Desde la academia y diversas instituciones públicas como el Instituto Nacional Electoral, la Fiscalía Especializada en Delitos Electorales (FEPADE), el Senado de la República y los Organismos Públicos Locales, se trabaja para identificar acciones, omisiones y todas las formas de violencia contra las mujeres, que limitan, afectan y restringen sus derechos.
Comentó que la violencia física es la más fácil de identificar porque hay más evidencia de la agresión, incluso los casos más graves como los asesinatos, sin embargo, comentó que otras formas como la violencia sicológica, económica o simbólica por ser indirectas o más sutiles son más difíciles de documentar. Explicó que parte de su estudio es hacer un mapeo de las formas de violencia política en el país.
Los estados con “alerta roja” por este tipo de violencia contra las mujeres son Chiapas, Oaxaca y Guerrero. Aunque aclaró que hasta el momento no se ha detectado una correlación entre los estados más pobres del país porque también en las entidades del norte con alto nivel de desarrollo económico se presentan situaciones de violencia contra las mujeres que afectan sus derechos políticos.
En el proceso electoral del 2015 se detectaron frases “históricas” en los discursos políticos por el nivel de agresión por razones de género. En lo que va del proceso electoral del 2018, también se han presentado casos de violencia política, que se han denunciado a través del Observatorio de Participación Política de las Mujeres a nivel federal y del cual, la investigadora forma parte. Entre los casos que han detectado mencionó ataques a las mujeres que hacen campaña política y que son agredidas en medios de comunicación o redes sociales con contenidos que reproducen patrones patriarcales.
A las seis de la tarde de este miércoles impartirá la Conferencia Magistral Feminizar la política y la sociedad: los retos de la construcción de la democracia paritaria. Al respecto comentó que si bien en México y en América Latina se han registrado cambios institucionales es necesario transformaciones a nivel cultural, en la sociedad. Consideró que no se han hecho todavía suficientes esfuerzos culturales y como académica dijo “mi tarea es empezar a pensar en ello”. Hoy presentará algunos avances sobre como feminizar a la sociedad.