“Lo sorprendente de la gravedad es que es mucho más débil que el resto de las fuerzas de la naturaleza”, dijo en entrevista para UNAM Global Julieta Fierro Gossman, investigadora del Instituto de Astronomía de la UNAM.
Por ejemplo, las fuerzas que mantienen unidos a los átomos, incluso a un imán pegado al refrigerador que sostiene los papeles, son más fuertes que la gravedad, añadió la académica universitaria.
Durante años, los científicos han explicado que existen partículas subatómicas, pero en un mundo que pareciera de ciencia ficción se ha planteado que en realidad se trata de cuerdas que representan otra dimensión, y dependiendo de cómo oscilen tienen propiedades diferentes.
Por ejemplo, un protón, un neutrón y un electrón oscilan de forma completamente diferente. De hecho, cada uno podría estar en una cuerda distinta que representa una dimensión, explicó la académica universitaria.
Así, “la gravedad podría ser una cuerda que existe en otra dimensión pero sólo vemos y sentimos en nuestro universo un fragmento minúsculo de nuestra cuerda, es decir, la dimensión donde vivimos.”
Por eso, la gravedad es tan débil respecto de las otras fuerzas que existen en nuestro universo, como la electromagnética, la nuclear fuerte y la nuclear débil (que finalmente, no es tan débil).
Como una muestra, un átomo no se desintegra aunque los protones se repelen, esto es debido a la fuerza que los mantiene unidos a los núcleos atómicos.
“Así, la ciencia también usa su imaginación y por eso busca respuestas a los problemas más complejos”, concluyó la académica universitaria.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]