En México “se deben evaluar sitios para que se lleven a cabo misiones análogas, que haya colaboración: industria-gobierno- academia, voltear a ver a los jóvenes y tomar en cuenta sus ideas, para que este tipo de misiones sean una realidad en México”, afirmó Carmen Félix, científica mexicana destacada por su incursión en la exploración espacial con la NASA en el Primer Congreso México hacia Marte, llevado a cabo en septiembre en el Centro Nacional de las Artes (CNA).
Hoy día, el tema del viaje tripulado a Marte ha tomado relevancia en los medios de comunicación y se ha vuelto de mucho interés, no sólo para la industria espacial norteamericana, sino también para otras latitudes. Y sobre misiones análogas y su preparación es en lo que Carmen Félix, mujer apasionada de los secretos del universo y la inmensidad espacial, es experta.
Ha estado involucrada por más de ocho años en misiones análogas al Planeta Rojo en diferentes países: España, Austria, Estados Unidos, Holanda, entre otros. Ha participado como ingeniero de pruebas en sitio, control de misión, capitán de comunicación, y el año pasado fue parte de la tripulación análoga en el desierto de Utah.
Durante su participación en el congreso, apuntó que “las misiones son complejas, caras y se realizan para minimizar los riesgos en misiones reales”. Cada misión evalúa diferentes aspectos psicológicos, cuyo fin les permita a los astronautas ser emocionalmente estables, que realicen trabajo en equipo y reaccionen ante emergencias.
Al abordar el papel de México en estas misiones, Carmen Félix destacó la participación de jóvenes universitarios de la UNAM en la última simulación análoga llevada a cabo en Polonia, la Poland Mars Analogue Simulation (PMAS), organizada por la Space Generation Advisory Council (SGAC), en la que jóvenes científicos de 35 nacionalidades participaron.
En la PMAS, estudiantes de la UNAM presentaron los proyectos: Chaleco medidor de signos vitales, el vehículo Rover desarrollado por UNAM SPACE, y un proyecto sobre reacción cognitiva de los astronautas en el hábitat.
Estos proyectos tienen el objetivo de desarrollar tecnología para “avanzar en la exploración y llegar a colonizar Marte, a partir de la selección de experimentos que puedan cumplir con los objetivos que se habían propuesto”.
“Es muy importante apoyar y participar en misiones análogas, ya que es imprescindible realizar estas pruebas antes de realizar un viaje real”, concluyó la experta.