El pasado miércoles mil 500 personas partieron de San Pedro Sula, Honduras, hacia Estados Unidos. Es la primera caravana que se organiza después del acuerdo firmado entre el gobierno mexicano y estadounidense (junio 2019) en materia migratoria.
Horas después, Olga Sánchez Cordero, titular de la Secretaría de Gobernación, advirtió que no se entregarán salvoconductos a extranjeros para que atraviesen México. “Abrimos la puerta a aquellos que quieran migrar a nuestro país, pero no damos visas de tránsito”.
Por su parte, Alejandro Giammattei, presidente de Guatemala, señaló que el canciller Marcelo Ebrard le aseguró que México no permitirá el paso de los migrantes hondureños.
En ese contexto, el antropólogo Abbdel Camargo Martínez expresó que nuestro país se encuentra en una postura delicada debido al acuerdo de migración segura que firmó en Marruecos, además de las presiones del gobierno estadounidense.
En entrevista para Radio UNAM, refirió que se necesita un acuerdo regional y global para manejar las dinámicas poblacionales que impulsan a la gente a salir de sus lugares de origen.
“Habrá que estar pendientes sobre la ruta y sobre la dinámica, pero es bastante elocuente cómo el gobierno ya está anunciando la imposibilidad de generar mecanismos de tránsito que permitan a estos migrantes llegar al lugar donde quieren”, destacó el también investigador del Colegio de la Frontera Sur en Estudios de Migración y Procesos Transfronterizos Unidad Tapachula, Chiapas.