En 2011, la agencia espacial estadounidense lanzó al espacio el cohete Atlas V 541, con destino al Planeta Rojo, a bordo del mismo iba el robot Curiosity. Gracias a la participación del doctor Navarro González, el instrumento Análisis de Muestras en Marte realiza análisis químicos automatizados in situ, para luego enviar los resultados a la Tierra y detectar la presencia o no de materia orgánica.
Además, el experto universitario encabezó a un grupo de científicos quienes utilizaron al Desierto de Atacama, en Chile, como modelo para estudiar el suelo marciano. Con los resultados, identificaron los errores de antiguas misiones a Marte (Vikingo I y Vikingo II) en la obtención de materia orgánica.
En ese contexto, en 2013 el investigador universitario afirmó que Marte tuvo condiciones para la vida y aunque no se ha encontrado evidencia directa, sí la hay de todos los ingredientes que se requieren para que florezca: hidrógeno, carbono, nitrógeno, oxígeno, fósforo y azufre, además de compuestos como agua y sulfatos.
Asimismo, el equipo científico del Mars Science Laboratory descubrió en 2015 una fuente fluctuante de metano en su superficie. La presencia del hidrocarburo sugiere que Marte podría tener procesos geológicos o químicos hasta ahora desconocidos.
Navarro González –único científico latinoamericano que participa en la misión— consideró que aunque el hidrocarburo podría provenir de algún ser vivo, hay otras fuentes de generación, como la actividad volcánica.
Agregó que también es posible que reacciones químicas en el subsuelo propicien su producción y que aquél quede atrapado en grietas o cavernas hasta que algún acontecimiento súbito, como un sismo, le permita escapar.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_video link=”https://youtu.be/r0FYDSb0LUo”][/vc_column][/vc_row]