El robot explorador Curiosity, de la NASA, analiza las muestras de polvo de roca del suelo marciano a bordo de uno de sus laboratorios, luego de haber perforado Marte por primera vez en más de un año.
Mediante un nuevo método de perforación y de transferencia de muestras, Curiosity puede colocar su taladro sobre dos pequeñas entradas en la parte superior de la cubierta del rover, filtrando la cantidad apropiada de polvo de roca para que los laboratorios hagan sus análisis.
“Es bastante extraordinario tener un momento como este, a cinco años de la misión. Significa que podemos continuar estudiando Mount Sharp, que Curiosity está escalando, con nuestra gama completa de herramientas científicas”, dijo el integrante del proyecto de la misión, Ashwin Vasavada.
La agencia espacial estadunidense refirió que este método de entrega ya se había probado con éxito en la Tierra, dentro del Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL, por sus siglas en inglés).
Sin embargo, la atmósfera delgada y seca de Marte proporciona condiciones diferentes para que el polvo se caiga del taladro, destacó la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio (NASA, por sus siglas en inglés).
“En Marte tenemos que tratar de estimar visualmente si esto está funcionando, simplemente mirando imágenes de la cantidad de polvo que cae”, dijo John Michael Moorokian, de JPL.
La entrega a su laboratorio de química seguirá en la próxima semana. Además ambas pruebas continuarán perfeccionándose a medida que los ingenieros de Curiosity estudien los resultados de Marte.