Ochocientas aletas se mueven al unísono siguiendo el llamado del mar; la inmensidad de la playa no es obstáculo para los cuatro centímetros que mide cada tortuga golfina recién nacida.
Se trata de 200 crías liberadas el pasado diciembre, que forman parte de las 256 mil 66 que han sido soltadas al inicio del Programa de Conservación de Tortugas Marinas y Campamento Tortuguero en 2012, a cargo de Raquel Briseño Dueñas, del Instituto de Ciencias del Mar y Limnología de la UNAM, en Mazatlán, Sinaloa.
Ubicado dentro del desarrollo turístico Playa Espíritu, en el municipio de Escuinapa, el programa de conservación y el campamento tortuguero cumplen la condicionante de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales.