Cada cuatro años, la Copa Mundial de Futbol de la FIFA es el espectáculo deportivo más visto, todos los medios de comunicación transmiten sus imágenes a todos los rincones del planeta para que las personas se emocionen con cada partido. Sin embargo, no pasa lo mismo con la liga femenil, ¿por qué?
Históricamente, los espacios deportivos han estado dominados por los hombres, dijo Hortensia Moreno, del Centro de Investigaciones y Estudios de Género de la UNAM. Desde su origen, ha existido una oposición muy clara, abierta y explícita a que las mujeres se integren en el campo.
Aunque esto se ha modificado poco a poco, todavía son limitados los espacios para que el género femenino juegue en igualdad de condiciones que los hombres, añadió la académica.
Las niñas siempre han estado excluidas del campo deportivo y México no es la excepción. “Si vas a las canchas deportivas de los espacios públicos, están llenas de niños, jóvenes y hombres, rara vez hay niñas o mujeres”.
Lo mismo pasa a nivel profesional. Las chicas no ganan la misma cantidad de dinero que los hombres, y los medios de comunicación (desde los impresos, pasando por los digitales, televisivos hasta la radio) no ponen al deporte femenil en el mismo nivel de importancia.
Así, los medios de comunicación desconocen la importancia del deporte femenil para marginarlo. Por ejemplo, en la cobertura general del día a día brindan al género femenino entre cinco y quince por ciento del tiempo y el espacio mediático dedicado al deporte.
Inclusive cuando se trata de triunfos femeniles, la cobertura de los medios de comunicación es mucho menor para ellas. “Sí tú abres un periódico podrás ver en la primera plana una nota del equipo de futbol varonil que perdió, pero en la página 5 te encontrarás con una foto pequeña de una atleta mujer con una medalla de oro”.
De hecho, la estrategia de los medios de comunicación es ignorar, desconocer o marginar al deporte femenino, dijo la investigadora universitaria.
Los medios de comunicación dan por hecho que el deporte femenino no le importa a nadie, y se trata de una estrategia nefasta porque implica desconocer el poder que tienen los medios para producir interés sobre algún tema.
Entonces ¿qué pasa con el interés en el deporte femenino? Por un lado, está el menosprecio hacia los logros de las mujeres, y por el otro le ponen el énfasis al estado civil, si tienen novio, si tienen hijos o no. Además, “sexualizan” los cuerpos atléticos femeninos al presentarlas en traje de baño o bikini, etcétera.
Sin embargo, las mujeres han logrado incorporarse a prácticamente todas las disciplinas deportivas que existen, a pesar de la molestia de los varones, concluyó la académica universitaria.