Explora unam global tv
Explora unam global tv
explorar
Explora por categoría
regresar

Es voluntad del pueblo mexicano

El artículo 40 de nuestra Carta Magna estipula: “Es voluntad del pueblo mexicano constituirse en una República representativa, democrática, laica y federal” y para Héctor Fix-Fierro estas 14 palabras capturan la esencia misma de la Constitución y son la llave para que la ciudadanía entienda este documento y se acerque a él, o al menos eso es lo que intenta con su libro más reciente: Es voluntad del pueblo.

“La idea era crear una obra dirigida a un público amplio. Aunque ya ha habido iniciativas enfocadas a lo mismo —como Mexicano: ésta es tu constitución, de Emilio Rabasa y Gloria Caballero—, la manera de abordar el asunto aquí resulta muy distinta”, explicó el integrante del Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ) de la UNAM.

Al pedírsele una opinión al respecto, la gente suele decir que se siente lejana a este documento; no obstante, al declararse ignorante sólo se refieren al librito, porque en el fondo todos tenemos una cultura constitucional. Por ejemplo, las personas saben que somos una república o que tenemos un presidente”, expuso Fix-Fierro.

Sin embargo, al solicitar conocimientos más específicos o la ubicación histórica de la Constitución es donde se hace notorio el gran desconocimiento de la mayoría de los ciudadanos.

A fin de llenar estas lagunas epistemológicas, y siempre evitando usar tecnicismos que bien sabe que serían un repelente para los lectores, Fix Fierro dividió su libro en siete apartados que reproducen casi al pie de la letra el artículo 40 constitucional, es decir: “1. Es voluntad del pueblo”, “2. Constituirse en”, “3. Una República”, “4. Representativa”, “5. Democrática”, “6. Laica” y “7. Federal”.

Una ciudadanía que desconoce su protagonismo

A decir de Fix-Fierro, la ciudadanía es el actor y el sujeto principal de la historia constitucional, pero desconoce tantos aspectos de este documento que al ahondar en el tema y preguntarle a la gente sobre el movimiento histórico en el cual se aprobó la Constitución de 1917, hubo más individuos que respondieron la Independencia (el 34 por ciento) que aquellos que dijeron la Revolución (un 24 por ciento).

Estos datos se desprenden de las tres encuestas nacionales realizadas por el IIJ sobre el tema: la de 2003, la de 2011 y, sobre todo, la de 2017, titulada Los mexicanos y su constitución (e inscrita en la colección Los mexicanos vistos por sí mismos).

“Por ejemplo, se les pidió responder cuál fue la aportación de la Constitución de 1917 al mundo y esperábamos escuchar la respuesta canónica, es decir, ‘los derechos sociales de trabajadores y campesinos’ y, sin embargo, el 62 por ciento de los encuestados prefirió guardar silencio y apenas el 2.3 por ciento contestó bien”.

Es en este contexto que surge Es voluntad del pueblo mexicano, libro que retoma los principios mencionados en el artículo 40 y los desglosa para hacerlos entendibles a todos. Así, en sus páginas se explica qué se entiende por pueblo, laicidad, federalismo o sistema representativo. Cada explicación ha sido bien recibida por los lectores; sin embargo, para Fix-Fierro el concepto más interesante de desentrañar fue el de República, pues las investigaciones que hizo le revelaron matices de dicha voz que ni él mismo conocía.

“Para mí fue un gran descubrimiento; si alguna cosa propone este libro es que debemos rescatar el concepto de República, el cual tiene tres significados, cada uno con raíces en la antigüedad clásica”.

El primero es equivalente a organización política a secas; el segundo apunta a una organización política opuesta a la monarquía, y el tercero alude a un conjunto de virtudes públicas, detalló.

“Las conductas deseables referidas son la frugalidad, la austeridad o la renovación de los cargos públicos, entre muchas otras cosas, y a partir de reflexionar sobre ello veo que tenemos muy olvidado el concepto de república. Ahora que en México estallan escándalos de corrupción por todos lados, deberíamos replantearnos la vigencia de los valores republicanos”.

Ante casos como el de Javier Duarte, Roberto Borge o Elba Esther Gordillo, Fix-Fierro apuntó que este tipo de personajes representan los vicios sobre los cuales nos alertaba un personaje que entendía muy bien los valores republicanos: Benito Juárez.

Él nos decía el 2 de julio de 1852, en su natal Oaxaca: Los funcionarios públicos no pueden disponer de las rentas sin responsabilidad; no pueden gobernar a impulsos de una voluntad caprichosa, sino con sujeción a las leyes; no pueden improvisar fortunas ni entregarse al ocio y a la disipación, sino consagrarse asiduamente al trabajo, resignándose a vivir en la honrosa medianía que proporciona la retribución que la ley haya señalado.

“Parece lo opuesto a lo que hacen nuestros políticos; por ello díganme si la frase juarista no es actual. Yo terminaría invitando a toda persona dispuesta a meterse en este libro a revalorar los ideales republicanos, los cuales, desafortunadamente, nos quedan como pendientes aún muy lejos de cumplirse”.