Si imaginamos recorrer todo el espacio sideral y ser capaces de alcanzar las supernovas y las estrellas de neutrones después de que se fusionan podríamos hacernos ricos al recolectar el oro (Au) que forman, pero hasta que eso no sea posible, tendremos que conformarnos con el disponible en nuestra Tierra.
Nuestros lectores se preguntarán: ¿por qué en una supernova o en un par de estrellas de neutrones uniéndose? Resulta que este valioso metal se produce en las estrellas más pesadas que el Sol, al igual que otros metales. De acuerdo a los conocimientos actuales sobre el Universo, los astrónomos infieren que el oro podría provenir de estos tipos de estrellas.
Al respecto, Leticia Carigi Delgado, investigadora del Instituto de Astronomía, nos dijo en entrevista que este elemento de la tabla periódica se considera muy valioso no sólo por su color, brillo y características muy especiales, sino también porque su existencia es reducida en nuestro planeta y en todo el Universo, lo cual lo hace muy preciado.
Su origen
Todos los elementos de la tabla periódica se generaron en las estrellas (excepto el hidrógeno y el helio que se formaron en la Gran Explosión), y se encuentran ordenados de acuerdo a su peso. Algunos de ellos surgieron por fusión con núcleos de helio, hasta el hierro. Elementos más pesados que el hierro no pueden producirse de esa manera, explicó Carigi Delgado.
Así, todos aquellos que se encuentran después de este metal se crean a través de capturas de neutrones, ya que estas partículas tienen masa pero no tienen carga.
En cuanto al oro, se requiere muchísima energía para crearlo. Por ello, los expertos se han planteado que podrían existir estas dos fuentes de producción, como ya se mencionó, las supernovas de origen masivo y las estrellas de neutrones.
Las supernovas de tipo masivo, provienen de estrellas con masa mayor que unas ocho veces la masa de nuestro Sol, y cuando agotan su combustible nuclear, se colapsan en menos de un segundo y en la explosión producen oro.
Otra teoría más reciente y que continúa en estudio, es que el oro también proviene de la fusión de un par de estrellas de neutrones, las cuales son el cadáver de una supernova de tipo masivo, aquello que queda en su centro después de que explotó la supernova.
En ocasiones, estos cuerpos celestes andan en pareja y giran una alrededor de la otra y se atraen hasta chocar y fusionarse. En ese momento se produce el oro, y se queda vagando por el espacio interestelar.
¿Cómo llegó a la Tierra?
El Universo tiene una edad aproximada de 13 mil 800 millones de años, y desde entonces han nacido y muerto millones de estrellas, que han dejado elementos químicos en el medio entre las estrellas.
Las partes mas frías de este medio se condensan en forma de nubes moleculares donde se originan nuevas estrellas y planetas. En una de estas nubes nació nuestro sistema solar formado hace 4 mil 600 millones de años, y contenían elementos químicos, sobre todo hidrógeno y helio, además de pequeñas fracciones de todos los compuestos de nuestra tabla periódica.
Así, los planetas se formaron con elementos químicos pesados como hierro, silicio, oro y otros que podrían considerarse los ladrillos fundamentales de nuestro hogar, la Tierra. De hecho, todo el oro de nuestra Tierra fue producido por las supernovas de tipo masivo y por los pares de estrellas de neutrones fusinados que murieron en la vecindad solar antes de que naciera nuestro Sol.
Además, todo lo que tenemos en nuestro organismo, carbono, oxígeno, hierro, entre otros, también surgieron de estos cuerpos estelares y de otros tipos de supernovas y nebulosas planetarias. Por ello, se dice que somos polvo de estrellas, y es cierto, lo somos, aseguró la experta.
Mientras tanto, cuando tengamos oro en nuestras manos podríamos pensar que en realidad tenemos polvo de supernovas y de estrellas de neutrones después de que se unieron. Quizás así podremos entender que sea tan costoso, concluyó.