Según datos registrador a través del estudio ‘Twins’ de la NASA, los viajes espaciales desatan de inmediato en los astronautas un proceso explosivo de activación y desactivación de genes.
“Algunas de las cosas más emocionantes que hemos visto al observar la expresión génica en el espacio es que realmente vemos una explosión, como si se tratase de fuegos artificiales, tan pronto como el cuerpo humano entra al espacio”, explica en un comunicado Chris Mason, investigador principal del estudio Twins en el Weill Cornell Medicine.
“Con este estudio, hemos visto miles y miles de genes cambiar la forma en que se encienden y apagan. Esto sucede tan pronto como un astronauta llega al espacio, y parte de la actividad persiste temporalmente al regresar a la Tierra”, añadió en relación al incremento descrito en este proceso, conocido como metilación.
Cuando el astronauta gemelo retirado Scott Kelly regresó a la Tierra en marzo de 2016, la investigación del estudio Twins se intensificó con la recolección de muestras de investigadores de él y su hermano gemelo, el astronauta retirado Mark Kelly. Los investigadores comenzaron a combinar los datos y revisar la enorme cantidad de información en busca de correlaciones.
“Este estudio representa uno de los puntos de vista más completos de la biología humana”, dijo Mason. “Realmente establece la base para comprender los riesgos moleculares de los viajes espaciales, así como las formas potenciales de protección y corregir esos cambios genéticos”.
Se espera que los resultados finales del Estudio Twins se publiquen en 2018.
NASA