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Una rebanada de pizza no engorda… comer cinco sí

El sobrepeso y la obesidad están más relacionadas con la cantidad de comida que se consume, que con el tipo de alimentos que se incluyen en la dieta diaria.

Si se goza de una buena salud, en una alimentación equilibrada todos los productos caben en cantidades moderadas, incluso para quienes tienen alguna enfermedad como diabetes, hipertensión o sobrepeso, se cuenta con productos bajos en calorías que pueden ser integrados a su dieta.

La alimentación y una buena hidratación, son fundamentales para cualquier persona, son el combustible que se necesita para realizar las actividades diaria, incluso aquellas que se llevan a cabo de manera automática como el respirar, hablar, dormir o estar en reposo.

La ingesta de alimentos y bebidas ayudan a reponer los nutrientes que nuestro organismo requiere para seguir realizando esas y otras actividades.

Para hidratarse, lo más recomendable es el agua simple, pero también se puede optar por agua de sabor o bebidas azucaradas con edulcorantes no calóricos, estos últimos, especialmente para personas con diabetes y sobrepeso.

La nutrióloga Susana Padierna señala que las bebidas y alimentos bajos en calorías, “son una opción para quienes buscan disminuir peso y para las personas con diabetes o hipertensión, porque les ayuda a estar controlados”.

En una dieta todos los alimentos caben si son variados y en pequeñas cantidades, afirma.

De acuerdo con un estudio de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL), la porción individual de una bebida azucarada representa apenas 5.0 por ciento de las calorías que consume un adulto en un día.

Mientras que las personas que consumen altas cantidades de alimento, continuamente tienen problemas con su peso. En el mundo, una de cada nueve personas no dispone de una alimentación con la que pueda llevar una vida saludable y activa.

Ruth Pedroza Islas, doctora en Ingeniería de Alimentos, afirma que “la epidemia actual de obesidad refleja, sin lugar a dudas, un desbalance entre la ingestión y el gasto de energía”.

“Cuando hay un incremento en la ingestión de energía y una reducción en el gasto de esa energía, el almacenamiento de grasa en el organismo se incrementa”, explicó.

En México, el consumo de energía en la dieta diaria por persona es superior a las tres mil calorías, lo que excede las necesidades de consumo general, que van entre mil 500 y dos mil calorías.

Un estudio de la investigadora Susan B. Roberts, de la Universidad de Tufts en Boston, señala que “las comidas favoritas por lo general contienen tres o incluso cuatro veces más la cantidad de calorías que necesita una persona”.

Aunque no hay necesidad de consumir grandes cantidades, la mayoría de las personas no tiene la voluntad de dejar de comer cuando ya están satisfechas.

Para evitar comer en exceso se puede optar por las versiones más pequeñas de algunos productos o preferir los que son bajos en calorías.

En ese sentido, la nutrióloga Maribel Yáñez menciona que es importante una buena combinación de alimentos.

El consumo de frutas y verduras debe incluirse en todas las comidas que se hacen, y se recomienda ingerir en menor cantidad los cereales (pan, tortilla), así como algunos de origen animal (carne, queso, entre otros).

Frutas y verduras; leguminosas y alimentos de origen natural, así como cereales, son los tres grupos que integran el Plato del Bien Comer, el cual es una guía visual sobre las porciones en que debe consumirse cada uno de ellos.