A través de la técnica de radiología digital, Óscar Carranza, investigador del Centro de Geociencias, plantel Juriquilla, de la UNAM, en conjunto con José Luis Velázquez, académico de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia, estudian elefantes prehistóricos.
Anteriormente Carranza había buscado otros métodos para identificar las mandíbulas de estos animales, pero ninguna había sido tan exacta como lo fue este método.
Así, al estudiar tres cráneos de diferentes ejemplares, (encontrados en Morelia, Jalisco, y Guanajuato) el paleontólogo descubrió que en México existió un proceso evolutivo de estos animales.
La finalidad, era encontrar los molares de estas especies y con ello identificar cómo evolucionaron. El más antiguo tiene aproximadamente cinco millones de años y los otros rondan por los tres millones y medio.