La aclamada actriz y cantante británica, Jane Birkin, falleció este domingo a los 76 años en Francia, país donde desarrolló gran parte de su carrera artística. Birkin será recordada como un ícono pop femenino del siglo XX en la cultura francesa, junto a figuras como Brigitte Bardot y Françoise Hardy. Su legado está marcado por su emblemática interpretación en “Je t’aime… moi non plus” junto a su entonces pareja Serge Gainsbourg, una canción que se convirtió en un tratado de sensualidad y fue censurada por el Vaticano y la BBC.
Aunque Gainsbourg no escribió originalmente la canción para Birkin, fue su pasión y química en el set de la película “Slogan” lo que los unió en una apasionada historia de amor que duró 12 años. Birkin, nacida en Londres a finales de 1946, provenía de una familia burguesa y tenía un porte aristocrático. Su belleza y magnetismo la llevaron a protagonizar películas como “Blow-Up” en 1966 y “La piscina” en 1969, donde desató controversia por su desnudo frontal.
A pesar de su imagen sensual, Birkin no se limitó a ese estereotipo y desarrolló una exitosa carrera cinematográfica con más de 70 películas en su haber. Trabajó con reconocidos directores como Jean-Luc Godard, Bertrand Tavernier, Alain Resnais y Agnès Varda, entre otros. Además, mantuvo una relación cercana con Gainsbourg incluso después de su separación en 1980, y él le compuso un álbum completo en 1983 llamado “Baby alone in Babylone”. Birkin también dejó su marca en la música con álbumes propios y colaboraciones con artistas destacados.
En los últimos años, Birkin enfrentó desafíos de salud, incluyendo una leucemia y un derrame cerebral. A pesar de ello, continuó creando música y actuando. Su último álbum, “Oh!, pardon, tu dormais…” fue lanzado en diciembre de 2020.
La voz suave y delicada de Birkin, con su inconfundible acento francés, se convirtió en una de sus características más distintivas. A medida que envejecía, su enfoque artístico se tornó más introspectivo y nostálgico, reflejando su papel como abuela de cinco nietos. La trágica pérdida de su hija Kate en 2013 la afectó profundamente y se refleja en algunas de sus canciones más recientes.
El legado de Jane Birkin será recordado como una fusión única de talento, sensualidad y sensibilidad artística. Su impacto en la cultura francesa y su contribución al cine y la música perdurarán como un testimonio de su genialidad. Descanse en paz, Jane Birkin.