Además de no olvidarse, el 2 de octubre es un espacio para ejercitar la memoria, entendida no como un discurso cerrado o un cúmulo de respuestas, sino como una serie de preguntas en las que es preciso insistir, desde la academia o el arte, y justo en este marco se inscribe el Premio Memorial 68, del cual acabamos de lanzar convocatoria (goo.gl/tSwBRB), expuso Ander Azpiri Landa.
Sobre este certamen, el subdirector académico del Centro Cultural Universitario Tlatelolco (CCUT) señaló que se aceptarán trabajos en los géneros de cuento, cortometraje y cómic, “los cuales se dividirán en dos categorías, una para personas de 15 a 20 años y otra para mayores de 21, para dar voz a estudiantes y a profesionales”.
Nacido en 2015 con la finalidad de reflexionar sobre el legado del movimiento estudiantil de 1968 desde tres lenguajes narrativos con fuerte calado entre la juventud, “la cantidad y calidad de trabajos presentados al concurso ha aumentado, por lo que en esta tercera edición esperamos una competencia aún más reñida”, expuso.
La selección de los ganadores estará a cargo de un jurado conformado por reconocidos exponentes de cada disciplina. Quienes resulten seleccionados recibirán no sólo un estímulo económico, sino que sus propuestas serán plasmadas en una publicación electrónica a fin de ponerla al alcance del gran público.
“El objetivo es pensar en colectivo sobre las aportaciones de este movimiento mediante una aproximación libre al tema; en estas dos ediciones hemos recibido casi dos centenares de obras provenientes de todo el mundo pues la convocatoria está abierta a quien quiera participar, con la única limitante de que las obras estén en español”, detalló Azpiri Landa.
Un mosaico creativo
Los trabajos ganadores de ediciones anteriores pueden ser consultados en línea y cada uno ofrece un pequeño atisbo de lo acontecido hace 49 años, como el relato de aquel joven que fuma el primer y único cigarro de su vida después de marchar al lado del rector de la UNAM Javier Barros Sierra desde CU, hasta que las autoridades —tal y como hacen hoy con cualquier manifestación— les cierran el paso al Zócalo, o el del granadero incapaz de salvar a su hermana menor de la masacre de Tlatelolco.
“Hemos tenido propuestas destacables, como la de un cómic cuya narrativa apuesta a las imágenes, mientras los globos de diálogo sólo remiten a una onomatopeya, la de ‘bla, bla, bla’ para aludir al balbuceo sin sentido de un televisor que sólo repite mensajes gubernamentales, o cortometrajes que recrean escenarios oníricos a partir de personajes enclavados en la Plaza de las Tres Culturas que transitan entre el pasado y el presente. A mí me parecen sumamente atractivos ese tipo de recursos, menos obvios y más inteligentes”.
En esta ocasión, los organizadores esperan recibir mayor número de cómics y cortometrajes, pues a decir de Azpiri Landa, ha sido apabullante la cantidad de cuentos recibidos en comparación con los demás géneros, “aunque eso es comprensible por la compleja infraestructura necesaria para hacer una historieta o filmar”.
Se recibirán propuestas hasta el 28 de julio y la premiación será el 20 de octubre. Los cuentos —a enviarse al correo electrónico cuentomemorial68@gmail.com— deberán tener una extensión no mayor a (15 cuartillas escritas a doble espacio y con letra Arial de 12 puntos). Los cortometrajes tendrán que ser no menores de cinco segundos ni sobrepasar los cinco minutos y se recibirán en cortomemorial68@gmail.com. Finalmente, se aceptarán cómics dibujados a mano o digitalmente siempre y cuando no excedan las 15 páginas en comicmemorial68@gmail.com.
“De esta forma conmemoramos el 68, pero no como un hecho aislado y cerrado, sino como uno con muchas líneas de conexión hacia el presente y con una serie de movilizaciones sociales y demandas de cambio aún vigentes. Por eso, aunque llevamos pocas ediciones, nuestra intención es que el Premio vaya creciendo en prestigio y nivel de participación, que se vaya conociendo cada vez más y que adquiera mayor peso”, concluyó Ander Azpiri Landa.