Los líderes de Estados Unidos y Corea del Norte tenían pactado un encuentro para el 12 de junio en Singapur. Sin embargo, declaraciones de Kim Jong-un en el sentido de que Estados Unidos debe retirar las sanciones económicas a su país, y por su parte, el discurso de Donald Trump quien exigió pruebas claras de la desnuclearización del régimen norcoreano, podrían malograr la reunión.
En entrevista para UNAM Global, Dámaso Morales Ramírez, profesor de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, de la UNAM, aseguró que no está claro si dicho encuentro se llevará a cabo o no.
El académico puso en claro cuál es el contexto de la coyuntura política. Por un lado, Trump necesita con urgencia un gran resultado en materia de política exterior, porque después de que ha sido criticado por la prensa internacional y nacional, “requiere tener algo firme y manifestarse como ganador”.
Por el otro, Pyongyang necesita que las sanciones económicas se eliminen para atraer inversiones, así como programas de cooperación y desarrollo. Si ambos líderes dejan de vociferar podrían llegar a un acuerdo.
Morales Ramírez dijo que en el escenario también se encuentra Rusia, país que siempre se ha interesado en el desarrollo de la Península Coreana junto con China y Japón. De hecho, Vladimir Putin invitó a Kim Jong-un a visitar Moscú. “En todo este entramado seguramente veremos twitters de triunfalismo de Trump, y por parte de Corea del Norte una posición más reservada”.
Finalmente, si la reunión se lleva a cabo, podría ser el principio de un pacto de desnuclearización de Corea del Norte, “aunque también podrían ser sólo falacias”.