Al percatarse de que su comunidad necesitaba mejoras urgentes en aspectos como el bacheo y la iluminación de las calles, Erick Ahmed García González, estudiante de segundo semestre del CCH Oriente, decidió tomar la iniciativa para transformar su entorno. Con determinación, elaboró un proyecto y lo presentó para que entrara entre las prioridades del presupuesto participativo, con el objetivo de que las necesidades de su comunidad fueran atendidas.
Durante su exposición, Erick demostró sus habilidades comunicativas, logrando transmitir de manera clara y convincente las problemáticas que afectaban a los vecinos.
Lo que comenzó como una simple petición ciudadana se convirtió en un punto de inflexión en la vida del joven, ya que descubrió que su capacidad para comunicarse podía ser una herramienta poderosa para generar cambios positivos en su entorno.
Inspirado por esta experiencia, García González incursionó en el mundo de la declamación, buscando utilizar su voz para impulsar mejoras sociales. Participó en diversos cursos para perfeccionar sus habilidades argumentativas y de oratoria, y poco después, decidió competir con otros jóvenes para seguir desarrollando sus aptitudes. Fruto de su dedicación y esfuerzo, el estudiante del CCH Oriente obtuvo el primer lugar en el Concurso Juvenil de Deliberación Pública del Instituto Electoral de la Ciudad de México.
A pesar de este importante logro, Erick destacó que la experiencia fue enriquecedora no solo por la competencia, sino por los temas abordados, especialmente aquellos relacionados con las redes sociales y su impacto en los jóvenes.
«Si bien fue una competencia, los argumentos presentados por todos los participantes fueron muy valiosos. El objetivo no era solo ganar, sino llegar a consensos. A través de estos ejercicios, buscamos generar ideas que contribuyan a transformar lo establecido, siempre con el fin de mejorar nuestra sociedad», comentó.
La deliberación: una herramienta para el éxito
A pesar de su juventud, Erick ha comprendido el impacto que una buena deliberación puede tener en diversos ámbitos. Para él, construir ideas sólidas y expresarlas con argumentos claros no solo es útil en competencias, sino también en situaciones cotidianas, como exponer un tema, buscar empleo o incluso defender una tesis.
Consciente de que estas habilidades le han brindado un gran crecimiento personal y profesional, García González decidió compartir sus conocimientos con sus compañeros. Con el apoyo del Departamento de Difusión Cultural del CCH Oriente, organizó un Taller de Deliberación y Debate, que se llevó a cabo durante un mes.
En este taller, los estudiantes participantes desarrollaron su pensamiento crítico, aprendieron a construir puentes de entendimiento y, sobre todo, comprendieron la importancia del respeto, incluso cuando existen diferencias de opinión. Además, el taller ayudó a los alumnos a ganar confianza al expresar sus ideas en público.
“En este taller, buscábamos que mis compañeros trabajaran bajo un sistema de prueba y error. Cuando cometían errores, se ponían nerviosos, pero les recordaba que equivocarse era parte del proceso y que incluso esos errores les ayudarían a mejorar. Lo más importante era que fortalecieran su autoestima y, al mismo tiempo, adquirieran las herramientas necesarias para ser críticos y objetivos, siempre considerando ambos lados de un problema”, explicó.
Aunque el taller tuvo una duración de un mes, García González tiene planes más ambiciosos para el futuro, ya que en esta primera edición contó con la participación de alrededor de 50 estudiantes. Además, destacó que la deliberación es una habilidad esencial que les será de gran utilidad en el mercado laboral.
“El mercado laboral está cada vez más competido, y ya no basta con tener habilidades técnicas. La capacidad de comunicarse de manera efectiva es crucial. Una persona que sabe expresar sus ideas con claridad y argumentos sólidos destaca frente a los demás. En un mundo donde la tecnología, como la inteligencia artificial, está ganando terreno, es indispensable saber comunicar nuestras ideas de manera clara, precisa y convincente”, afirmó.
Agradecimientos al CCH Oriente
El joven estudiante no sólo agradeció las herramientas que el CCH Oriente le brindó para ganar el concurso de deliberación, sino también el apoyo que recibió para organizar los talleres dirigidos a sus compañeros. Para él, el CCH Oriente se ha convertido en su segunda casa, un espacio donde ha encontrado un ambiente propicio para seguir desarrollando sus habilidades, con profesores altamente capacitados y una metodología de enseñanza actualizada.
Aunque lleva apenas un año en la institución, Erick ha adquirido conocimientos y herramientas fundamentales que le han permitido crecer tanto en el ámbito académico como en el personal.
“He aprendido a ver las cosas desde diferentes perspectivas y a valorar cada experiencia. Estoy convencido de que todo en mi vida ha sucedido en el momento adecuado, y llegar al CCH ha sido parte fundamental de ese proceso. Cada día aquí me acerca más a mis metas y me permite seguir creciendo en todos los aspectos”, concluyó.