Estudiantes del Instituto Politécnico Nacional (IPN) obtuvieron el primer lugar en el concurso Tikkun Olam Makers (TOM), al diseñar y crear una prótesis y una andadera plegable para una joven con parálisis cerebral.
En un comunicado, la casa de estudios explicó que se trata de los alumnos del Centro de Estudios Científicos y Tecnológicos (Cecyt) 11 “Wilfrido Massieu”, Andrés Reyes Blando, Daniel Zavala Hernández, Juan Hernández Escobedo y Monserrat Escamilla Lazcano.
Así como de Armando Arenas Hernández, Aldo Alanís Rodríguez, Carlos Lagunas Castillo, Fernando Naranjo Montaño y Dulce Mejía Matus, quienes concursaron dentro de la categoría “Proyecto que más Cambió la Vida de un Need Knower”, en la cual ayudaron a mejorar la calidad de vida de Lucía Fernández Flores.
Lucía Fernández, detalló, es una joven de 20 años de edad que padece parálisis cerebral y a quien se le dificulta caminar por sí sola, ya que en su pierna no tiene suficiente fuerza y le cuesta mucho trabajo subir, bajar escaleras y moverse dentro de su casa, porque el espacio es muy reducido y su silla de ruedas no cabe por las escaleras y pasillos.
Para facilitarle el desplazamiento dentro de su hogar, los politécnicos decidieron desarrollar este proyecto multidisciplinario que corresponde a una andadera plegable y una prótesis ligera, las cuales cuentan con un diseño funcional que le permiten caminar sin lastimarse ni someter su cuerpo a grandes esfuerzos.
Los estudiantes de las carreras técnicas en Procesos Industriales, Telecomunicaciones e Instalaciones y Mantenimiento Eléctrico explicaron que su equipo quería que “Lucy” tuviera mejor movilidad, ya que la prótesis le dará fuerza y equilibrio en su pierna y la andadera será un apoyo complementario.
La prótesis se construyó para ser colocada desde la cintura hasta la rodilla y de la rodilla al pie, mientras que la andadera es plegable y tiene las medidas específicas para que sea utilizada en el interior de la casa de “Lucy”.
El IPN explicó que el concurso Tikkun Olam Makers tiene como propósito que los jóvenes desarrollen tecnologías que mejoren la calidad de vida de las personas con alguna discapacidad.
El certamen tiene una duración de 48 horas, en las cuales se les asigna a los equipos de diferentes escuelas una persona a la que deben ayudar a través de la realización de una herramienta o aparato que mejore su vida diaria.