El ciclo Teatro por la Dignidad “surgió como una reacción ante la política racista de Donald Trump”. En ese contexto, el 1 de agosto se estrena la obra No volveré de Estela Leñero Franco, dirigida por Ángeles Cruz y Alberto Lomnitz.
Leñero Franco, periodista teatral y escritora, refirió que la obra teatral es la historia de una familia mexicana fracturada por el conflicto de la migración.
Destacó que el movimiento Teatro por la Dignidad se pronuncia en contra de las políticas migratorias, “pues toda la gente en movilidad se ve violentada y lastimada en sus derechos humanos”.
No volveré se presenta en el Foro Sor Juana Inés de la Cruz del 1 al 11 de agosto; jueves y viernes 20:00 horas, sábado 19:00 horas y domingo 18:00 horas. Costo del boleto: 150 pesos con 50% de descuento a estudiantes, maestros de cualquier institución, exalumnos y trabajadores de la UNAM, jubilados del ISSSTE, IMSS e INAPAM, al presentar credencial vigente.
El Carro de Comedias (proyecto de la Dirección de Teatro de la Coordinación de Difusión Cultural de la UNAM) tiene como propósito llevar representaciones teatrales a públicos diversos.
Actualmente, presenta El cornudo imaginario de Moliere, bajo la dirección de Jesús Díaz.
El actor Diego Santana destacó que el Carro de Comedias tuvo una presentación en Almagro, España. Asimismo, señaló que El cornudo imaginario fue montada en Guanajuato, y refirió que para agosto-noviembre haya “otras presentaciones alrededor del país”.
Santana apuntó que la comedia “trata sobre los celos infundados, sobre las falsas noticias que uno a veces recibe con la pareja y crean confusiones y celos sobre algo que en realidad no es”.
La obra se presenta los sábados y domingos a las 11:00 de la mañana en la explanada del Centro Cultural Universitario (CCU).
Obras de Estela Leñero, Antonio Zúñiga, Jaime Chabaud y Juan Villoro llegan a escena como respuesta a las políticas migratorias de Donald Trump
El teatro mexicano no va dejar el tema de la migración, estará constantemente en escena, aseguró el coordinador de TeatroUNAM, Juan Meliá, durante la presentación del ciclo Teatro por la dignidad, que del 1 de agosto al 22 de septiembre tendrá cuatro montajes sobre el tema migratorio en el Foro Sor Juana Inés de la Cruz del Centro Cultural Universitario.
El ciclo es presentado por TeatroUNAM y el colectivo Teatro por la dignidad, que a partir de 2017 comenzó a reflexionar desde la escena acerca de la brutalidad de las políticas migratorias de Donald Trump.
La historia de una madre y una hija que, incluso en la indefensión en la que quedan por la ausencia del hijo y hermano, descubren que pueden cambiar su destino; el recorrido de un grupo de centroamericanos en La Bestia, quienes mantienen su dignidad humana a pesar de cruzar uno de los caminos más peligrosos del mundo; las condiciones laborales de la industria lechera en Estados Unidos, que obliga a sus trabajadores a jornadas de hasta 12 horas los 7 días de la semana; y los asuntos familiares que cuatro hermanos discuten mientras su padre -un estadounidense que huyó a México para no ir a la guerra de Vietnam- es incinerado, son las tramas que el público verá en el ciclo.
Las obras son: No volveré, de Estela Leñero, en temporada del 1 al 11 de agosto; La vieja rabiosa del norte, de Antonio Zúñiga (invitada al ciclo, ganadora del Programa Nacional de Teatro Escolar del INBAL), del 15 al 25; Esperamos al gordo, de Jaime Chabaud, del 29 de agosto al 8 de septiembre; y Cremación, de Juan Villoro, del 12 al 22 de septiembre. Las cuatro, utilizarán una misma escenografía, creada por Jesús Hernández y Gabriel Pascal, y se proyecta que se presenten posteriormente en otros foros universitarios.
Como parte del ciclo se realizarán dos mesas de reflexión: Frontera y migración. Muros que separan familias, con Juan Martín Pérez García, director ejecutivo de la Red por los Derechos Humanos de la Infancia en México, moderada por Jacobo Dayán, coordinador de la Cátedra Nelson Mandela de Derechos Humanos en las Artes de CulturaUNAM; y Tráfico de migrantes, también moderada por Jacobo Dayán, con la participación de Ana Lorena Delgadillo, directora ejecutiva de la Fundación para la Justicia y el Estado Democrático de Derecho. Serán el miércoles 7 de agosto y el martes 3 de septiembre, respectivamente, a las 19 horas.
Además, el programa Aula del Espectador dedicará su sesión del miércoles 18 de septiembre al ciclo.
Durante la conferencia para presentar los montajes, Meliá comentó que en las más de 30 funciones del ciclo se mostrará como la migración que es una problemática real, “que vivimos en nuestras casas y con nuestras familias”.
No volveré, compartió por su parte Estela Leñero, surgió de su interés en tratar temas de género. Con la migración como telón de fondo, muestra el impulso de mujeres como Las Patronas, que en medio de la explotación y la opresión encuentran formas de sobrevivencia.
“La migración atraviesa a las familias irremediablemente”, dijo Jaime Chabaud, “siempre quedan cuentas pendientes, se deja algo o a alguien”. Mario Espinosa, codirector con Belén Aguilar de la obra de Chabaud, apuntó que aquellos que intentan conquistar un mismo sueño, forman nuevos círculos familiares. “Oaxaca tiene una segunda ciudad en Los Ángeles; en Chicago hay zacatecanos y poblanos que se reconocen y crean una cadena de solidaridad. Nos movemos en familia para bien y para mal”.
Aunque su obra también está enmarcada en un ámbito familiar, Juan Villoro tiene otro enfoque al escribir sobre migración. El recién nombrado Premio Liber celebró que sea precisamente en la Universidad donde se propicie la reflexión en torno a la crisis humanitaria que ha provocado el éxodo de centroamericanos y el papel que México está jugando en este contexto.
“Recordemos que Luis Videgaray invitó a Trump durante su campaña, otorgándole un rango presidencial (…) En Mexicali, un a compañía cervecera, Constelation brands, está construyendo una inmensa instalación que se va a quedar con buena parte del agua del río Colorado; esto va a acabar con la producción de algodón. Hay una complicidad clarísima en este despojo que ocurre dentro de México. Nos hemos convertido ya en el muro. La Guardia Nacional, creada para tratar de combatir al crimen organizado, ahora es patrulla fronteriza. Es muy importante reflexionar sobre lo que hace México respecto a las políticas estadounidenses”, concluyó.
Ingenieros mecánicos y científicos de materiales de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA), han desarrollado una técnica que utiliza nanopartículas con el fin de fortalecer la estructura atómica del vidrio. El resultado es un producto que es al menos cinco veces más resistente que cualquier vidrio disponible actualmente.
El proceso podría llevar hacia la construcción de vidrio útil en aplicaciones industriales, en componentes de motores y herramientas que requieren soportar altas temperaturas, por ejemplo, así como para puertas, mesas y otros elementos arquitectónicos y de diseño.
El estudio fue publicado en línea en la revista Advanced Materials. Los autores escribieron que el mismo método podría usarse también para fabricar cerámicas más resistentes, por ejemplo, en componentes de naves espaciales que requieren soportar el calor extremo.
En la ciencia de los materiales, la «dureza» mide cuánta energía puede absorber un material, y qué tan flexible es (cuánto puede deformarse) sin fracturarse. Si bien el vidrio y la cerámica se pueden reforzar utilizando tratamientos externos, como recubrimientos químicos, no cambian el hecho de que los materiales en sí son frágiles.
Para resolver ese problema, los investigadores de la UCLA se inspiraron en la estructura atómica de los metales, que pueden recibir golpes y no romperse.
«Los enlaces químicos que mantienen unidos el vidrio y la cerámica son bastante rígidos, mientras que los enlaces en los metales permiten cierta flexibilidad«, dijo Xiaochun Li, profesor de manufactura de la Facultad de Ingeniería Samueli de la UCLA e investigador principal del estudio. «En vidrio y cerámica, cuando el impacto es lo suficientemente fuerte, una fractura se propagará rápidamente a través del material en un camino mayormente recto. En cambio, cuando algo impacta un metal, sus enlaces químicos más deformables actúan como amortiguadores y sus átomos se mueven mientras mantienen la estructura unida«.
Los investigadores plantearon que al infundir vidrio con nanopartículas de carburo de silicio (SiC), el material resultante podría absorber más energía antes de romperse. Las nanopartículas fueron agregadas en el vidrio fundido a 3.000 grados Fahrenheit, lo que ayudó a garantizar que las nanopartículas se dispersaran uniformemente.
Una vez que el material se solidificó, las nanopartículas incrustadas podrían actuar como obstáculos para evitar posibles fracturas. Cuando se produce una fractura, las nanopartículas la obligan a ramificarse como si fueran pequeñas redes, en lugar de permitir que tome un camino recto.
Esa ramificación permite que el vidrio absorba significativamente más energía de una fractura antes de que cause un daño significativo en todo el material.
La sinterización, en la cual un polvo se calienta bajo presión, y luego se enfría, es el método principal utilizado para hacer vidrio. También fue el método utilizado en experimentos anteriores por otros grupos de investigación para dispersar nanopartículas en vidrio o cerámica. Pero en esos experimentos, las nanopartículas no se extendieron de manera uniforme, y el material resultante tenía una resistencia desigual.
Los bloques de vidrio que el equipo de UCLA desarrolló para el experimento eran algo lechosos (opacos), en lugar de transparentes, pero Li dijo que el proceso podría adaptarse para crear vidrio transparente.
La hipnosis, considerada como un comportamiento de inmovilidad, aparece en todo tipo de animales, desde insectos, reptiles, aves a mamíferos. Cuando se encuentran en esa situación, se quedan quietos y desconectados de los estímulos externos, por diferentes causas. Por ejemplo, resulta que los ratones, ratas, conejos, cobayas y gatos se quedan ‘hipnotizados’ cuando la madre los toma del cuello con sus mandíbulas.
Investigadores del la facultad de Medicina Veterinaria de la Universidad Estatal de Ohio, dirigidos por Tony Buffington, descubrieron que es posible aprovecharse de este fenómeno para inducir que los gatos se queden parcialmente inmóviles, esto con la finalidad de poder realizar tratamientos veterinarios.
Basta con usar unas pinzas para presionar con cuidado la piel del cuello de los animales.
En un estudio que se publicó en el Journal of Feline Medicine and Surgery, los investigadores concluyeron que la pinza basta para lograr la‘clipnosis’, o inhibición del comportamiento inducida por pellizco, lo que relaja a la mayoría de los gatos incluso en situaciones potencialmente estresantes.
Hiromitsu Nakauchi, un científico japonés de células madre, quien dirige equipos en la Universidad de Tokio y la Universidad de Stanford en California, es el primero en recibir el apoyo del gobierno para crear embriones de animales que contienen células humanas y trasplantarlos a animales sustitutos, ya que a principios de este año se revocó la prohibición de la práctica. Se espera la aprobación final el próximo mes.
Nakauchi planea cultivar células humanas en embriones de ratón y rata, para luego trasplantar esos embriones en animales sustitutos. El objetivo final es producir animales con órganos hechos de células humanas, que eventualmente, puedan ser trasplantadas a las personas.
Hasta marzo, Japón prohibió explícitamente el crecimiento de embriones animales con células humanas por más de 14 días o el trasplante de dichos embriones en un útero sustituto. Ese mes, el Ministerio de Educación y Ciencia de Japón emitió nuevas pautas que permiten la creación de embriones híbridos de humanos-animales que pueden ser trasplantados en animales sustitutos y llevados a término.
Nakauchi dice que planea proceder lentamente, y no intentará llevar a término ningún embrión híbrido por algún tiempo. Inicialmente, planea cultivar embriones de ratones híbridos hasta los 14,5 días, cuando los órganos del animal están formados en su mayoría, casi a término. Hará los mismos experimentos en ratas, haciendo crecer los híbridos a corto plazo, unos 15,5 días. Más tarde, Nakauchi planea solicitar la aprobación del gobierno para cultivar embriones híbridos en cerdos (útero sustituto) por hasta 70 días.
«Es bueno proceder paso a paso con precaución, lo que permitirá tener un diálogo con el público, que se siente ansioso y tiene preocupaciones«, dice el investigador de política científica Tetsuya Ishii de la Universidad de Hokkaido en Sapporo, Japón.
Preocupaciones éticas
Algunos bioeticistas están preocupados por la posibilidad de que las células humanas implantadas en los animales puedan desviarse más allá del desarrollo de algún órgano en particular, y que viajen al cerebro del animal en desarrollo y potencialmente afectar su cognición.
Nakauchi dice que estas preocupaciones se han tenido en cuenta en el diseño del experimento. «Estamos tratando de generar órganos específicos, por lo que las células van solo a ese órgano«, dice.
La estrategia que él y otros científicos están explorando es crear un embrión animal que carece de un gen necesario para la producción de un determinado órgano, como el páncreas, y luego inyectar células madre pluripotentes inducidas de humanos (iPS) en el embrión animal. Las células iPS son aquellas que se han reprogramado a un estado de tipo embrionario y pueden dar lugar a casi todos los tipos de células. A medida que el animal se desarrolla, utiliza las células iPS humanas para fabricar el órgano, que no puede producir con sus propias células.
En 2017, Nakauchi y sus colegas informaron la inyección de células iPS de ratón en el embrión de una rata que no pudo producir un páncreas. La rata formó un páncreas hecho completamente de células de ratón (organogénesis interespecie). Después, trasplantaron ese páncreas nuevamente a un ratón que había sido diseñado para tener diabetes. El órgano producido por ratas pudo controlar los niveles de azúcar en la sangre, curando efectivamente al ratón de diabetes.
Pero lograr que las células humanas crezcan en otra especie no es fácil. Nakauchi y sus colegas anunciaron en la reunión de la American Association for the Advancement of Science 2018 en Austin, Texas, que habían colocado células iPS humanas en embriones de ovejas que habían sido diseñados para no producir páncreas. Pero los embriones híbridos, cultivados durante 28 días, contenían muy pocas células humanas y nada que se asemejara a los órganos. Probablemente esto se deba a la distancia genética entre humanos y ovejas, dice Nakauchi.
No tiene sentido llevar a término embriones híbridos humano-animales utilizando especies evolutivamente distantes como cerdos y ovejas porque las células humanas serán eliminadas de los embriones del huésped desde el principio, dice Jun Wu, quien investiga quimeras humano-animales en en el Centro Médico del Sudoeste de la Universidad del Texas,Dallas. «Comprender la base molecular y desarrollar estrategias para superar esta barrera será necesario para avanzar en el campo«, dice Wu.
Nakauchi dice que la aprobación en Japón le permitirá atacar este problema. Experimentará con células iPS en etapas sutilmente diferentes y probará algunas células iPS genéticamente modificadas para tratar de determinar qué limita el crecimiento de células humanas en embriones de animales.
Los científicos han identificado un vínculo entre la exposición a altos niveles de hormonas sexuales de estrógenos (niveles de estriol, estradiol, estrona y sulfato de estrona prenatal) en el útero y la probabilidad de desarrollar autismo.
El descubrimiento agrega más evidencia para apoyar la teoría prenatal de esteroides sexuales del autismo propuesta por primera vez hace 20 años.
En 2015, un equipo de científicos de la Universidad de Cambridge y el Instituto Estatal del Suero en Dinamarca midió los niveles de cuatro hormonas esteroideas prenatales, incluidas dos conocidas como andrógenos, en el líquido amniótico en el útero y descubrieron que eran más altas en los fetos masculinos que más tarde desarrollaron autismo. Los resultados fueron publicados en la revista Molecular Psychiatry.
Estos andrógenos se producen en cantidades mayores en los fetos masculinos que en los femeninos, por lo que también podría explicar por qué el autismo ocurre con mayor frecuencia en los niños.
Hoy, los mismos científicos se han basado en sus hallazgos anteriores al analizar las muestras de líquido amniótico de los mismos 98 individuos muestreados del Danish Biobank, que ha recolectado muestras amnióticas de más de 100,000 embarazos, pero esta vez observando otro conjunto de hormonas esteroides sexuales prenatales llamadas estrógenos. Este es un paso importante porque algunas de las hormonas previamente estudiadas se convierten directamente en estrógenos.
Los cuatro estrógenos fueron significativamente elevados, en promedio, en los 98 fetos que luego desarrollaron autismo, en comparación con los 177 fetos que no lo hicieron. Los altos niveles de estrógenos prenatales fueron aún más predictivos para la probabilidad de autismo que los altos niveles de andrógenos prenatales (como la testosterona).
Contrariamente a la creencia popular que asocia los estrógenos con la feminización, los estrógenos prenatales tienen efectos sobre el crecimiento cerebral y también masculinizan el cerebro en muchos mamíferos.
El profesor Simon Baron-Cohen, Director del Centro de Investigación del Autismo de la Universidad de Cambridge, quien dirigió este estudio y quien propuso por primera vez la teoría prenatal de esteroides sexuales del autismo, dijo: «Este nuevo hallazgo respalda la idea de que las hormonas esteroides sexuales prenatales aumentan una de las posibles causas de la enfermedad. La genética está bien establecida como otra, y estas hormonas probablemente interactúan con factores genéticos que afectan el desarrollo del cerebro fetal«.
Alex Tsompanidis, un estudiante de doctorado en Cambridge que trabajó en el estudio, dijo: «Estas hormonas elevadas podrían provenir de la madre, el bebé o la placenta. Nuestro próximo paso debería ser estudiar todas estas posibles fuentes y cómo interactúan con el feto durante el embarazo«.
Sin embargo, el equipo advirtió que estos hallazgos no pueden ni deben usarse para detectar el autismo. «Estamos interesados en comprender el autismo, no en prevenirlo«, explicó el profesor Cohen.
«Este es un excelente ejemplo de cómo un biobanco único creado hace 40 años todavía está cosechando frutos científicos hoy de maneras inimaginables, a través de la colaboración internacional«, agregó Cohen.
Liza Velarde hizo historia el pasado 7 de mayo, cuando comenzó a crear una start-up de salud acelerada por Y Combinator, y que este año se llevó el Cartier Women’s Initiative, premio que la marca de lujo otorga a mujeres emprendedoras de siete regiones del mundo y que, por primera vez, gana una mexicana en los 13 años del certamen.
Y lo hizo por crear una solución con el potencial de cambiar la vida de millones de enfermos con cáncer.
«El cáncer muta o desarrolla resistencia a las terapias, es muy difícil de determinar en qué momento preciso sucede eso con las técnicas actuales», señala Velarde. «Nos dimos cuenta de que casi no había forma de revisar la evolución en pacientes de forma continua«, señala Velarde. Delee dió un paso adelante para solucionar ese problema.
La emprendedora, de 27 años, y sus socios Alejandro Abarca y Juan Felipe Yee idearon en 2012 un dispositivo que permite a los médicos monitorear las células cancerígenas en pacientes, llamado Delee, es un análisis de sangre que detecta la presencia de células tumorales circulantes (CTC) en pacientes con cáncer, estas CTC viajan en el torrente sanguíneo después de ser expulsadas de un tumor, lo que permitiría a los médicos controlar mejor el progreso de la enfermedad.
El sistema de Delee para el aislamiento de CTC, utiliza la tecnología de ‘laboratorio en un chip’ para reducir los costos y minimizar los errores, tiene un precio competitivo un 20% más bajo que otros dispositivos y cada análisis de sangre es desechable.
«Nuestro objetivo en Delee es proporcionar tecnologías mejores y asequibles para la detección y monitoreo de enfermedades recurrentes en áreas de bajos ingresos«, apunta Velarde.
El equipo ha sido probado en un laboratorio, con el han aislado con éxito las CTC de cáncer de mama, próstata y colorrectal.
El producto ya está siendo usado en el Hospital Universitario de Nuevo León y por investigadores de la Universidad de Stanford.
«Es una tecnología todo en uno que puede identificar, contar y recuperar las CTC viables, listas para el análisis molecular«, dice Velarde. «Los resultados brindan información a los médicos sobre las características de las células tumorales y permiten un tratamiento personalizado«.
Además, el equipo puede fabricarse en masa en cualquier parte del mundo y toma menos de 15 minutos para procesar cada muestra.
Varios estudios han confirmado que la soledad tiene efectos en la salud, tanto física como mental, de las personas. Asimismo, aseguraron que la prevalencia de la soledad llega a sus niveles más altos en adolescentes y adultos jóvenes, y luego vuelve a alcanzarlos durante la vejez.
Sin embargo, este factor puede llegar a ser tan dañino como la obesidad e incrementar el riesgo de mortalidad prematura. Estar conectados con otros socialmente es considerado una necesidad humana fundamental, es decir, crucial para el bienestar y la supervivencia.
Una investigación realizada por Julianne Holt-Lunstad y Timothy B. Smith, investigadores de la Universidad Brigham Young en Utah, Estados Unidos, reveló que la soledad y el aislamiento social aumentan el riesgo de muerte prematura en un 50%.
La Dra. Ana Lilia Villafuerte, académica del Departamento de Psicología de la Universidad Iberoamericana, explicó que la soledad es un factor de riesgo, pues si una persona vive y se percibe sola es más fácil que su calidad de vida disminuya considerablemente.
«Cuando vivimos aislados, en soledad o no estoy integrado socialmente, la calidad de vida se deteriora y las enfermedades atacan. El proceso degenerativo se incrementa si no tengo vínculos sociales. La soledad es un tema de salud pública que abona a la depresión y a los trastornos de ansiedad, así como a intentos suicidas«.
La psicóloga clínica añadió que el contacto y el vínculo con el otro es necesario pues cuando una persona está sola, no tiene con quien compartir algo y no recibe retroalimentación, empieza a vivir mucha ansiedad y a llenar ese vacío con alimentos, alcohol o sustancias nocivas, con los que busca huir de la sensación de soledad.
Una proyecto de investigación (Harvard Study of Adult Developmen) ha seguido desde 1938 y examinado de cerca la vida de más de 700 hombres, y en algunos casos de sus parejas, reveló que las personas que tenían vínculos más estrechos estaban protegidas contra enfermedades crónicas y mentales, así como de la pérdida de la memoria, pese a que las relaciones tuvieran altibajos.
El proyecto reveló algunos factores sorprendentes, y otros no tanto, que determinan si es probable que las personas se harán viejos de manera feliz y saludable, o si caerán en la soledad, enfermedad o debilitamiento mental.
El Dr. Robert Waldinger, actual director del estudio, aseguró que esta investigación que inició en Boston hace más de 80 años ha demostrado que la gente a la que le va mejor es aquella que se apoya en las relaciones con su familia, amigos, así como en la comunidad.
Los investigadores en Psicología en la Universidad Brigham Young, Julianne Holt-Lunstad y Timothy B. Smith, explicaron que el aislamiento social denota pocas conexiones o interacciones sociales. Por su parte, la soledad implica una percepción subjetiva del aislamiento, así la discrepancia entre el nivel de interacción social deseado y el real. Es decir, que las personas pueden aislarse socialmente y no sentirse solas. Asimismo, hay quienes pueden sentirse solas aun cuando estén rodeadas de mucha gente, en especial si sus relaciones no son satisfactorias a nivel emocional.
«Son llamadas de atención que hay que tener en cuenta cuando está causando problemas en mi trabajo porque me estoy aislando, porque no me integro e impacta en mi productividad; o cuando a nivel familiar reportan aislamiento o he cambiado mis hábitos alimenticios de un integrante. A nivel social, cuando solía tener amistades y disfrutar actividades, pero ya no lo estoy haciendo. Es importante estar al pendiente«, explicó Villafuerte.
Las grandes urbes como la Ciudad de México son factores de riesgo para padecer soledad debido alas condiciones sociales, de inseguridad y ambientales que podrían causar aislamiento.
Sin embargo, agregó que las redes sociales son un factor de riesgo, porque están diseñadas para no hacer nada en cuanto a integración social. Lo preocupante es que el mundo se ha vuelto intangible, todo se puede hacer en Internet y no necesitas salir de casa.
«Las redes sociales han provocado problemas en la salud mental de las personas porque establecen parámetros de lo que es éxito, de cómo debes lucir y lo que debes tener a cierta edad. Esto puede incomodidad con la percepción del cuerpo, así como anhelar un estilo de vida. La gente que no sabe manejarlo vive frustrada y aumenta su ansiedad«, explicó la académica.
En la década de 1990, el neurocientífico Melvyn Goodale comenzó a estudiar a personas con una afección llamada agnosia visual. Tales individuos no pueden ver conscientemente la forma u orientación de los objetos, pero actúan como si pudieran. «Si sostienes un lápiz frente a ellos y les preguntas si es horizontal o vertical, no pueden decírtelo«, dice Goodale, director fundador del Brain and Mind Institute de la Universidad de Ontario Occidental en Canadá. «Pero, sorprendentemente, pueden agarrar ese lápiz, orientando sus manos correctamente mientras se ponen en contacto con él«.
El interés inicial de Goodale se relacionaba con la forma en que el cerebro procesa la visión. Pero a medida que su trabajo para documentar los dos sistemas visuales que gobiernan la vista consciente e inconsciente progresó, llamó la atención de los filósofos, que lo atrajeron a conversaciones sobre la consciencia, una fusión de campos que ha transformado a ambos.
Las técnicas recientemente desarrolladas para medir la actividad cerebral están permitiendo a los científicos refinar sus teorías sobre qué es la consciencia, cómo se forma en el cerebro y dónde se encuentran los límites entre ser consciente e inconsciente. Y a medida que mejora nuestra comprensión de la consciencia, algunos investigadores comienzan a desarrollar estrategias para su manipulación, con la posibilidad de tratar lesiones cerebrales, fobias y afecciones de salud mental como el trastorno de estrés postraumático (TEPT) y la esquizofrenia.
Pero incluso a medida que la investigación avanza, y las áreas de ciencia y filosofía continúan fusionándose, las preguntas esenciales siguen sin respuesta. «Aún es fundamentalmente misterioso cómo sucede la consciencia«, dice Anil Seth, neurocientífico cognitivo, codirector del Centro Sackler para la Ciencia de la Consciencia en la Universidad de Sussex en Brighton, Reino Unido.
Breve historia
La consciencia a menudo se describe como la experiencia subjetiva de la mente, la consciencia describe el sentimiento cualitativo que se asocia con esas percepciones, junto con los procesos más profundos de reflexión, comunicación y pensamiento, dice Matthias Michel, un filósofo de la ciencia, y estudiante de doctorado en la Universidad de la Sorbona en París.
Para la segunda mitad del siglo XIX, los científicos habían desarrollado un programa para estudiar la consciencia que se asemeja a los enfoques actuales, dice Michel. Pero la investigación se detuvo durante gran parte del siglo XX, ya que los psicólogos rechazaron la introspección para centrarse en los comportamientos observables y los estímulos que los causaban.
Incluso en los años setenta y ochenta, cuando se estableció la ciencia cognitiva, la consciencia siguió siendo un tema controvertido entre los científicos que cuestionaron abiertamente si era un área válida de investigación.
Finalmente, científicos prominentes (incluido el biólogo molecular y premio Nobel Francis Crick Crick) decidieron abordar el estudio de la consciencia, lo que dio paso a un cambio en el pensamiento que surgió en la década de 1990, impulsado por la creciente disponibilidad de tecnologías de escaneo cerebral, como la resonancia magnética funcional (IRMf) y la electroencefalografía (EEG). En este punto, los científicos finalmente se embarcaron en una búsqueda importante de los mecanismos en el cerebro que están asociados con el procesamiento consciente de la información.
Siguió una sucesión de avances, incluido el caso de una mujer de 23 años quien sufrió una lesión cerebral grave en un accidente automovilístico dejándola en estado de coma. En un estudio único en su tipo, Adrian Owen, un neurocientífico de la Universidad de Cambridge, junto con su equipo observaron imágenes de IRMf, mientras le daban órdenes verbales a la mujer, le pidieron que se imaginara jugando al tenis, y observaron actividad en una parte de su cerebro llamada área motora suplementaria. Cuando le pidieron que se imaginara caminando por su casa, la actividad aumentó en tres áreas del cerebro que están asociadas con el movimiento y la memoria.
La actividad cerebral en personas en un estado aparentemente no sensible puede ser similar a la de personas sanas. Imagen: Nature
El hallazgo de que algunas personas en coma muestran signos de consciencia fue transformador para la neurociencia, dice Seth. El trabajo sugirió que algunas personas podían entender el habla y posiblemente comunicarse, incluso cuando parecían no responder a los médicos y miembros de la familia, o cuando no es posible detectar signos de consciencia con evaluaciones convencionales.
En los años transcurridos desde que se publicó el estudio de Owen, las investigaciones de personas con lesiones cerebrales han ofrecido más evidencia de que la consciencia es detectable entre el 10-20% de las personas que no responden.
Los científicos también han comenzado a probar formas de detectar la consciencia sin la necesidad de dar instrucciones verbales. En una serie de estudios que comenzaron en 2013, el neurocientífico Marcello Massimini de la Universidad de Milán y sus colegas, han utilizado la estimulación magnética transcraneal que es un procedimiento no invasivo donde utilizan campos magnéticos para estimular las células nerviosas en el cerebro, así crean «ecos» eléctricos en el cerebro que se pueden grabar con EEG. La técnica es similar a golpear el cerebro, de la misma manera que una persona podría golpear una pared para medir su grosor.
Mientras una persona está bajo anestesia general, o en un sueño ‘sin sueños’, los ecos que se producen son simples. Pero en el cerebro consciente, los ecos son complejos. El trabajo podría eventualmente llevar a una herramienta que sea capaz de detectar la consciencia incluso en personas que no pueden ver, escuchar o responder a órdenes verbales.
Ubicación de la consciencia
A medida que los científicos se han vuelto más expertos en detectar la consciencia, han comenzado a determinar qué regiones y circuitos cerebrales son más importantes. Pero todavía hay mucho debate sobre lo que constituye la consciencia en términos neuronales, con un desacuerdo particular sobre qué procesos y regiones cerebrales son más importantes.
Desde al menos el siglo XIX, los científicos han sabido que la corteza cerebral es importante para la consciencia. Sin embargo, nueva evidencia ha puesto de relieve una «zona caliente» cortical posterior que es responsable de las experiencias sensoriales.
Por ejemplo, en un estudio de sueño realizado durante el 2017, investigadores despertaron a las personas durante toda la noche mientras las monitorizaban con EEG. Alrededor del 30% de las veces, los participantes que se sacudieron del sueño informaron que no experimentaron nada justo antes de despertarse. El estudio mostró que aquellas personas sin experiencias conscientes durante el sueño tenían mucha actividad de baja frecuencia en la región cortical posterior de sus cerebros antes de despertarse. Sin embargo, las personas que informaron que habían estado soñando tenían menos actividad de baja frecuencia y más actividad de alta frecuencia.
Como resultado, los investigadores sugieren que al observar la ‘zona caliente’ cortical posterior de una persona durante el sueño, podría ser posible predecir si están soñando, e incluso los contenidos específicos de sus sueños, incluidos los rostros, el habla y el movimiento.
Sin embargo, cada vez es más claro que la conciencia no se limita a una sola región del cerebro, involucran varias células y vías, dependiendo de lo que se esté percibiendo o del tipo de percepción que esté involucrada. Quedan muchas incógnitas. Los científicos no están de acuerdo sobre cómo se deben interpretar los resultados del estudio, y medir si una persona está «dentro» o «fuera» de la consciencia, desafío que difiere de ver lo que sucede en el cerebro cuando se dan diferentes tipos de información.
Otras investigaciones señalan que el tálamo juega un papel importante en la consciencia, por ejemplo, Monti y sus colegas han estado experimentando con una técnica no invasiva que usa ultrasonido para estimular esa región del cerebro en personas con daño cerebral, sus resultados sugieren que este tipo de estimulación hace una diferencia para ayudar a la recuperación de pacientes en coma, pero no está claro si los beneficios duran más de unas pocas semanas. El trabajo del equipo está en curso, y los investigadores ahora están tratando de averiguar si los tratamientos repetidos harán que los beneficios duren más.
Avanzar más en los mecanismos de la consciencia podría conducir a mejores tratamientos para la ansiedad, las fobias y el TEPT, resultados sugeridos por el trabajo de Hakwan Lau, neurocientífico de la Universidad de California, y sus colegas. El método estándar para tratar los miedos es la terapia de exposición, que empuja a las personas a enfrentar repetidamente lo que más les asusta. Pero tal tratamiento es desagradable, y las tasas de deserción pueden alcanzar el 50% o más.
En este sentido, el equipo de Lau, está intentando reprogramar el inconsciente utilizando una técnica basada en IRMf que recompensa a las personas cuando son capaces de activar regiones cerebrales específicas. En su ensayo, los investigadores desafiaron a 17 personas (con fobias) a hacer un punto que aparecía en la pantalla más grande, usando cualquier estrategia mental. Cuanto más grandes pudieran hacerlo, más dinero recibirían. Sin embargo, lo que no sabían era que el punto se expandiría solo cuando activaran partes de su cerebro que, según observaciones previas hechas en un grupo más grande de personas, se activarían cuando vieran imágenes de animales a los cuales tenían miedo, como arañas o serpientes.
Con el tiempo, los participantes se volvieron mejores para activar las partes correctas de su cerebro, pero sin pensar conscientemente en las criaturas que evocan sus miedos. Después del experimento, disminuyó la sudoración de las palmas de las personas, un rasgo que refleja sus niveles de estrés. La activación de la amígdala, un área del cerebro que responde a las amenazas, también se redujo. La técnica parecía haber reprogramado las respuestas de miedo del cerebro fuera de la región consciente de los participantes.
Pero la técnica tiene una limitación considerable. A pesar de la disminución de los síntomas físicos, no parece afectar cómo se sienten las personas con respecto a las arañas y las serpientes. «Si les preguntas a los pacientes si realmente tienen miedo«, dice Lau, «dicen que sí«.
En última instancia, abordar el miedo podría requerir apuntar a vías inconscientes y conscientes, que funcionan de diferentes maneras en el cerebro, dice Joseph LeDoux, neurocientífico de la Universidad de Nueva York en la ciudad de Nueva York. El camino inconsciente, dice, emerge de la amígdala. Pero esa reacción a las amenazas, sugiere, no deberían considerarse en absoluto como miedo. En cambio, la experiencia consciente del miedo proviene de la parte cognitiva del individuo y la interpretación emocional de una situación. Las experiencias resultantes no se centran en la amígdala.
Esa desconexión también podría ofrecer una idea de por qué los medicamentos actuales para la ansiedad no siempre funcionan tan bien como la gente espera, dice LeDoux. Desarrollados a través de estudios en animales, estos medicamentos pueden apuntar a circuitos en la amígdala y afectar los comportamientos de una persona, como su nivel de timidez. Pero tales drogas no necesariamente afectan la experiencia consciente del miedo, lo que sugiere que los futuros tratamientos podrían necesitar abordar los procesos inconscientes y conscientes por separado. «Bajar el volumen no cambia la canción, solo su nivel«, apunta LeDoux.
Los trastornos psiquiátricos son otra área de interés para los investigadores de la conciencia, dice Lau, sobre la base de que algunas condiciones de salud mental, como la esquizofrenia, el trastorno obsesivo compulsivo y la depresión, pueden ser causadas por problemas en el nivel inconsciente, o incluso por conflictos entre la conciencia y el inconsciente.
El vínculo es solo hipotético hasta ahora, pero Seth ha estado investigando las bases neuronales de las alucinaciones con una «máquina que produce alucinaciones», un programa de realidad virtual que utiliza el aprendizaje automático para simular experiencias alucinatorias visuales en personas sanas. A través de estos experimentos, él y sus colegas han demostrado que estas alucinaciones pueden servir como una herramienta para investigar las bases neuronales de la consciencia. Si los investigadores pueden descubrir los mecanismos detrás de las alucinaciones, podrían manipular áreas relevantes del cerebro y, a su vez, tratar la causa subyacente de la psicosis, en lugar de solo abordar los síntomas.
Al demostrar lo fácil que es manipular las percepciones de las personas, agrega Seth, el trabajo sugiere que nuestro sentido de la realidad es solo otra faceta de cómo experimentamos el mundo.
En busca de la legitimidad
Cada año, decenas de miles de personas se vuelven conscientes mientras se encuentran bajo anestesia general. No pueden moverse ni hablar, pero pueden escuchar voces o ruidos de equipos y sentir dolor. La experiencia puede ser traumática y está cargada de ramificaciones éticas y legales para los médicos que los cuidan. Esta problemática insta al desarrollo de alternativas para detectar la conciencia, que a su vez alterarán la definición de consentimiento informado para procedimientos médicos.
Los investigadores también están empezando a presionar para una mejor comunicación con el público sobre lo que la ciencia de la conciencia puede y no puede lograr. Michel dice que las afirmaciones que no están respaldadas por datos empíricos han proliferado en la investigación de la consciencia. Uno, en particular, llamado teoría de la información integrada, ha recibido una gran cantidad de fondos privados y atención de los medios de comunicación, a pesar de que él y otros expertos en este campo lo han desestimado.
Según Seth, a medida que se acumulan fondos y publicaciones, los científicos son cada vez más capaces de hacer que las investigaciones sobre la conciencia sean una parte razonable, si no central, de su plan de investigación. «Ha habido una asimilación general de la conciencia dentro de la práctica estándar de la neurociencia, la psicología y la medicina«, dice. «Se ha vuelto más normalizado, lo cual es algo bueno«.
Investigadores del King’s College London, Reino Unido, han utilizado la secuenciación de ARN para identificar un tipo de célula, esta célula es capaz de regenerar el tejido hepático y tratar la insuficiencia hepática (deterioro grave del hígado) sin la necesidad de trasplantes.
La enfermedad hepática puede ser causada por problemas de estilo de vida como la obesidad, virus, abuso de alcohol o problemas no relacionados con el estilo de vida, como enfermedades autoinmunes y genéticas.
Los síntomas de la enfermedad hepática incluyen ictericia, picazón y sensación de debilidad y cansancio y, en casos más graves, cirrosis. El único tratamiento para las enfermedades hepáticas graves en la actualidad es un trasplante de hígado que puede conducir a complicaciones de por vida y para el cual la necesidad de órganos donantes supera en gran medida las crecientes demandas.
En un artículo publicado en Nature Communications, los científicos han identificado un nuevo tipo de célula llamada progenitor híbrido hepatobiliar (HHyP), que se forma durante nuestro desarrollo temprano en el útero. Sorprendentemente, las células HHyP también persisten en pequeñas cantidades en los adultos y estas pueden crecer hasta convertirse en los dos tipos de células principales del hígado adulto (Hepatocitos y colangiocitos), propiedad que le confiere a las HHyPs propiedades similares a las células madre.
El equipo examinó las HHyP y descubrió que se parecen a las células madre de ratones que se ha encontrado, y que reparan rápidamente el hígado de los ratones después de una lesión importante, como ocurre en la cirrosis.
«Por primera vez, hemos descubierto que las células con verdaderas propiedades similares a las células madre pueden existir en el hígado humano. Esto, a su vez, podría proporcionar una amplia gama de aplicaciones en medicina regenerativa para tratar la enfermedad hepática, incluida la posibilidad de evitar la necesidad de trasplantes de hígado«, dijo el aturo principal del artículo, el Dr. Tamir Rashid del Centro de Células Madre y Medicina Regenerativa del King’s College London.
«Ahora tenemos que trabajar rápidamente para convertir de manera común, células madre pluripotentes en HHyPs, y poder trasplantar esas células en pacientes a voluntad. A más largo plazo, también trabajaremos para ver si podemos reprogramar HHyPs en el cuerpo usando tratamientos farmacológicos tradicionales para reparar hígados enfermos sin requerir el trasplante de células u órganos«, apunta el Dr. Rashid.
A nadie se le escapa que el agua es un bien escaso y fundamental para la vida en la Tierra. Según la Organización de Naciones Unidas, si los modos de producción y los patrones de consumo no cambian, dos tercios de la población mundial vivirán en países con crisis hídrica para 2025. Teniendo en cuenta esta situación, la ciencia libra una batalla a contrarreloj para diseñar nuevas formas de aprovechamiento, limpieza y reutilización de aguas residuales o contaminadas.
Los sistemas de descontaminación actuales de aguas residuales, utilizan a menudo determinados procesos químicos que producen un daño al medio ambiente.
Con el objetivo de reducir este impacto negativo, el proyecto de Investigación WABA, en el que participa el grupo de investigación de la Universidad de Córdoba (UCO), está trabajando sobre un método de descontaminación de aguas residuales en zonas rurales que, en lugar de utilizar químicos contaminantes, emplea un sistema alternativo mucho más ecológico y barato: un consorcio entre algas y bacterias.
El proyecto, en el que participan cinco socios de España, Francia y Marruecos, se basa en la biorremediación, un proceso que utiliza el uso de microorganismos para depurar.
Pero, ¿por qué estos dos organismos en concreto?
En primer lugar, por la capacidad que tienen para utilizar los contaminantes como nutrientes. Por otro lado, tal y como indica la responsable del proyecto, Alexandra Dubini, no compiten por los mismos nutrientes, si no que puede ocurrir todo lo contrario. Su grupo de investigación descubrió recientemente que determinados tipos de algas y bacterias se complementaban intercambiando carbono y nitrógeno, una simbiosis que les permite subsistir en entornos en los que no podrían sobrevivir por sí solas.
Esta asociación entre bacterias y algas depuradoras genera, además, biomasa, y esta materia orgánica, lejos de desaprovecharse, podría utilizarse para un uso concreto.
Aquí es donde, precisamente, entra la segunda etapa del proyecto, una fase que trata de aprovechar esta materia prima para producir biofertilizantes, compuestos orgánicos que ayudan de manera natural a la nutrición y el crecimiento de las plantas. «Las pruebas que hemos hecho con tomates señalan que esta biomasa ayuda a la planta a crecer«, señala Dubini.
El proyecto está relacionado con el concepto de economía circular, mediante el que se trata de aprovechar al máximo la producción de desechos con el objetivo de cerrar el flujo ecológico de los recursos.
Como una alternativa para controlar los problemas de sobrepeso y obesidad, investigadores del Instituto Politécnico Nacional (IPN) analizan y elaboran alimentos con alto contenido de carbohidratos no digeribles, extraídos de fuentes poco comunes como zapote amarillo, mango y plátanos verdes, que son bajos en calorías y constituyen una opción más sana ante la presencia de la comida chatarra.
La doctora Edith Agama Acevedo, del Centro de Desarrollo de Productos Bióticos (CeProBi), explicó que los hidratos de carbono o carbohidratos son fundamentales en el equilibrio metabólico y en la provisión de glucosa al cerebro, músculos y células, pero se ha demostrado que su consumo en alimentos industrializados contribuyen a ganar peso pues su absorción es tan rápida que genera una elevación inmediata de la glucosa en sangre y una consecuente conversión en grasa.
Por ello, la doctora Agama, explicó que además de analizar las macromoléculas de carbohidratos provenientes del almidón de maíz, arroz, trigo y algunos tubérculos como papa, camote o yuca, también han descubierto que otras fuentes como zapote amarillo, mangos y plátanos verdes contienen un alto contenido del llamado Almidón Resistente (AR).
El almidón es un compuesto sumamente importante para los seres humanos ya que nos proporciona energía, pero cuando es resistente (AR)no es digerido por el intestino delgado, entonces pasa directamente hasta el colon donde es fermentado por la microbiota y se convierte en parte de la fibra dietaria.
Los efectos benéficos del AR en la salud son ampliamente conocidos por el incremento a la movilidad del sistema digestivo que evita problemas de estreñimiento y produce saciedad. Además los productos de su fermentación y los ácidos grasos de cadena corta, están asociados con prevención de cáncer de colon y la disminución del colesterol, entre otros.
Además, los productos elaborados con estas fuentes alternativas, también cuentan con antioxidantes y compuestos fenólicos que ayudan a evitar el envejecimiento de las células.
Asimismo, en el Laboratorio de Análisis también trabajan para obtener y modificar carbohidratos que puedan ser utilizados para estabilizar emulsiones, con alto contenido nutricional y que son ampliamente utilizados en la industria alimentaria como mayonesa, aderezos para ensalada, helados, cremas, yogures, entre otros.
Subir y bajar escaleras o simplemente dar un paseo son tareas comunes para cualquier persona, pero para un paciente con fibrosis pulmonar resultan un martirio.
La fibrosis pulmonar, que se origina cuando el tejido pulmonar se daña y se generan cicatrices, altera la estructura y el intercambio de gases necesarios para mantener la buena función de los pulmones, produce incapacidad funcional gradual como consecuencia de la restricción pulmonar y disminuye la capacidad de difusión, lo que provoca un fallo respiratorio. Desde su diagnóstico, el paciente tiene una esperanza de vida de hasta cinco años. Esta patología no tiene un tratamiento efectivo, puede ser un trasplante de pulmón, rehabilitación o un proceso farmacológico para controlar los síntomas.
En la búsqueda de encontrar opciones terapéuticas para este padecimiento que afecta a entre 0.6 y 17.4 personas por cada 100 mil habitantes al año en el mundo, investigadores de la Facultad de Medicina de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP)desarrollaron un surfactante exógeno para resarcir el daño a los pulmones por fibrosis.
Actualmente, el surfactante pulmonar se utiliza en bebés prematuros a respirar adecuadamente, pues reduce la tensión en los alvéolos evitando que estos colapsen.
«Descubrimos que uno de los componentes del surfactante, llamado fosfatidiletanolamina, es responsable de mejorar la fibrosis pulmonar«, aseguró el doctor Luis Guillermo Vázquez de Lara Cisneros, responsable de esta investigación.
El Dr. Vázquez explicó que al probar el surfactante enriquecido con fosfatidiletanolaminaen fibroblastos cultivados en el laboratorio y en modelos animales con asma crónico (ratones) se observaron resultados prometedores: se logró reducir la fibrosis 50%, ya que esta sustancia indujo la muerte celular de fibroblastos y su capacidad para producir colágeno en exceso y, por ende, la acumulación de tejido fibrótico en los pulmones.
Estos datos podrían sugerir que este surfactante pulmonar puede ayudar en el tratamiento de la fibrosis, pues poco se sabía sobre sus otros efectos adicionales. Los resultados de esta investigación se publicaron en la revista International Journal of Molecular Sciences.
Como un proyecto integral, la organización Jaguares Sin Protección (JSP) busca que seis felinosque habitan en territorio del municipio de Santiago Ixcuintla tengan padrinos que aporten ya sea 500 o mil pesos y así recaudar fondos económicos para incrementar la vigilancia en estas zonas.
La aportación no está enfocada a que deba ser una sola persona, sino que también se puede juntar un grupo escolar y entre todos recabar la donación.
En los últimos cuatro años esta organización ha ido detectando más jaguares y lograron colocar collares GPS lo que permite dar un puntual seguimiento a las actividades que los felinos realizan así como el territorio que recorren día a día. Además las cámaras trampa que se han instalado también han rendido buenos frutos mostrando imágenes de los jaguares yendo a beber a los arroyos o bien en caza de alimento.
A quien se convierta en padrino jaguar, se le enviarán imágenes y boletines mensuales de su ahijado y un certificado oficial por estar apoyando en la conservación y vigilancia del jaguar. Por lo pronto la cachorra Janis es la primera que cuenta con un padrino, Ron Thompson quien también colabora con JSP decidió dar su aportación e invitó a que más personas se sumen a esta noble invitación.
Día 1: Registro de equipos en la International Mathematics Competition (IMC), realizada en Durban, Sudáfrica.
México es el único país de Iberoamérica que participa en la competencia junior de matemáticas más importante del mundo, organizada por países asiáticos que son dominantes en esta materia.
Se ha invitado a Brasil pero es una competencia cara porque los equipos que asisten deben cubrir sus pasajes aéreos y una cuota de inscripción.
México participa desde 2010, por iniciativa de la Olimpiada Mexicana de Matemáticas, luego de que en 2009 la Secretaria de Educación Pública rechazara la invitación que le hizo el comité organizador de la IMC.
Se invita a países que han tenido buen desempeño en competencias internacionales. México asiste, con muchos esfuerzos por parte del comité OMM porque tiene el nivel académico que se requiere y porque es importante el fogueo para los niños de primaria y secundaria seleccionados.