transmito a los alumnos los conocimientos adquiridos, cometa.

Acompañamiento

Benjamín Paredes recuerda que el 16 de noviembre de 2012 (hace una década) ingresó a la INBG como cantor y organista, y en octubre de 2018 efectuó en este lugar la réplica como ejecutante de su examen profesional.

Sobre la importancia sonora del 12 de diciembre, explica que consiste en acompañar por medio de la música estas celebraciones, “apoyar a la gente, fomentar la espiritualidad, que quizá donde terminan las palabras inicie en este caso la música. El hecho de que la gente llegue y escuche el órgano, y además al coro infantil, de alguna manera hace que participen todos, que se vuelva una sola voz el coro, el pueblo y los celebrantes”.

Por ello, considera que es “la fiesta más importante de los mexicanos; estar aquí es como si estuvieras haciéndole una ofrenda en su misma casa a alguien muy querido”.

El profesor de la FaM expone que en la festividad de la Virgen de Guadalupe la intervención musical iniciará en la ceremonia de las Vísperas solemnes el domingo 11 de diciembre a las 17:00 horas; posteriormente en la misa de medianoche del siguiente día.

Otro de los retos en la ejecución del órgano, comenta, es la atención, “porque mucho de lo que nosotros acompañamos lo canta el sacerdote y lo hace en su tono. Entonces nosotros, al momento en el que vocaliza, tenemos que responderle en el mismo que él tiene”.

Debemos estar bajo la batuta del director del coro y en la parte solista interpretando obras de órgano. En varias ocasiones no es como un concierto que inicia en un momento determinado y termina en otro, sino que nosotros acompañamos el rito a través de la música.

El organista comenta que tiene también a su cargo algunos coros de monjas, además de responsabilizarse de la programación de lo que se canta en el santuario diariamente, lo que implica otro reto donde se incluye -además de la capacitación musical- preparación litúrgica y teológica.

Majestuoso

El universitario, quien cursó el bachillerato en la Escuela Nacional Preparatoria 4 “Vidal Castañeda y Nájera”, forma parte como organista de la Capilla de Música de la INBG y es también custodio del Órgano Monumental del Templo Expiatorio dedicado a Cristo Rey (Antigua Basílica de Guadalupe).

“El órgano es un instrumento majestuoso, es casi como una puerta al cielo, en donde se combinan no solamente la parte artística, arquitectónica del templo, sino también la majestuosidad del instrumento. Entonces en su conjunto impone al visitante, y de alguna manera se queda admirado de la majestuosidad, que en este caso representa tanto la parte arquitectónica como el instrumento”, subraya el académico universitario, quien junto con Hugo Jiménez Cisneros son los organistas que ejecutan a diario el acompañamiento sonoro.

En el Órgano Monumental también se tocan las festividades propias del año litúrgico, como la Pascua, la Navidad, el Adviento y las fiestas importantes como la llegada de un nuncio apostólico, así como la consagración y ordenación de un obispo o de sacerdotes, abunda Benjamín Paredes.

La visita de su Santidad el Papa Francisco, (en febrero de 2016), es uno de los eventos que más han quedado en mi mente aquí, en la Basílica, además de la fiesta de Guadalupe cada año.

“En la primera toqué en la homilía, fui el organista acompañante de esa misa, y cada 12 de diciembre empezamos desde la ceremonia de medianoche, es un evento muy importante”, afirma.

En la Facultad de Música de la UNAM adquirí los conocimientos para poder manipular un instrumento de esta magnitud, pero nunca pensé que podría tocar en una misa papal, ni en el 12 de diciembre. Sin duda es un sueño, es una emoción indescriptible el hecho de escuchar el campanazo y entonar Las Mañanitas y todas las celebraciones que se realizan a lo largo del año, finaliza Paredes Aponte.

¿Cómo gastar el aguinaldo? Estas son algunas recomendaciones

La mejor forma de utilizar el aguinaldo es pagar las deudas, sobre todo de las tarjetas de crédito; algunas propuestas son que 30 por ciento se destine a saldar compromisos de pago lo más pronto posible, a fin de evitar generar intereses. La inflación y las tasas de interés todavía no tienen un techo y pueden estar subiendo más.

Lo anterior, de acuerdo con la economista y académica de la Facultad de Economía de la UNAM, Patricia Rodríguez López, quien sugirió que otra manera de darle un buen uso a este ingreso extra es evitar las compras a meses sin intereses que se promocionan durante esta temporada decembrina, aunque las ofertas parezcan atractivas.

Numerosas personas lo gastan mayoritariamente en regalos, “en tratar de quedar bien o comprarle cosas a los niños; en juguetes que muchas veces no acaba siendo productivo y la satisfacción les dura poco”, explicó la especialista.

México es uno de los países que otorga de manera obligatoria esta prestación, pero no en todas las naciones sucede lo mismo. En Estados Unidos no existe una ley o regulación al respecto, pero se entregan bonos en especie a sus empleados: vales de gasolina, comida, botellas de vino, tarjetas de regalo o boletos de avión.

En China se otorga un mes de sueldo, que se paga en febrero, en el Año Nuevo Chino. Mientras que en nuestro país el monto es proporcional y varía de acuerdo con el contrato de cada trabajador y el tiempo de laborar.

En México el aguinaldo se estableció como una prestación -obligatoria- en la Ley Federal del Trabajo, en 1970. Con anterioridad, algunos patrones voluntariamente otorgaban cierta cantidad de dinero a sus empleados en el mes de diciembre con motivo de la Navidad.

Con base en el Artículo 87 de la referida Ley, se debe recibir antes del 20 de diciembre. Es la retribución más esperada del año para buena parte de las familias mexicanas; es como el Santa Claus de las y los trabajadores, que así como viene, se va.

El aguinaldo debe ser, por lo menos, equivalente a 15 días de salario. Quienes no hayan cumplido un año de servicio podrán recibir la parte proporcional de lo que se estipula en su contrato; si renuncia antes de que se otorgue, recibirá la parte proporcional.

Para aquellos que aún no han cumplido un año, se calcula al dividir el pago quincenal entre los 365 días del año, el resultado se multiplica por los días laborados.

Si el salario es variable, se promedia el ingreso de los últimos 30 días efectivamente trabajados. Quienes estén contratados como vendedores, agentes de comercio, agentes de seguro, propagandistas o similares y estén amparados con la Ley Federal del Trabajo, tendrán un aguinaldo equivalente al promedio de ingresos percibidos en el año.

De buena suerte

El aguinaldo es una tradición antigua que se remonta al pueblo celta, costumbre conocida con el nombre de “eguinad”, con la cual designaban el regalo de Año Nuevo.

Se relaciona con la creencia de que los mejores augurios para el año que empieza se atraen con generosos regalos. Los celtas intercambiaban dátiles y frutos secos, como muestra para empezarlo confortablemente; era como una “declaración de motivos” para demostrar satisfacción y desear buena suerte.

Sexta ola de COVID en México, menos letal pero igual de contagiosa

De acuerdo con Samuel Ponce de León, coordinador del Programa Universitario de Investigación sobre Riesgos Epidemiológicos y Emergentes (PUIREE) y de la Comisión Universitaria para la Atención del COVID- 19 de la UNAM, la sexta ola de esta enfermedad infecciosa causada por el virus SARS-CoV-2 ya nos alcanzó.

“Comenzó hace cuatro o cinco semanas, cuando notamos un incremento en los contagios del SARS-CoV-2. Cabe destacar que esta ola se está configurando de una manera diferente: los casos no son tan graves o letales como lo fueron en otras olas, debido a que la variante del virus que sigue circulando es ómicron, con una amplia diversidad de subvariantes. Simultáneamente, hemos visto que la transmisión de influenza, que se había mantenido limitada en los dos años anteriores gracias a las medidas de prevención (uso de cubrebocas, sana distancia, lavado de manos constante, ventilación en lugares cerrados, etcétera), está aumentando considerablemente porque dichas medidas ya se relajaron”, dice.

Hay que considerar que cada época invernal nos permite estar en contacto con una gran variedad de virus y, por lo tanto, debemos reforzar nuestro sistema inmunitario para hacerles frente. En el caso de la influenza y de otras infecciones respiratorias agudas, esto no ocurrió por lo menos en los dos últimos años.

“Así, por ejemplo, una gran cantidad de niños de uno, dos, tres, cuatro o cinco años que quedó aislada en una burbuja y ahora sale nuevamente a la calle y se expone a esos virus, no tiene buenas defensas, pues carece de experiencia inmunológica. En Estados Unidos y Europa está subiendo el número de niños con problemas respiratorios agudos que necesitan ser hospitalizados”, indica Ponce de León.

Pruebas rápidas

En esta temporada otoño-invierno, ante la nueva ola de la Covid-19, pero también ante la aparición de otros virus que causan enfermedades respiratorias agudas, no hay otro camino más que retomar las medidas de prevención.

“Es fundamental seguir usando el cubrebocas, sobre todo. Si la Secretaría de Salud decidió que ya no era obligatorio usarlo, esto no quiere decir que sea imperativo no utilizarlo. Es nuestra responsabilidad cuidarnos a nosotros mismos y a los demás. Debemos entender que, aparte del SARS-CoV-2, en esta época del año hay otros virus que nos pueden jugar una mala pasada, como el de la influenza, el respiratorio sincitial, el metapnemovirus, los rinovirus… Por eso, si nos reunimos con familiares o amigos en una casa, o asistimos a un auditorio, un estadio o cualquier otro lugar donde se junte mucha gente, lo mejor es usar correctamente un cubrebocas para no infectarnos y no contagiar a otras personas si tuviéramos una infección activa y no evidente en ese momento. Asimismo, es necesario poner en práctica las otras medidas de prevención: mantener una sana distancia con respecto a los demás, lavarnos las manos constantemente, ventilar los lugares cerrados… Y si alguien se siente mal y tiene fiebre, dolor de garganta, de cabeza y/o muscular…, debe quedarse en casa y atenderse. Es su responsabilidad.”

En cuanto a las pruebas rápidas, Ponce de León cree que no son muy efectivas para detectar las subvariantes de ómicron que están circulando actualmente.

“Su efectividad depende de cuándo y cómo se hacen. Un resultado negativo en un momento en el que la circulación de estas subvariantes empieza a dispararse no quiere decir que la persona no esté infectada; únicamente significa que no se corroboró la positividad, pero no se descarta. Desde el principio sabíamos que las pruebas rápidas tenían limitaciones. Son efectivas en el periodo de la sintomatología más intensa, pero no pocos días antes ni pocos días después de ella. Entonces, no nos podemos confiar en función de un resultado negativo obtenido con una prueba rápida. Si alguien presenta un cuadro de Covid-19, tiene Covid-19, más allá de que se haya hecho o no una de estas pruebas”, afirma.

Sesión de Consejo Universitario, 8 de diciembre de 2022. UNAM