La situación del narcotráfico dista mucho de acabarse, por el contrario existe una lucha entre cárteles y bandas quienes se disputan las regiones y distribución, principalmente de la frontera con Estados Unidos, refiere René Jiménez Ornelas, del Instituto de Investigaciones Sociales, de la UNAM.
Estos puntos también sirven para la compra de armamento sofisticado, que muchas veces superan el equipo de los cuerpos policíacos, añade.
No sólo controlan el poder de esa región, sino que también buscan las rutas para transportar la droga. Así, existen enfrentamientos, agresiones, secuestrados e incluso extorsiones que generan ondas de violencia y perjudican a los ciudadanos, concluye.