Los satélites han proporcionado una herramienta confiable para monitorear continuamente los cambios en el hielo del Ártico desde 1979.
Cada verano, la capa de hielo del Ártico se derrite a lo que los científicos llaman su “mínimo” antes de que el clima más frío comience a aumentar la capa de hielo.
Esta visualización muestra la extensión del hielo marino ártico mínimo anual para cada año desde 1979 hasta 2022, con una superposición de gráficos.
En 2022, la cobertura mínima de hielo marino del Ártico empató en el décimo lugar más bajo registrado, proyectando una tendencia a la baja a largo plazo.