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Nuevo hallazgo, vasos sanguíneos en los huesos

Es hora de volver a escribir los libros de anatomía: se ha descubierto un nuevo tipo de vaso sanguíneo en nuestros huesos.

Gracias a una técnica para hacer que los huesos sean transparentes, un equipo de científicos liderado por el profesor Matthias Gunzer y la Dra. Anja Hasenberg del Instituto de Inmunología Experimental e Imagen en la Universidad de Duisburg-Essen (UDE) en Alemania, descubrieron una red de capilares finos que conectan directamente la médula ósea con la circulación del periostio.

Los huesos son órganos muy duros. Aún así, poseen una malla estrecha de vasos sanguíneos en su cavidad interna, donde se encuentra la médula ósea, así como en la superficie ósea, que está cubierta por el periostio altamente vascularizado. Esta es la razón, por ejemplo, de que las fracturas puedan sangrar extensamente. El mismo sistema de vasos sanguíneos también es esencial para transportar las células sanguíneas e inmunes desde su lugar de origen, la médula ósea, hacia el exterior.

Un artículo publicado en Nature Metabolism, muestra cómo en los huesos largos de los ratones, el equipo observó y caracterizó un nuevo tipo de capilar que, perpendicularmente al eje largo, atraviesa todo el hueso duro, que se denomina cortical. Por lo tanto, los nuevos vasos sanguíneos se denominaron “vasos trans-corticales” (TCV, por sus siglas en inglés).

Sorprendentemente, los científicos pudieron demostrar que la abrumadora mayoría de la sangre arterial y venosa en los huesos largos fluye a través del sistema TCV, es decir, constituyen la mayor parte de sus suministro de sangre. Además, encontraron canales similares, aunque más gruesos, en huesos largos en humanos, aunque todavía no se ha confirmado si son también TCV.

Es totalmente una locura que todavía hay cosas que descubrir sobre la anatomía humana: hemos descubierto vasos sanguíneos en un lugar nuevo que no conocíamos antes”, dice Gunzer.

Estos vasos previamente desconocidos se cruzan desde la superficie de los huesos hasta su cavidad interna y pueden arrojar luz sobre las enfermedades óseas, como la osteoporosis y las condiciones que afectan al sistema inmunológico.