Explora unam global tv
Explora unam global tv
explorar
Explora por categoría
regresar

Poner la decoración navideña con anticipación: ¿nos hace más felices?

A muchas personas el espíritu navideño se les adelanta desde noviembre; apenas concluye el Día de Muertos y ya comienzan a reunir moños, luces, guirnaldas, esferas y demás elementos imprescindibles para adornar la casa. No ven la hora de vestir su hogar a tono con la Navidad. ¿Por qué no pueden esperar? ¿Qué tiene la decoración navideña que, para muchos, resulta algo tan urgente?

Las respuestas que han encontrado los investigadores son varias, y abarcan desde aspectos emocionales hasta cuestiones sociales.

Un estudio publicado en Journal of Environmental Psychology señala que quienes decoran con antelación son percibidos como más sociables y empáticos. El psicoanalista estadounidense Steve McKeown, por su parte, explicó que estas personas suelen ser más felices, aunque también buscan revivir recuerdos de su infancia. Ahora bien, ¿de verdad son más felices?

A continuación, Manuel Alfonso González Oscoy, profesor de la Facultad de Psicología de la UNAM, responde esta y otras interrogantes relacionadas con el tema.

No es la felicidad en sí

En cuanto a la supuesta felicidad, el experto universitario no llega tan lejos. Más mesurado, indica que, en todo caso, la gente que adorna temprano “construye su camino hacia la felicidad”. Además, advirtió que la decoración anticipada podría ser, en algunos casos, una fachada, ya que internamente en el hogar las cosas podrían no ir del todo bien.

Nostalgia

¿Quién no quiere transportarse a momentos felices de celebraciones pasadas? Al adornar y preparar la casa para la Navidad, se pueden evocar recuerdos de épocas anteriores y tradiciones familiares. Por tanto, “es entendible que muchas personas deseen adelantar esta actividad, puesto que necesitan de esos recuerdos para adentrarse en el ambiente de la época”, explicó el académico.

¿Más sociables y empáticos?

Sobre el artículo publicado en Journal of Environmental Psychology y la manera en que son percibidas las personas que decoran con anticipación, González Oscoy comentó que, a nivel social, los adornos navideños son más que simples decoraciones: son una herramienta poderosa para fortalecer las relaciones sociales durante las fiestas, creando espacios de interacción, alegría compartida y apoyo mutuo.

“La percepción juega un papel importante porque nos hacemos a la idea de que esas personas son más amigables. Esto puede ser cierto o no, pero es nuestra primera impresión porque entendemos que la decoración navideña es algo que se realiza a nivel sociedad”, explicó.

El significado en adultos mayores y en niños

El profesor de la Facultad de Psicología señaló que adelantar los adornos navideños tiene una connotación diferente en niños y adultos mayores.

Para los adultos mayores, esta actividad puede asociarse con una especie de “compromiso de llegar al otro año”. Además, de alguna manera les da una idea de “reafirmar los lazos familiares que, a veces, ellos pudieran sentir que no existen. Entonces eso les hace ilusión”.

En los niños, la insistencia por adornar la casa lo más pronto posible está relacionada, como uno podría imaginar —o recordar—, con la llegada de Santa Claus y los Reyes Magos. Los pequeños “relacionan un mayor ímpetu con mejores o más grandes regalos”.

La Navidad, algo que tenemos en común

Para concluir, González Oscoy destacó que adornar para Navidad, ya sea de manera anticipada o a última hora, es una actividad que nos une e identifica con los demás, más allá de nuestra familia.

“A veces, adornar se vuelve una acción comunitaria, sobre todo para las personas que viven en edificios, porque adornar es algo que se hace en equipo. No sólo implica el acto en sí, sino también un vínculo social que se puede mantener durante la época y que, en algunos casos, llega a ser profundo. Entonces, este tipo de actividades tiene un valor social comunitario importante, porque puede reafirmar relaciones previas o disminuir diferencias”, concluyó.

Ideas destacadas:

  • Los adornos navideños son percibidos como herramientas para fortalecer vínculos sociales y fomentar la empatía.
  • La decoración anticipada puede estar ligada a la nostalgia y a la búsqueda de momentos felices.
  • En adultos mayores, esta práctica puede significar una reafirmación de lazos familiares y un compromiso emocional con el futuro.
  • En niños, la decoración temprana está asociada con la expectativa de regalos y la magia de la temporada.
  • Decorar puede trascender el ámbito personal y convertirse en una acción comunitaria que une a las personas.