Revertir las deficiencias de memoria y de aprendizaje espacial es el objetivo principal en el campo de la investigación de la demencia. Sin embargo, la falta de conocimientos sobre las vías celulares críticas para el desarrollo de la demencia, han obstaculizado el avance clínico.
Sin embargo, investigadores de la Facultad de Medicina Lewis Katz (LKSOM) de la Universidad de Temple, en Filadelfia, Estados Unidos, están rompiendo esa barrera al mostrar, por primera vez en un modelo animal que presenta la patología de la proteína tau, la segunda lesión más importante en el cerebro en pacientes con enfermedad de Alzheimer, puede revertirse con un medicamento.
“Mostramos que podemos intervenir después de que se establece la enfermedad y rescatar farmacológicamente a los ratones que tienen déficits de memoria inducidos por tau”, explicó el investigador principal Domenico Praticò, Director del Centro de Alzheimer en LKSOM de la Universidad de Temple. El estudio, publicado en la revista Molecular Neurobiology, plantea una nueva esperanza para los pacientes afectados por la demencia.
Los investigadores llegaron a sus resultados después de descubrir que las moléculas inflamatorias conocidas como leucotrienos no están reguladas durante la enfermedad de Alzheimer y las demencias relacionadas. En experimentos en animales, la ruta de los leucotrienos desempeña un papel especialmente importante en las últimas etapas de la enfermedad.
“En el inicio de la demencia, los leucotrienos intentan proteger las células nerviosas, pero a largo plazo causan daño”, dijo el Dr. Praticò. “Habiendo descubierto esto, queríamos saber si el bloquear los leucotrienos ayudaría a revertir el daño, y si podríamos hacer algo para reparar la memoria y los problemas de aprendizaje en ratones que ya tienen una abundante patología tau”.
Para recapitular la situación clínica de la demencia en humanos, en la que los pacientes ya presentan los síntomas, el Dr. Praticò y sus colegas, utilizaron ratones transgénicos tau especialmente diseñados, que desarrollan patología tau, caracterizada por ovillos neurofibrilares, sinapsis interrumpidas (las uniones entre las neuronas que les permiten comunicarse entre sí), y disminuída la memoria y la capacidad de aprendizaje a medida que envejecen.
Cuando los animales tenían 12 meses de edad, el equivalente a los 60 años en humanos, fueron tratados con zileutón, un fármaco que inhibe la formación de leucotrienos al bloquear la enzima 5-lipoxigenasa.
Después de 16 semanas de tratamiento, a los animales se les administraron pruebas de laberinto para evaluar su memoria de trabajo y su memoria de aprendizaje espacial. En comparación con los animales no tratados, los ratones tau que habían recibido zileutón tuvieron un rendimiento significativamente mejor en las pruebas. Su rendimiento superior sugirió una reversión exitosa de la deficiencia de memoria.