- Un equipo liderado por el profesor Benjamín Velasco, de la FES Cuautitlán, desarrolla un método que ayudaría a establecer si atletas que dieron positivo en las pruebas antidopaje se administraron la sustancia o si la ingirieron inadvertidamente
El consumo de clembuterol en el ámbito deportivo y ganadero suscita polémicas debido a que algunos atletas, al dar positivo a esta sustancia sintética, aseguran que llegó a sus organismos tras haber ingerido carne contaminada. Al respecto, universitarios trabajan en un método para esclarecer si tal dopaje fue intencionado o no.
El clembuterol es un fármaco indicado en el tratamiento de enfermedades respiratorias –como el asma– y empleado como descongestionante y broncodilatador. Además, es capaz de aumentar la masa muscular (por su efecto anabólico) y de distribuir la grasa corporal (por ser lipolítico).
“Mientras que atletas –como los fisicoculturistas– lo usan para ganar musculatura, en el sector ganadero se emplea para incrementar el peso en bovinos y otras especies. Sin embargo, los alimentos contaminados con dicha sustancia representan un riesgo para los consumidores porque pueden desencadenar intoxicaciones severas que incluyen síntomas como dolor de cabeza, taquicardia, náuseas, mareos y temblores”, expone Benjamín Velasco Bejarano, académico de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Cuautitlán de la UNAM.
Por ello, desde 2020, un grupo de especialistas, liderado por Benjamín Velasco, se ha enfocado en la detección de residuos de clembuterol en carne, grenetina y salchichas. A fin de garantizar la inocuidad de los productos de origen vacuno el equipo ha desarrollado métodos analíticos para determinar su concentración no sólo en dichas matrices, sino en distintos órganos de bovino a fin de aportar evidencia científica que resultaría útil tanto para las autoridades sanitarias como deportivas.
Clembuterol en carne
En México, usar clembuterol para engorda de ganado es un delito no erradicado. En el año 2000 se emitió la NOM-061-ZOO-1999, la cual establece los requisitos y especificaciones zoosanitarias a cumplir por los productos alimenticios de consumo animal y humano.
“Los grandes productores de carne tienen mayor control en cuanto al uso de este anabólico. El problema suele darse cuando pequeños criadores llevan a animales que ingirieron clembuterol a rastros clandestinos y, desde ahí, diseminan contaminación cárnica por el país”, señala Velasco.

La finalidad del proyecto –menciona– es aportar evidencias científicas sobre cómo llegó el clembuterol al organismo del atleta, ya que éste puede ser consumido a propósito para incrementar masa muscular o de forma no intencional, por comer carne contaminada o derivados como salchichas o gelatinas. La idea es que, al distinguir ambos escenarios, las autoridades antidopaje establezcan las sanciones correspondientes.
“Realizamos un tamiz en muestras de tejido bovino (músculo, hígado, páncreas, corazón, pulmón, nervio óptico, bazo, vísceras, cerebro y riñón) adquirido en mercados municipales públicos, tianguis y supermercados del Edomex, Ciudad de México y otros estados de la República a fin de verificar si existe una prevalencia de clembuterol en el consumo generalizado de la población. Encontramos que sí la hay”.
Tras estos resultados, el universitario y sus colaboradores analizaron 56 muestras de gelatina de diferentes marcas, fecha de elaboración y origen y encontraron que 52 por ciento tenía rastros de clembuterol, en especial las comercializadas a granel. Al respecto, la NOM NMX-F-043-NORMEX-2011 establece las especificaciones sanitarias, de seguridad alimentaria y requisitos de información comercial a cumplir por las grenetinas; sin embargo, sólo se enfoca en el contenido de metales pesados y bacterias.
Además, el grupo de trabajo desarrolló y validó un método rápido, sensible y preciso enfocado a identificar y cuantificar el clembuterol en salchichas de ternera, el cual fue aplicado en 15 muestras, de las cuales 73.3 por ciento tenía clembuterol racémico, peligroso para el consumidor.
Ante la alta prevalencia de esta sustancia en los alimentos de origen vacuno, el universitario subraya que contar con un etiquetado preciso y honesto es fundamental para garantizar la inocuidad en tales productos. Desconocer dicha información, además de repercutir en la salud pública, podría impactar negativamente en la carrera de muchos deportistas.
Dopaje no intencional
“Los atletas que llegan a consumir intencionalmente sustancias dopantes, como el clembuterol, incrementan su masa muscular y eso los pone en ventaja respecto a competidores que buscan lo mismo, pero de manera natural, es decir, a través del ejercicio”, indica el también secretario general de la FES Cuautitlán.
Aún no hay en el mundo metodologías analíticas capaces de determinar, sin dejar lugar a dudas, cómo entró dicha sustancia al organismo. Para llenar esta laguna, el equipo del profesor Velasco lleva a cabo la síntesis, caracterización e identificación de los potenciales metabolitos del clembuterol, los cuales pueden ser empleados como marcadores metabólicos de su consumo y dar pistas sobre si el deportista se administró el anabólico o si lo ingirió sin saberlo.
“Actualmente estudiamos los metabolitos de clembuterol en células humanas y animales, sobre todo de bovinos, a fin de identificar alguno que, en un control antidopaje, nos permita establecer su procedencia”.

Un metabolito es un producto metabólico de una sustancia química que entra al organismo, se absorbe, se distribuye y se metaboliza, para después ser eliminada por distintas vías, como la orina o el sudor, añade.
“El análisis de una muestra de carne o alguna matriz biológica (como las vísceras o el corazón) se hace a partir de un extracto orgánico, el cual maceramos para obtener una partícula más pequeña. Luego le ponemos un disolvente a fin de extraer todos los componentes y los separamos en dos fases: acuosa y orgánica. Posteriormente, hacemos un estudio mediante un equipo de Cromatografía Líquida Acoplada a Espectrometría de Masas. Este proceso dura de tres a cuatro horas, según la cantidad y tipo de muestra”.
A decir del académico, la FES Cuautitlán cuenta con todo lo necesario para analizar muestras de orina de los bovinos que llegan a la Ciudad de México antes de ser sacrificados en el rastro y, por lo mismo, está en posibilidades de apoyar a las autoridades sanitarias si así lo requieren.
Asia International Research Awards
Por sus aportaciones a la sociedad, Benjamín Velasco Bejarano fue galardonado en octubre de 2023 con el premio Asia International Research Awards (AIRA), otorgado a científicos de todo el mundo en reconocimiento a su labor y excelencia académica en varias disciplinas.
“Fue una gran emoción que hayan reconocido nuestras investigaciones, en particular la de las gelatinas, dado el riesgo que conlleva a la salud humana el consumir un alimento potencialmente contaminado con clembuterol”, expresa Benjamín Velasco. En México –agrega– los investigadores tienen un nivel muy alto y muchos aportan a la ciencia con trabajos que trascienden y tienen aplicación tangible. Por ello, invita a la comunidad estudiantil a incorporarse a su grupo, el cual busca coadyuvar al desarrollo de la sociedad.