Una desventaja de dos goles, la presión de jugar de local y un inicio errático, no fueron obstáculo para que el equipo de futbol femenil de Las Chivas de Guadalajara hiciera historia. Son las primeras campeonas al vencer 3 goles a 0 (marcador global:
3-2) al Pachuca.
Más de 30 mil aficionados asistieron al estadio Omnilife de Guadalajara para apoyar a su equipo. Se angustiaron la mayor parte del primer tiempo. Las Chivas iniciaron con un juego errático y su rival, las Tuzas del Pachuca dominaron, parecía que la presión del público no las intimidaba.
Pero vendría la superioridad aérea del Guadalajara y en dos jugadas a balón parado empataron el partido. Pachuca tardó en reaccionar, y pese a que llegó en varias ocasiones a la portería de Las Chivas, su guardameta Blanca Félix detuvo todos los ataques.
La afición utilizó los mismos gritos que se usan en los partidos de la liga varonil. La homofobia y los insultos no cambiaron. Abucheos y cánticos fálicos fueron entonados a coro. Y tampoco dejaron de apoyar a su equipo. Fue un festejo que los alivió y les hizo olvidar unos instantes que su otro equipo, el de los hombres, ni siquiera clasificó a la liguilla.