Como un faro de conocimiento y salud en medio de la creciente ola de enfermedades relacionadas con la alimentación, la Facultad de Medicina de la UNAM se proyecta hacia el futuro. La licenciatura en Ciencia de la Nutrición Humana alberga un revolucionario espacio académico: el Laboratorio Cocina Metabólica. Aquí, los estudiantes de esta carrera se sumergen en la práctica de sus conocimientos adquiridos en el aula, puliendo sus habilidades para, una vez graduados, prescribir dietas adecuadas y supervisar servicios de alimentos.
Elvira Sandoval Bosch, coordinadora de la licenciatura, resalta la relevancia de este laboratorio para el crecimiento académico y profesional de los estudiantes. En él, tienen la oportunidad de diseñar y prescribir planes de alimentación específicos para tratar o prevenir diversas condiciones de salud, desde la obesidad y sobrepeso, hasta la malnutrición por deficiencia, el estreñimiento, la diabetes, la gastritis, la colitis y la esofagitis. Incluso, diseñan dietas para personas que requieren nutrición a través de sonda.
Sandoval Bosch nos invita a reevaluar la importancia de una alimentación y nutrición correctas en nuestra calidad de vida. “Estamos tan acostumbrados a vivir con gastritis, colitis y estreñimiento que no volteamos a ver que la alimentación y nutrición correctas contribuyen al estado de salud y son los mejores aliados para una mejor calidad de vida y disminuir el consumo de medicamentos”, apunta.
En el Laboratorio Cocina Metabólica de la UNAM, las y los estudiantes se adentran en la práctica vivencial de la dietoterapia. Con la disposición de elaborar y probar en sí mismos distintos planes alimentarios, buscan conocer de primera mano sus efectos. Esto implica analizar desde las cantidades hasta los colores, los sabores y las consistencias, características que todos consideramos al comer.
El reto de los alumnos es hacer propuestas adecuadas según las condiciones de salud específicas de cada individuo. “No es lo mismo plasmar una prescripción dietética en papel que traducirla a la preparación real de los alimentos. En este proceso, algunas preparaciones pueden resultar menos sabrosas o las porciones pueden ser excesivas o insuficientes”, comenta la académica universitaria.
De ahí la importancia de preparar y probar los planes alimenticios. Según Sandoval Bosch, esta experiencia “permitirá identificar problemáticas para que los pacientes puedan seguir con su tratamiento dietético-nutricional de manera adecuada; esa es una de las actividades que los estudiantes realizan durante el semestre”.
Pero este espacio no se limita a la dietética. También se convierte en un recurso invaluable para asignaturas como Química en Alimentos y Microbiología en Alimentos. Aquí, los estudiantes exploran aspectos como la industrialización de los alimentos, el papel de los aditivos y las estrategias utilizadas en la transformación industrial de estos. Asimismo, proponen productos alimenticios que podrían solventar problemas de salud y nutrición.
En este laboratorio, los alumnos de Química de Alimentos tienen la oportunidad de trabajar propuestas creativas para mejorar los hábitos alimentarios y elaborar productos más sostenibles y sustentables. En la asignatura de Microbiología de Alimentos identifican el papel de distintos microorganismos en la industria alimentaria, como en la panificación y la fermentación en la elaboración de diferentes productos.
Sandoval Bosch destaca que este laboratorio no es meramente técnico. También fomenta la innovación entre los estudiantes, permitiéndoles modificar recetas, como la del mole tradicional, para adecuarlas a las necesidades de cada paciente. “Nuestro aboratorio Cocina Metabólica es un espacio que permite el aprendizaje situado, significativo y colaborativo”, señala.
Además del laboratorio, la UNAM ha creado un espacio para brindar atención clínico-nutricional a la comunidad universitaria y a la sociedad en general, así como para realizar investigación. Ambos espacios se ubican en el sótano del edificio A de la Facultad de Medicina.
La universidad está preparando la apertura de talleres sobre alimentación saludable, inocuidad alimentaria, sustentabilidad alimentaria y gastronomía sustentable, dirigidos a la comunidad universitaria. Las fechas de inscripción se publicarán en la página de la licenciatura y en sus redes sociales.
Para más información, visitar:
- Página de la licenciatura: https://nutricion.facmed.unam.mx/
- Facebook: https://www.facebook.com/LCNH.FacMedUNAM
Ideas destacadas sobre la cocina metabólica
- La Facultad de Medicina de la UNAM, a través de su licenciatura en Ciencia de la Nutrición Humana, ofrece a sus estudiantes un espacio de aprendizaje práctico único: el Laboratorio Cocina Metabólica.
- En este laboratorio, los estudiantes adquieren habilidades esenciales para su futura profesión, como la creación y prescripción de planes alimenticios específicos para distintas condiciones de salud.
- La UNAM extiende su labor más allá de la enseñanza, al ofrecer un espacio que proporciona atención clínico-nutricional a la comunidad universitaria y a la sociedad en general.
- La académica universitaria, Elvira Sandoval Bosch, subraya la necesidad de reevaluar la importancia de una correcta alimentación y nutrición en la calidad de vida y la salud de las personas.
- El Laboratorio Cocina Metabólica también apoya a otras asignaturas, como Química en Alimentos y Microbiología en Alimentos, permitiendo a los estudiantes explorar diversos aspectos de la industria alimentaria.
- La UNAM está preparando la apertura de talleres sobre alimentación saludable, inocuidad alimentaria, sustentabilidad alimentaria y gastronomía sustentable, dirigidos a la comunidad universitaria.