El canotaje es un deporte que tiene raíces históricas en el uso de la canoa como medio de transporte para los esquimales. Sin embargo, su historia moderna se remonta a Inglaterra, donde varios investigadores hallaron vestigios de embarcaciones alargadas y palas en ciertas expediciones por Canadá y el norte de África. En poco tiempo, el canotaje se convirtió en un deporte popular en todo el mundo, y para el siglo XX, había muchos clubes donde se podía practicar.
En 1924 se fundó la Organización Internacional de Canotaje, y en 1936, después de más de 10 años, hizo su debut en los Juegos Olímpicos de Berlín. Desde entonces, el canotaje ha estado presente en todas las ediciones de los Juegos Olímpicos, convirtiéndose en uno de los deportes más destacados.
En México, la Federación Mexicana de Canotaje fue fundada en 1965, y el representativo nacional realizó su primera participación oficial en los Juegos Panamericanos de 1967 en Winnipeg, Canadá.
La disciplina del canotaje fue incorporada a la UNAM en 1980, año en que también se fundó la Asociación de Canotaje de esta casa de estudios. Esta práctica es considerada el primer deporte extremo de la historia debido a que se practica en ríos salvajes y presas. En la UNAM, el canotaje es semillero de medallistas, y en los últimos años, es la disciplina que más preseas ha brindado a la Universidad en la Olimpiada Nacional.
Bryan de Jesús del Monte y Samantha Caballero son dos jóvenes universitarios que forman parte del equipo de canotaje de la UNAM desde hace cinco años. Estos jóvenes han demostrado su gran pasión por el deporte y su dedicación a su equipo. “Ha sido un viaje lleno de aventuras, de experiencias en las que tanto hay caídas como en otras también victorias para poder llegar a un pódium”, explicó Samantha.
La alumna de la carrera de Relaciones Internacionales de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Acatlán ha sumado 16 medallas desde que se inició en la práctica del deporte a los 17 años, cuando se enamoró del canotaje. “Me ha formado como persona, motivándome a seguir cada día, incluso cuando ya no puedo y mi cuerpo está cansado. Es entonces que con más ganas tengo de seguir; el momento que más demuestras, y pues te sorprendes de ti misma, de que no tienes límites: eso me ha hecho una mujer muy fuerte”, concluyó Samantha.
El canotaje ha sido una disciplina clave para la vida de Bryan del Monte, estudiante de la Facultad de Ingeniería de la UNAM. El joven inició su práctica a los 15 años con la intención de encontrar un camino más productivo en su vida, y desde entonces, el deporte le ha brindado una perspectiva diferente y disciplina para alcanzar sus metas. “El canotaje me hizo cambiar totalmente, me volvió más disciplinado, que llegara más temprano a los lugares, respetar más a las personas; me hizo cambiar mucho de mi vida”, expresó el estudiante.
El equipo de canotaje de la UNAM ha estado presente en el deporte durante cuatro décadas, y desde 2008, es liderado por Juan Carlos Rovalo, presidente de la Asociación de Canotaje de la UNAM y cirujano dentista de profesión.
Rovalo trabaja para ser un buen ejemplo para sus alumnos y los motiva a ser mejores deportistas y profesionales. “El deporte para mí es una parte fundamental de ellos, es el complemento de su educación, les da una formación, disciplina; tienen que superar sus metas y expectativas, las cuales les servirán en la vida”, explicó el entrenador.
La escuadra universitaria de esta disciplina es una de las más equipadas del país, y cuenta con las embarcaciones más modernas. El equipo de piragüismo puma se reúne de lunes a sábado en el Hangar 5 de la Pista de Remo y Canotaje Virgilio Uribe en Cuemanco, al sur de Ciudad de México, y ha formado una familia deportiva de 20 integrantes.
El canotaje es una de las 88 disciplinas deportivas que se imparten en la UNAM, y cualquier estudiante puede practicarla. Desde hace cuatro décadas, la disciplina se ha convertido en un semillero de medallistas y una fuente de orgullo para la universidad. El equipo de canotaje de la UNAM cuenta con los jóvenes más talentosos y comprometidos, quienes aspiran a representar a México en Juegos Olímpicos o Panamericanos.