Aunque las abejas son muy pequeñas, cuando pican, su veneno puede causar efectos muy adversos. Se trata de insectos del género Himenópteros, una clasificación otorgada por su forma de volar. Nos cuenta María Eugenia Vargas Camaño, académica en especialidad de alergia e inmunología clínica de la Facultad de Medicina de la UNAM. A esta misma clasificación también pertenecen las avispas y las hormigas de fuego, que se caracterizan porque producen un veneno muy similar que les sirve para defenderse, añadió la académica universitaria.
El veneno de las abejas contiene numerosas sustancias, principalmente enzimas como la hialuronidasa y la fosfolipasa, que destruyen el tejido en cuanto ingresan al organismo y activan una respuesta de células inflamatorias en el momento del piquete.
Respuestas del organismo
Cuando una abeja pica a una persona alérgica, lo más probable es que reaccione igual o peor que con el aguijón de una avispa, debido a que ha generado anticuerpos contra las sustancias de estos insectos, que son muy similares. “El problema de los pacientes alérgicos es que crean anticuerpos del tipo IGE, que con un piquete podría presentarse una reacción muy grave”.
Por ejemplo, si fue picado por una abeja y solo le salieron ronchas, pero después lo pica una avispa, puede causar un choque anafiláctico, porque los venenos se parecen y los anticuerpos reaccionan igual. Los anticuerpos liberan varias sustancias inflamatorias, y al reaccionar el alérgeno con el anticuerpo, se libera una gran cantidad de sustancias vasoactivas que causan desde una pequeña lesión cutánea hasta un choque anafiláctico, e incluso la muerte.
En cada ocasión, la reacción será peor. Por eso, el médico debe crear una historia clínica, averiguar si alguna vez el paciente fue picado por un insecto y cómo fue la reacción (si solo salió una roncha o pasó a mayores). Se ha detectado que la mayoría de la población adulta tiene anticuerpos contra el veneno, es decir, son alérgicos. Sin embargo, es posible identificarlo a través de una prueba cutánea. En los niños es distinto, porque como son sus primeras sensibilizaciones, a veces ni se enteran.
Hay una circunstancia grave que se presenta aun cuando la persona no es alérgica, y es cuando muchas abejas lo pican. El veneno irrita las células y causa una reacción sistémica aunque el individuo no sea alérgico, incluso puede fallecer. Para las personas que son alérgicas, existe una vacuna. Se trata de una inmunoterapia con una eficacia del 75% que evita los síntomas más graves.
¿Qué hacer si te pica una abeja?
Cualquier piquete de insecto, ya sea de abeja, avispa u hormiga, debe ser valorado por un médico general para verificar que la reacción no sea grave, y puede que al paciente se le recete medicamento antiinflamatorio y se aconseje observar si hay reacción cutánea.
Cuando las abejas pican, pierden el aguijón y este se queda enterrado en la piel donde atacaron. Por eso, lo primero que hay que hacer es retirar el aguijón, que es donde queda todo el veneno. Se recomienda que lo haga un médico. Si se queda dentro, el veneno continúa esparciéndose dentro del organismo y permanece la reacción inflamatoria.
En caso de tratarse de una reacción importante, el afectado debe acudir con un alergólogo para realizar estudios de sangre, pruebas cutáneas, y determinar el grado de alergia. Si un individuo se sabe alérgico, siempre debería cargar un kit de primeros auxilios que contenga epinefrina para las reacciones graves. También funcionan las ampolletas de adrenalina, aplicadas en el brazo o en la pierna. Se debe tener cuidado de no usar colores llamativos cuando están en jardines o al aire libre porque los insectos son atraídos por esos tonos; hay que usar ropa tenue y muy suave (beige, blanco, verde claro, etc.).
También se recomienda no estar descalzos y no usar ropa holgada porque los insectos se pueden meter por debajo de esta. Cuando vayan a manejar, deben revisar el coche por dentro, desde el volante hasta los asientos. Si se encuentran con una abeja, lo mejor es no moverse; en general, ningún insecto ataca si no se siente agredido, concluyó.
Ideas destacadas:
- Las abejas, avispas y hormigas de fuego comparten un veneno similar que puede causar reacciones graves en personas alérgicas.
- Los pacientes alérgicos generan anticuerpos IGE que pueden provocar reacciones severas, incluyendo el choque anafiláctico.
- Las reacciones alérgicas pueden empeorar con cada exposición al veneno de estos insectos.
- Las pruebas cutáneas pueden identificar la alergia al veneno de abejas en adultos y niños.
- La inmunoterapia ofrece un 75% de eficacia en la prevención de síntomas graves en personas alérgicas.
- Es importante saber cómo actuar ante una picadura de abeja, especialmente para personas alérgicas.
