En los últimos años, se han intensificado los esfuerzos para recuperar obras literarias escritas por mujeres que, por diversas razones, no habían sido reeditadas o incluso habían quedado en el olvido. Un ejemplo destacado de estas iniciativas es la colección Vindictas, cuyo principal objetivo es rescatar textos de autoras que han sido marginadas por la historia literaria.
“Donde crece la hierba” es una de estas obras recuperadas. Esta primera novela de Luisa Josefina Hernández (1928-2023), mejor conocida por su dramaturgia, fue publicada originalmente en 1959 por la Universidad Veracruzana.
La trama de la novela se centra en las vicisitudes de una joven mujer injustamente acusada de robo. Su esposo, en un intento de protegerla, la oculta en la casa de un amigo. Lo que comienza como un refugio, pronto se convierte en una prisión de otro tipo, donde los carceleros son el dueño de la casa y su propio esposo, quien la llevó allí con las mejores intenciones.
Atrapada en esta situación, la protagonista utiliza la escritura de cartas a Enrique, un antiguo amante, como una vía de escape. A través de estas cartas, que sabe que nunca serán enviadas, ella reflexiona sobre su vida y sus relaciones, revelando cómo los muros de su prisión están construidos con miedo, abandono, falta de amor y desesperación.
Según Liliana Pedroza en su libro “Historia secreta del cuento mexicano, 1910-2017”, tanto la crítica como la historiografía literaria han ignorado frecuentemente la obra de las escritoras. Esto ha generado un silencio, ya sea voluntario o involuntario, que nos ha llevado a creer que las mujeres escritoras eran escasas.
Después de 60 años de su primera publicación, la UNAM reeditó la novela en 2019 a través de su colección Vindictas, presentando “El lugar donde crece la hierba” a una nueva generación de lectores y reconociendo así a una de las escritoras más importantes de la segunda mitad del siglo XX.
Luisa Josefina Hernández fue autora de más de 70 obras dramáticas y recibió numerosos reconocimientos, incluyendo el Premio Nacional de Ciencias y Artes en Lingüística y Literatura. Además, tradujo obras de William Shakespeare, Bertolt Brecht y Arthur Miller. También se destacó como profesora en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, donde asumió la cátedra de Teoría Dramática de su maestro Rodolfo Usigli.
Es de destacar que Hernández fue la única mujer en el siglo pasado que alcanzó el título de profesora emérita en la FFyL, un honor que subraya su vasta influencia y su legado duradero.
Para leer el texto completo de “El lugar donde crece la hierba”, visita el siguiente enlace.