En 2008, la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad (CDPD) entró en vigor. Este documento, en su artículo 9, establece: “A fin de que las personas con discapacidad puedan vivir de forma independiente y participar plenamente en todos los aspectos de la vida, los Estados adoptarán medidas para asegurar el acceso de estas personas al entorno físico, el transporte, la información y las comunicaciones, y a otros servicios e instalaciones abiertos al público o de uso público”.
Años antes de la CDPD, Universum, Museo de las Ciencias de la UNAM, ya trabajaba para hacer accesible la ciencia a todos. Desde su fundación en 1992, el museo ha fomentado la inclusión de distintas formas: creando instalaciones de fácil acceso para personas con alguna discapacidad y capacitando a su personal para comunicarse de manera especial, pero siempre con respeto y sin condescendencia.
UNAM Global conversó con María Dolores Arenas Venegas, Jefa de Atención al Visitante en Universum, y con los anfitriones Ángelo Bertín Sánchez Hernández y Palmira Alquicira, estudiantes de la UNAM, sobre las adaptaciones del museo para personas con discapacidad.
Arenas Venegas mencionó que las salas del museo están interconectadas para facilitar el desplazamiento de personas con discapacidad motriz. Además, se han incorporado placas en Braille y una aplicación para audiodescripciones. También se han adaptado espacios donde los objetos tienen diferentes texturas para ser identificados mediante el tacto.
“Los museos deben ser espacios para todos y debemos estar abiertos a que cada uno aborde el conocimiento de diferente forma y con los recursos que tiene. Entonces, para nosotros es vital que Universum sea un espacio que reconozca la diversidad y que sea incluyente. Por eso estamos en una constante evolución para hacerlo lo más cómodo para todos, pero sobre todo para las personas con discapacidad”, apuntó.
Además, comentó que cada cierto tiempo reciben la visita de asesores con algún tipo de discapacidad con el fin de que estos les brinden consejos para mejorar el servicio, ya se trate de la manera adecuada de dirigirse a los visitantes o hacer alguna modificación necesaria en las instalaciones.
“Es un modelo que hemos trabajado con los anfitriones. Nosotros debemos interactuar en el mundo de las personas con discapacidad y no al revés. Eso nos ha funcionado y finalmente tiene un impacto para los chicos, porque es un aprendizaje vivencial que se llevan y que no solo emplean aquí. Nosotros debemos buscar la forma de ser incluyentes en Universum, y si tenemos a un experto a la mano, hay que aprovecharlo”, resaltó.
Palmira Alquicira, estudiante de biología
Por su parte, Palmira Alquicira, una de las anfitrionas de Universum y estudiante de biología, señaló que en diversas salas del museo se emplean recursos táctiles con el fin de que las personas con alguna debilidad visual puedan comprender mejor lo que se está exponiendo. Si bien la descripción que se narra es muy útil, el contacto físico es un buen complemento.
Por ejemplo, en la sala dedicada a la evolución hay diferentes representaciones de cómo han cambiado los cráneos de los humanos a lo largo del tiempo. En este espacio se les pide a aquellas personas con discapacidad visual que toquen los cráneos, mientras el anfitrión va explicando.
La joven anfitriona comentó que los cursos que ha tomado en Universum le han ayudado a mejorar la forma en que se dirige a las personas con discapacidad, en especial en esto: perder el miedo de tratarlas como a cualquier otra persona.
“Me parece que algo en lo que caemos como sociedad es asumir cosas sobre las personas con discapacidad. Y aquí he aprendido que no hay que hacerlo; lo que debemos hacer es tratarlas como cualquier persona. No debemos poner una barrera por su condición, sino tener una conexión más cercana”, explicó.
Ángelo Bertín Sánchez Hernández, estudiante de matemáticas
Para Ángelo Bertín Sánchez Hernández, estudiante de la carrera de Matemáticas, ser un anfitrión de la ciencia es un orgullo, además de que le permite ser más sensible sobre el tema de la inclusión.
En su mochila, Sánchez Hernández carga distintos materiales didácticos que le sirven en su día a día. Dibujos, manualidades y juguetes matemáticos son algunos de los instrumentos que usa como apoyo para que las personas con discapacidad, como aquellas con discapacidad visual, puedan comprender los conceptos o temas que está explicando.
“Fomentar la inclusión en personas con discapacidad, en este caso con debilidad visual, ha sido un reto maravilloso, y para hacerlo he encontrado mucho apoyo de mi familia y profesores. Mi madre ha tejido una parte del material que yo uso. Por ejemplo, me hizo un fractal y ya con eso los niños me dicen ‘Siento un triángulo’; entonces, esto me da paso a que yo ya les pueda explicar sin tanta teoría. Me han apoyado a hacer, también, objetos para explicar la teselación y el plano hiperbólico. Siempre estoy pensando en crear más material porque hay un público muy diverso”, comentó.
Por otro lado, recalcó la importancia de crear espacios inclusivos para las personas con discapacidad y enfatizó en que es necesario como sociedad sensibilizarnos sobre el tema.
“Hay una gran diversidad de personas con discapacidad y debemos ser muy empáticos con ellas. Cuando yo entré aquí, nos dieron un curso; en uno de los escenarios nos pusieron en su lugar y eso te sensibiliza porque son muchos los retos que afrontan. Entonces, buscas alternativas para ver cómo las puedes incluir. A fin de cuentas, la ciencia es multisensorial y las cosas se pueden explicar de diferentes modos”, concluyó.
Lista de ideas destacadas:
- La CDPD y su influencia en la accesibilidad e inclusión.
- El enfoque de Universum en la inclusión desde su fundación.
- Entrevistas con expertos de Universum sobre adaptaciones y capacitaciones.
- La importancia de los anfitriones en la promoción de la inclusión en el museo.
- Experiencias y enseñanzas en el trato a personas con discapacidad.
- La necesidad de crear espacios inclusivos y la sensibilización sobre la diversidad.