Aunque solo podemos ver sus esqueletos en museos e imaginar cómo serían si estuvieran vivos, todos nos hemos sorprendido al ver a los dinosaurios. Estos reptiles dominaron la Tierra durante al menos 160 millones de años y, a pesar de que se extinguieron hace 65 millones de años, actualmente son parte de nuestra cultura por medio de películas, libros y juguetes. Sin embargo, durante su apogeo, no estuvieron solos; fueron acompañados por reptiles voladores y marinos.
México, un tesoro paleontológico
Casi en todos los países del mundo, se encuentran fósiles de estos reptiles prehistóricos, y México no es la excepción. Durante años, nuestro país se ha considerado como uno muy rico en paleontología a nivel mundial. Gracias a ello, investigadores como Jair Israel Barrientos Lara, del Instituto de Biología de la UNAM, han podido realizar sus estudios.
Con el fin de sumergirnos en la fauna de nuestro país en tiempos prehistóricos, Barrientos Lara nos contó acerca de los reptiles marinos: “Los reptiles marinos se pueden definir no como dinosaurios, sino como un grupo artificial que se adaptó a vivir en ambientes acuáticos. Éstos representan un modelo ideal de estudio por dos situaciones: nos permiten entender procesos macroevolutivos y también colaboran a saber cómo era la vida en el mar durante el Triásico, el Jurásico y el Cretácico”, dijo.
De acuerdo con estudios geológicos, cuando inició la era mesozoica, hace 225 millones de años, gran parte del territorio mexicano se encontraba bajo el mar (salvo lo que actualmente es el estado de Tamaulipas). Durante el lapso jurásico y cretácico, emergieron varias regiones del país. Con base en ello, México tiene un potencial importante en cuanto a reptiles marinos se refiere, pero éste no ha sido aprovechado.
Descubrimientos históricos y la reanudación de investigaciones
“Durante el siglo XIX tuvimos varios descubrimientos. El más importante fue el realizado por el Ing. Antonio del Castillo Patiño, primer geólogo mexicano, cuando en 1870 halló un ictiosaurio. Y después de que Wieland [paleobotánico George Reber Wieland, quien realizó trabajos pioneros en la Mixteca oaxaqueña], colectó y describió el Plesiosaurus mexicanus en 1909, tuvimos una gran etapa sin registros fósiles de reptiles marinos, hasta que, a partir de la década de 1980, se retoman”, comentó el biólogo universitario Barrientos Lara.
El investigador de la UNAM comentó que, a partir de los años 80 del siglo XX, viene un momento de irrupción, ya que poco a poco se realizaron más hallazgos, como el descubrimiento de un ictiosaurio en Durango (1981) y restos de un talatosuquio (pariente de los cocodrilos) en León (1988) y un Geosaurus (2002). Posteriormente, en 2008, viene un momento destacado en el estudio de reptiles marinos en México, ya que el Instituto de Geología de la UNAM comenzó un proyecto de colecta y estudio, en el cual Barrientos Lara ha estado participando.
A pesar de que este es un paso importante para conocer la riqueza que tiene México en cuanto a reptiles marinos se refiere, el biólogo universitario confesó que esto apenas es una parte mínima, ya que hay un área de oportunidad importante.
“La labor de descripción e identificación de estos reptiles marinos no termina, y hay que hacer importantes trabajos de colecta. Actualmente ya se están haciendo de manera más sistematizada, y no como se elaboraban antes, que era un poco como: ‘estoy haciendo mi trabajo geológico, pero me encontré un reptil marino por casualidad’. Estamos haciendo un trabajo que permite conocer la diversidad de esos grupos y de las faunas en tiempos prehistóricos”, expresó.
Los estados de México donde se han encontrado reptiles marinos son Chihuahua, Nuevo León, Tamaulipas, Coahuila, Zacatecas, San Luis Potosí, Puebla (Formación Mapache), Guerrero, Oaxaca (Formación Sabinal) y Chiapas (Formación Angostura y Ocozocoautla).
Retos en la gobernanza de muestras paleontológicas en México
Por otro lado, Barrientos Lara comentó que no hay instituciones en México que se dediquen a la gobernanza de la posesión de muestras paleontológicas, lo cual influye de manera directa en el trabajo de los investigadores, ya que en algunas ocasiones el material que recolectan se pierde.
“De momento, esto lo regula el INAH, pero no tiene establecidos protocolos ni permisos de colecta. Entonces, encontramos la forma de conservar nuestro trabajo por medio de reservorios como el del Instituto de Geología de la UNAM, el del Museo del Desierto (Coahuila) y el del Museo de Paleontología Eliseo Palacios Aguilera en Chiapas. Sin embargo, esto no es suficiente, y es necesario formalizar una ley paleontológica para resaltar el trabajo de los que nos dedicamos a estudiar fósiles”, comentó.
Reptiles marinos que se han hallado en México
- Mauriciosaurus fernandezi: un plesiosaurio que medía alrededor de 2 metros. Habitaba en Nuevo León.
- Vallecillosaurus donrobertoi: restos encontrados en Monterrey, Nuevo León.
- Mosasauroidea y elasmosauroidea
- Tylosaurus: grandes depredadores emparentados con varanos y serpientes. Habitaban en Chihuahua.
- Cricosaurus: restos encontrados en Coahuila.
- Dakosaurus, Teleosaurus y Geosaurus: emparentados con los cocodrilos modernos.
- Liopleurodon: restos encontrados en Nuevo León.
- Pliosauroidea: restos encontrados en Tlaxiaco, Oaxaca (Jair Barrientos Lara participó en este descubrimiento).
- Jabalisaurus meztli: restos encontrados en Monterrey, Nuevo León.
- Maledictosuchus: restos encontrados en Tlaxiaco, Oaxaca (Jair Barrientos Lara participó en este descubrimiento).
- Notoemys tlaxiacoensis: tortuga marina antigua; restos encontrados en Oaxaca.
- Parrasaurus yacahuitztli: restos encontrados en Coahuila (Jair Barrientos Lara participó en este descubrimiento).
- Torvoneustes mexicanus: restos encontrados en Oaxaca (Jair Barrientos Lara participó en este descubrimiento).
Ideas destacadas
- México es un país rico en paleontología a nivel mundial, con un gran potencial en cuanto a reptiles marinos.
- Jair Israel Barrientos Lara, del Instituto de Biología de la UNAM, investiga y estudia reptiles marinos en México.
- Los reptiles marinos son un modelo ideal de estudio para entender procesos macroevolutivos y la vida en el mar durante el Triásico, Jurásico y Cretácico.
- A partir de los años 80, hubo un aumento en los hallazgos de reptiles marinos en México, y en 2008, el Instituto de Geología de la UNAM comenzó un proyecto de colecta y estudio.
- Se han encontrado reptiles marinos en estados como Chihuahua, Nuevo León, Tamaulipas, Coahuila, Zacatecas, San Luis Potosí, Puebla, Guerrero, Oaxaca y Chiapas.
- México enfrenta desafíos en la gobernanza de muestras paleontológicas, pues actualmente no hay instituciones que se dediquen a ello, lo que dificulta el trabajo de los investigadores.
- Barrientos Lara aboga por la formalización de una ley paleontológica para resaltar el trabajo de quienes estudian fósiles.
- Interpretar el pasado de la vida en la Tierra a través de fósiles es una labor ardua pero gratificante, permitiendo reconstruir cómo eran los reptiles marinos hace millones de años.