Con el fallecimiento de Sinéad O’Connor, el día de hoy ha visto desaparecer a uno de los faros más potentes y polémicos de la música contemporánea. Su interpretación emotiva de “Nothing Compares 2U”, fue el preludio de una carrera llena de profundidad lírica y controversia que culminó este miércoles cuando la cantante irlandesa murió a la temprana edad de 56 años. La trágica noticia, inicialmente informada por The Irish Times, fue confirmada en un comunicado por sus familiares.
Bajo el nombre de Sinéad Marie Bernadette O’Connor, nació en Dublín en 1966. A lo largo de su carrera, grabó diez discos, obtuvo un Grammy y dejó una impresión indeleble en la escena musical con su voz única y su talento sin igual. Sinéad también llamó la atención por su vida personal y en 2018 anunció su conversión al Islam, cambiando su nombre a Shuhada’ Sadaqat.
La vida de Sinéad estuvo lejos de ser tranquila. Nacida en el seno de una familia desgarrada por problemas matrimoniales, su infancia estuvo marcada por el abuso y la tragedia, como ella misma relató en su canción “Fire on Babylon”. Tras pasar un tiempo en un reformatorio y luego en una distinguida escuela en Waterford, encontró en la música su salvación.
Los inicios de su carrera musical se remontan a 1983, cuando grabó cuatro canciones en Waterford, dos de las cuales fueron sus propias creaciones. En 1984, Sinéad se unió a la banda Ton Ton Macoute, pero la muerte de su madre en un accidente de coche el año siguiente la llevó a dejar la banda y trasladarse a Londres. Allí conoció a David Howell Evans, el guitarrista de U2, y juntos trabajaron en la banda sonora de la película “Captive”.
El lanzamiento de su primer álbum “The Lion And The Cobra” en 1987 bajo la discográfica Chrysalis, fue aclamado por la crítica y le valió su primera nominación al Grammy. Su carrera alcanzó su apogeo con “Nothing Compares 2U”, pero a pesar del esfuerzo en su álbum de jazz “Am I Not Your Girl?” en 1992, no pudo replicar el mismo éxito. Sin embargo, su voz imponente encontró su lugar en la banda sonora de la película “In the Name of the Father”.
A lo largo de su carrera, Sinéad no tuvo miedo de generar controversia. Fue una ferviente defensora de temas como la religión, el sexo y el feminismo, y su postura enérgica quedó demostrada en su actuación en el programa Saturday Night Live, cuando rompió una foto del Papa Juan Pablo II en directo.
La música y el activismo de Sinéad O’Connor han dejado una huella imborrable en la cultura contemporánea. A pesar de su muerte, su espíritu indomable sigue vivo a través de su arte.