La eliminación de la violencia contra la mujer debería ser un compromiso social, palpable y latente dentro de la sociedad durante los 365 días del año y no sólo el día en que se conmemora, sostiene Elvira Hernández Carballido, doctora en Ciencias Políticas y Sociales y condecorada con la medalla Omechihuatl 2013 por su compromiso a favor de los derechos e igualdad de género.
Si bien el 25 de noviembre de cada año es un día que marca agenda entre las autoridades y los medios de comunicación a nivel internacional, como sociedad en general tendríamos que hacerlo presente todos los días para sensibilizarnos y protegernos en torno a lo que acontece alrededor de este fenómeno social.
El odio y rencor generados por el machismo y la misoginia son más comunes dentro de un ambiente carente de educación, sin embargo, los casos de violencia contra la mujer, como el feminicidio, no son hechos propios de países en vías de desarrollo, se generan en todas partes del mundo bajo cualquier estrato social.
“Muchas veces pensamos que la ley podría provocar que esto cambie, pero yo creo que es la educación y la sensibilización lo que puede permitir su erradicación. La violencia está latente en la sociedad porque existe esa cultura. Hacemos al silencio cómplice del maltrato porque aún nos resistimos a aceptar la existencia del problema”, asevera la investigadora de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM.
La denuncia es importante, señala la especialista, pero si la autoridad no es respetuosa y no se sensibiliza, no sirve de nada. Es importante fortalecer la acusación con orientación psicológica y legal. Pero sobre todo, es fundamental “la unión de todas las partes para mover al sistema y hacer posible un cambio social”.