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Arranca temporada de la OFUNAM

  • Inicia Sylvain Gasançon como director titular para el periodo 2023-2025
  • El violinista Shlomo Mintz (Israel) abre temporada con el Concierto de Beethoven
  • Foco Francia, línea de programación presente a lo largo de la temporada, explora la música de este país, desde Berlioz hasta Messiaen y Grisey
  • El Festival Internacional de Piano 2023 convoca a Pierre-Laurent Aimard (Francia), Judith Jáuregui (España), Jorge Federico Osorio (México), Alberto Rosado (España) y Tamara Stefanovich (Serbia)
  • Estrenos mundiales de Georgina Derbez y Víctor Ibarra
  • Presencia de compositoras continúa con Boulanger, Chamizo, Finzi y Tailleferre
  • Venta de abonos en la taquilla de la Sala Nezahualcóyotl y en línea a través de boletoscultura.unam.mx

La Orquesta Filarmónica de la UNAM (OFUNAM) inicia el 2023 con un Foco Francia, mediante el cual invita al público a emprender un recorrido por parajes musicales fascinantes a lo largo de once pares de conciertos. Así como incluye a Berlioz, Debussy, Ravel y Messiaen, por lo que toca a autores franceses, la Primera Temporada 2023 contempla asimismo a autores como Beethoven, Mahler, Stravinski, Bartók y Revueltas, además de un par de estrenos mundiales.

En esta temporada la OFUNAM da la bienvenida a su nuevo director titular, el maestro Sylvain Gasançon, quien fue nombrado para el periodo 2023-2025. Nacido en Metz, Francia, estudió violín en su país natal y ofreció sus primeros conciertos a una edad muy temprana. Posteriormente se graduó del Conservatorio Real de Bruselas con Endre Kleve. Estudió dirección orquestal con Jean-Sébastien Béreau, Gerhard Markson, Gianluigi Gelmetti, Pinchas Zukerman y Jorma Panula. Comenzó su relación con la OFUNAM al ganar el Premio Internacional Eduardo Mata de Dirección de Orquesta en 2005.

El Foco Francia invita a una exploración del repertorio francés de los siglos XIX al XXI. Lo mismo presenta piezas tan familiares para el público como el Bolero de Ravel y La mer de Debussy que obras orquestales de Lili Boulanger, Ernest Chausson, Edgar Varèse, Germaine Tailleferre, César Franck y Graciane Finzi. Esta programación se enfoca en Debussy y Ravel pero la enmarcan dos monumentales sinfonías, que se ubican como pilares en el tiempo, a un extremo y otro del recorrido: la Sinfonía Fantástica de Berlioz, estrenada en 1830, y la Sinfonía Turangalîla de Messiaen, estrenada poco más de un siglo después, en 1949.

Como parte del Festival Internacional de Piano de Música UNAM la OFUNAM presenta 5 pianistas de diversos perfiles y procedencias en los programas 7 a 10. La pianista española Judith Jáuregui interpreta el Concierto para piano en sol mayor de Maurice Ravel, en el que el compositor francés incluye elementos de jazz que enriquecen la orquestación, una de las especialidades de Ravel. El pianista mexicano Jorge Federico Osorio ofrecerá el Concierto 4 para piano de Beethoven, que junto con los otros cuatro en el catálogo del compositor alemán revolucionó el género en su momento; en este caso, la obra comienza con un solo del piano en lugar de un tutti orquestal. El conjunto universitario realizará el estreno mundial de la obra de Georgina Derbez titulada De la alquimia el resplandor, con el pianista español Alberto Rosado, a quien está dedicada la partitura. El Concierto para dos pianos y percusiones de Béla Bartók será interpretado por los pianistas Pierre-Laurent Aimard y Tamara Stefanovich, junto con los percusionistas Iván Manzanilla y Miguel González. Los cinco pianistas mencionados, además de ser solistas con la OFUNAM, ofrecerán recitales individuales como parte del mismo Festival.

Diversos solistas acompañarán a la OFUNAM. En primer lugar, el violinista israelí nacido en Rusia Shlomo Mintz interpretará el Concierto para violín de Beethoven. La soprano Cecilia Eguiarte cantará el Poema de amor y del mar de Ernest Chausson. Rodrigo Garibay al saxofón y Roberto Zerquera al vibráfono participan en la música que John Williams compuso para la película Atrápame si puedes. Duane Cochran, pianista de la OFUNAM, y Nathalie Forget en las ondas Martenot ofrecen la Sinfonía Turangalîla de Messiaen. El Patronato y la Sociedad de Amigos de la OFUNAM patrocinan la participación de los maestros Shlomo Mintz y Pierre-Laurent Aimard.

En paralelo al nuevo director titular, la orquesta universitaria actuará bajo la batuta de Ludwig Carrasco, José Luis Castillo, Julia Cruz, Enrique Diemecke, Catherine Larsen-Maguire, Iván López Reynoso y Rodrigo Macías.

Además de las directoras y solistas invitadas, la presencia de las mujeres se hará patente con obras de Lili Boulanger (hermana de la reconocida pedagoga Nadia Boulanger), Germaine Tailleferre (integrante del grupo de Los Seis), Andrea Chamizo (ex becaria de la Cátedra Márquez), Georgina Derbez y Graciane Finzi.

La temporada está programada del sábado 14 de enero al domingo 2 de abril. Los conciertos se realizarán los sábados a las 8 pm y los domingos a las 12 pm, en la Sala Nezahualcóyotl del Centro Cultural Universitario. El costo de los boletos será de $240, $160 y $100 pesos, disponibles en la taquilla de la Sala y en línea, en la página boletoscultura.unam.mx

Para más información consulte la Guía del público y venta de boletos:

https://musica.unam.mx/venta-de-boletos

Las transmisiones dominicales y en vivo podrán seguirse a través del sitio web de Música UNAM, TV UNAM y Radio UNAM.

Programas

Programa 1: sábado 14 y domingo 15 de enero. Sylvain Gasançon, director titular; Shlomo Mintz, violín. El concierto inaugural de la temporada marca la presentación de Gasançon como director titular de la OFUNAM. Después del Concierto para violín de Beethoven, que tiene como aspecto sobresaliente la vuelta de Mintz a nuestro país, el público escuchará D’un matin de printemps de Lili Boulanger (parte de un díptico con D’un soir triste, obra incluida en el último programa de la temporada), Chapultepec de Manuel M. Ponce y La mer de Claude Debussy.

Programa 2: sábado 21 y domingo 22 de enero. Sylvain Gasançon, director titular; Cecilia Eguiarte, soprano. Este programa comienza con after op. 92 de Víctor Ibarra, obra comisionada por la OFUNAM para conmemorar los 250 años del nacimiento de Beethoven e inspirada en su Séptima sinfonía, cuyo estreno mundial se pospuso a causa de la pandemia. Enseguida se presenta Poème d’amour et de la mer de Ernest Chausson y la Sinfonía fantástica de Hector Berlioz.

Programa 3: sábado 28 y domingo 29 de enero. José Luis Castillo, director huésped. Este programa es un exploración del modernismo desencadenado por el estreno de La consagración de la primavera de Stravinski. El programa comienza con dos obras que son consecuencia de dicho ballet, una francesa y otra mexicana: Arcana de Edgard Varèse y Sensemayá de Silvestre Revueltas.

Programa 4: sábado 4 y domingo 5 de febrero. Catherine Larsen-Maguire, directora huésped. Programa que invita a relacionar y contrastar a Debussy y Ravel mediante la interpretación de un par de obras de cada uno, que en ambos casos alternan entre lo más y lo menos familiar: Preludio a la siesta de un fauno y Jeux del primero, el celebérrimo Bolero y la Rapsodia española del segundo. Como fiel de la balanza, una pequeña pieza de Germaine Tailleferre, única compositora integrante el grupo francés de Los Seis.

Programa 5: sábado 11 y domingo 12 de febrero. Iván López Reynoso, director huésped; Rodrigo Garibay, saxofón; Roberto Zerquera, vibráfono. La primera obra de este concierto, Sigue siendo arena, fue compuesta por Andrea Chamizo cuando fue becaria de la Cátedra Extraordinaria Arturo Márquez de Composición Musical en 2018. Después se presenta Escapades, música de John Williams incluida en la película Atrápame si puedes. Sigue la Sinfonía Pelléas et Mélisande, arreglo de Marius Constant sobre la música de esa ópera de Debussy, y finalmente el homenaje que hizo Ravel a Johann Strauss II a través de La valse.

Programa 6: sábado 18 y domingo 19 de febrero. Sylvain Gasançon, director titular; Duane Cochran, piano; Nathalie Forget, ondas Martenot. Olivier Messiaen es uno de los compositores más originales del siglo XX; en su música se encuentran influencias de otras culturas, pero también incorpora el canto de muchas aves —en algunas partituras incluso llegó a señalar las especies cuyo canto estaba representado— como en la Sinfonía Turangalîla. La música de Messiaen refleja su profunda fe católica, como se puede apreciar en títulos como Veinte miradas sobre el niño Jesús, La transfiguración de nuestro señor Jesucristo y otros más; sin embargo, en su catálogo casi no hay obras litúrgicas en el sentido tradicional. Para este programa, además de los conciertos, se ofrece un ensayo abierto seguido de una charla con José María Álvarez, el sábado 18 de febrero a las 10 am.

Programa 7: sábado 25 y domingo 26 de febrero. Enrique Diemecke, director huésped; Judith Jáuregui, piano. Con este programa inicia la participación de la OFUNAM en el Festival internacional de piano. En su Concierto para piano en sol, Ravel incorpora elementos del jazz que por aquel entonces era una novedad un tanto exótica en Europa. Si bien buscaba crear una obra ligera, alejada de las profundidades dramáticas de los conciertos del romanticismo, el segundo movimiento es considerado una de las piezas más melancólicas en todo el repertorio. El programa concluye con la Sinfonía núm. 1 de Gustav Mahler en la versión de 1888, que incluía cinco movimientos. En una revisión posterior Mahler eliminó el segundo movimiento, Blumine, que se perdió hasta su redescubrimiento en 1966.

Programa 8: sábado 4 y domingo 5 de marzo. Rodrigo Macías, director huésped; Jorge Federico Osorio, piano. Como su nombre sugiere, El descendimiento de la cruz según Rembrandt de Ramón Montes de Oca alude a un cuadro de ese pintor holandés y se trata de un lamento musical. Después de esta obra, se interpreta el Concierto para piano 4 de Beethoven, seguido de la única sinfonía del compositor francobelga César Franck, estrenada en 1889.

Programa 9: sábado 11 y domingo 12 de marzo. Julia Cruz, directora huésped; Alberto Rosado, piano. Además de ser parte del Festival internacional de piano, este concierto —único en la temporada que no forma parte del Foco Francia— se inserta en las Jornadas de mujeres en la música. De la alquimia al resplandor, obra de Georgina Derbez que se estrenará en este programa, está inspirada en una serie fotográfica de Gerardo Montiel titulada Finlandia, no para evocar al país nórdico sino al significado del término que corresponde a “fin de la tierra”. Como complemento, se interpretará la Sinfonía núm. 9 Del Nuevo Mundo de Antonín Dvořák. El sábado 11 a las 10 am habrá un ensayo abierto con la participación de José María Álvarez.

Programa 10: sábado 18 y domingo 19 de marzo. Ludwig Carrasco, director huésped; Pierre-Laurent Aimard y Tamara Stefanovich, pianos; Iván Manzanilla y Miguel González, percusiones. Escrita originalmente como una sonata, el Concierto para dos pianos y percusiones de Béla Bartók fue interpretado en 1943 con el compositor y su esposa como solistas, en la que sería la última actuación al piano del autor. La OFUNAM también interpretará la Obertura para una sinfonía de la compositora francesa Graciane Finzi y la Sinfonía núm. 9 de Dimitri Shostakóvich.

Programa 11: sábado 1 y domingo 2 de abril. Sylvain Gasançon, director titular. Con el último programa de la temporada se cierra el díptico que forman D’un soir triste y D’un matin de printemps (interpretada en el programa 1) de Lili Boulanger; se estrena en México Transitoires de Gérard Grisey, y se concluye con la Sinfonía núm. 7 de Beethoven, una de las más populares de las nueve que compuso. También en este programa la OFUNAM ofrece un ensayo abierto el sábado 1 de abril a las 10 am con la presencia de José María Álvarez.

Una aventura francesa

La música de Debussy y Ravel está en el corazón de este Foco Francia, con el que la OFUNAM invita al público a emprender, en este inicio del 2023, un recorrido por parajes musicales fascinantes, muchos de ellos sin duda familiares pero otros tantos quizá menos conocidos. A partir de ese corazón, de ese núcleo musical, a la manera de un rizoma que crece hacia abajo pero también hacia arriba, se enarbola una temporada que incluye antecedentes y momentos previos al llamado Impresionismo, además de consecuencias y etapas posteriores. Y que ofrece, en su conjunto, una panorámica nunca completa (faena imposible en tres meses) pero sí nutrida y sugerente de la creatividad musical francesa.

¿Por qué Francia? Porque a pesar de ser una potencia musical y cultural, sus aportaciones resultan quizá algo menos visibles para el público de conciertos que, por ejemplo, la música clásica germánica o la rusa, y bien vale la pena equilibrar un poco esta balanza. Asimismo, porque el trabajo interpretativo que requiere la música francesa precisa un cajón de herramientas musicales y una atención sonora que le son particulares y a las que resulta conveniente, desde la perspectiva del trabajo orquestal, dedicarles una temporada. También porque, cuando lleguemos a inicios de abril, la aventura promete haber sido apasionante y reveladora. Y porque, tras dos años sin director titular, la OFUNAM recibe en enero de 2023 a Sylvain Gasançon y este foco es tanto una señal de reconocimiento como una bienvenida.

Dos sinfonías monumentales se sitúan como imponentes pilares a un extremo y otro de la temporada, cual columnas que la sostienen en el tiempo: la Fantástica de Berlioz, estrenada en 1830, y la Turangalîla de Messiaen, estrenada poco más de un siglo después, en 1949. En el medio, Debussy y Ravel, como decíamos: desde los clásicos, entre ellos el Preludio a la siesta de un fauno, La mer y el Bolero, hasta la música de Jeux, “poema danzado” escrito por Debussy para los Ballets rusos, la célebre compañía que fue semillero de tantas obras señeras a inicios del siglo XX. Una de ellas, La consagración de la primavera de Stravinski, sin duda la más conocida entre las comisiones de Diaghilev, es el motor de un programa que traza el impulso modernista desde la ritualidad atávica de la primavera rusa hasta las elucubraciones alquímicas de la Arcana de Varèse y el encantamiento de la serpiente de nuestra propia Sensemayá. Para completar la excursión francesa están Franck y Roussel pero también Boulanger y Tailleferre, única mujer integrante del Grupo de los Seis. Y dos obras más recientes, la estupenda Transitoires del espectralista Grisey y la Obertura para una sinfonía de Finzi, recién estrenada en 2020.

Como ha sucedido con la OFUNAM de manera regular en los últimos tiempos, esta temporada busca visibilizar el trabajo de mujeres compositoras (lo cual se advierte con algunos de los nombres mencionados: Boulanger, Tailleferre, Finzi) y también, en paralelo, seguir presentando nueva música mexicana. Ambos propósitos se conjugan con el estreno mundial del nuevo concierto de la compositora mexicana Georgina Derbez, propuesta de nuestro Festival de piano que incluye también a Bartók, Beethoven y Ravel y que cuenta con intérpretes como Pierre-Laurent Aimard, Judtih Jáuregui, Jorge Federico Osorio, Alberto Rosado y Tamara Stefanovich.

A manera de cierre, una prenda de los focos que convivirán en la segunda temporada 2023, ambos en conmemoración de años de nacimiento: Serguéi Rajmáninov (150 aniversario) y György Ligeti (100 aniversario). Y una cita del tintero de Debussy, tan prolífico en su personaje de Monsieur Croche: “Algunas personas desean sobre todo respetar las reglas; yo solo quiero plasmar lo que logro escuchar. No hay teoría. Sólo tienes que escuchar. El placer es la ley”.

SEMBLANZAS

Sylvain Gasançon

Nacido en Metz, Francia, estudió violín en su país natal y ofreció sus primeros conciertos a una edad muy temprana. Posteriormente se graduó del Conservatorio Real de Bruselas con Endre Kleve. Estudió dirección orquestal con Jean-Sébastien Béreau, Gerhard Markson, Gianluigi Gelmetti, Pinchas Zukerman y Jorma Panula. Comenzó su relación con la OFUNAM al ganar el Premio Internacional Eduardo Mata de Dirección de Orquesta en 2005.

Béla Bartók

El compositor húngaro Béla Bartók (1881-1945) es conocido por el uso que hizo del piano como instrumento de percusión, además de su labor de investigación y difusión de la música folcórica húngara, rumana y eslovaca, misma que ejerció una profunda influencia en su catálogo. Originario de Nagyszentmiklós en Hungría (actualmente Sînnicolau Mare en Rumania), su interés en la música popular se despertó desde su infancia, y para cuando tenía 4 años, ya tocaba alrededor de 40 canciones populares al piano. Además de compositor, desarrolló una carrera como pianista, que continuó después de mudarse a Estados Unidos en 1940.

Ludwig van Beethoven

Originario de Bonn, Ludwig van Beethoven (1770-1827) es uno de los compositores más influyentes en la música occidental. Su obra redefinió la sonata, el concierto, el cuarteto de cuerdas y la sinfonía. A los 22 años de edad se mudó a Viena donde vivió y trabajó el resto de su vida, aunque también viajó a Londres y otras ciudades de Europa. Su catálogo, no tan extenso como el de su maestro Joseph Haydn, marca la transición del Clacisismo vienés al Romanticismo.

Hector Berlioz

Hector Berlioz (1803-1869) nació en La Côte-Saint-André en Francia. Sus sinfonías solían estar relacionadas con un programa o narración, a diferencia del modelo germánico que se basaba únicamente en un discurso musical. De ahí que en lugar de estar numeradas como el caso de Beethoven o Brahms, tienen títulos como Sinfonía fantástica, Haroldo en Italia, Romeo y Julieta y Sinfonía fúnebre y triunfal. Además, expandió a la orquesta para incluir instrumentos que era más común encontrar en la ópera, como arpa o campanas.

Lili Boulanger

Las hermanas Nadia y Lili Boulanger tuvieron una influencia importante en la música de principio del siglo XX. El talento de Lili fue reconocido a muy temprana edad, pero debido a que tenía la salud muy frágil, recibió lecciones privadas en lugar de acudir al conservatorio. A los 20 años ganó el Premio de Roma, gracias al cual estuvo una temporada en la Villa Medici de la capital italiana, pero con el estallido de la Primera Guerra Mundial tuvo que recortar su estancia. Hacia el final de su vida comenzó a experimentar con politonalidad. Lili Boulanger nació en París en 1893 y murió en Mézy en 1918, sin siquiera haber alcanzado los 25 años de edad.

Andrea Chamizo

La joven compositora Andrea Chamizo (1988) fue becaria de la Cátedra Extraordinaria Arturo Márquez de Composición Musical, gracias a la cual pudo crear varias obras bajo la guía de dicho compositor mexicano, como es el caso de su primer trabajo orquestal, Sigue siendo arena, realizado en 2018 y estrenado al año siguiente por la Orquesta Juvenil Universitaria Eduardo Mata. Entre sus maestros se encuentran María Antonieta Lozano, Víctor Rasgado y José Julio Díaz Infante. Su música ha sido interpretada en México, Canadá, Gales y Ucrania, entre otros países.

Ernest Chausson

Si bien estudió derecho, al obtener su título profesional Ernest Chausson (1855-1899) prefirió dedicarse a su verdadera vocación: la música. Fue alumno de Jules Massenet y César Franck, y tuvo influencia de Wagner en técnicas armónicas, de orquestación y el uso del Leitmotiv. Su catálogo incluye ópera, obras vocales con acompañamiento orquestal, música de cámara, sacra y canciones de concierto.

Claude Debussy

La obra de Claude Debussy (1862-1918) representa un rompimiento con la tradición germánica, particularmente la influencia de Wagner, y la búsqueda de una nueva identidad para la música francesa. En 1884 ganó el Premio de Roma que otorga el gobierno francés a estudiantes de arte para que realicen una estancia en la Villa Medici de la capital italiana. Compuso varias óperas, música sinfónica, de cámara, canciones de concierto y numerosas piezas para piano.

Georgina Derbez

Georgina Derbez (1968) estudió piano con Marta García Renart y Ana María Tradatti y composición con Arturo Márquez y Ana Lara. Su catálogo comprende obras para solos, dúos, tríos, cuarteto de cuerdas, ensambles de cámara y orquesta sinfónica. Algunas de sus obras más representativas son su concierto para clarinete Ascenso al Celeste (2018), el Concierto para flauta, piano y orquesta (2012), su ópera de cámara La creciente (2015) e Intangible Self (2014), por mencionar sólo algunas.

Antonín Dvořák

Antonín Dvořák (1841-1904) nació en Nelahozeves, hijo de un carnicero y posadero que muy pronto reconoció el talento musical de su hijo mayor, por lo que a los 12 años Dvořák fue enviado a otro pueblo a estudiar alemán y música. Posteriormente estudió órgano en Praga, ciudad donde tocaba la viola en una orquesta, lo que amplió su panorama musical. Al solicitar una beca, Brahms, uno de los integrantes del jurado, descubrió su música y se convirtió en su impulsor y con el tiempo forjaron una amistad duradera. En 1891, Dvořák fue invitado a presidir el Conservatorio Nacional de Música de Estados Unidos en Nueva York. Fue durante su estancia en América que compuso una de sus obras más conocidas, la Sinfonía núm. 9 Del Nuevo Mundo.

Graciane Finzi

La compositora francesa Graciane Finzi nació en 1945, donde comenzó su formación musical a instancias de sus padres, quienes eran maestros del Conservatorio de Casablanca, su ciudad natal. Posteriormente ingresó al Conservatorio Nacional Superior de Música y Danza de París donde se graduó con honores. Su catálogo incluye música para instrumentos solistas, para ensambles de cámara, orquesta sinfónica, así como cinco óperas y diversas piezas infantiles y pedagógicas.

César Franck

Originario de Liega, César Franck (1822-1890) comenzó su formación musical en el Conservatorio de esa ciudad. Fue organista en varios templos, entre los que destaca la recién construida catedral de Santa Clotilde en París desde que se instaló el primer órgano en 1859. Su catálogo incluye música sacra, de cámara, para piano, órgano y una sinfonía.

Gérard Grisey

Originario de Belfort en Francia, Gérard Grisey (1946-1998) estudió en los conservatorios de Trossingen (Alemania) y de París. Entre sus maestros destacan Messiaen, Dutilleux, Ligeti, Stockhausen y Xenakis. Ha impartido clases en la Universidad de California, el Conservatorio Nacional Superior de Música de París y otras instituciones en Francia, Alemania, Italia, Noruega, Suecia, Finlandia, Estados Unidos, Inglaterra, Rusia, España y otros países. Su catálogo incluye Tempus ex machina, Les chants de l’amour, Talea, Le temps et l’ecume, Le noir de l’etoile, L’icône paradoxale y el ciclo Les espaces acoustiques, del cual Transitoires se estrena en México en esta temporada de la OFUNAM.

Víctor Ibarra

El compositor Víctor Ibarra, nacido en Guadalajara en 1978, compuso after Op. 92 por encargo de la Orquesta Filarmónica de la UNAM para conmemorar los 250 años del nacimiento de Beethoven en 2020, pero debido al confinamiento causado por la pandemia no había sido posible estrenar la obra. El nombre alude a la Sinfonía núm. 7 de Beethoven cuyo número de catálogo es Opus 92. La música de Ibarra se caracteriza por el uso de la microtonalidad y una cuidadosa estructura armónica, acentuadas por el ritmo.

Gustav Mahler

Como lo hicieran Beethoven y Berlioz en generaciones anteriores, Gustav Mahler (1860-1911) expandió tanto la orquesta como la forma sinfónica y ejerció una influencia duradera en compositores posteriores. Diez sinfonías, una de ellas inconclusa, algunos ciclos de canciones y una obra que a veces se describe como sinfonía y a veces como ciclo —La canción de la Tierra— bastaron para dejar una de las huellas más poderosas en la música occidental del siglo XX.

Olivier Messiaen

Compositor, organista, maestro y autodenominado ornitólogo, Olivier Messiaen (1908-1992) comenzó su formación musical de manera autodidacta. Participó en la Segunda Guerra Mundial y en 1940 fue capturado y enviado a un campo para prisioneros de guerra, donde compuso el Cuarteto para el final de los tiempos para violín, violonchelo, clarinete y piano, los instrumentos disponibles en la prisión y con los que se estrenó ante presos y custodios. Entre sus alumnos destacan Iannis Xenakis, Pierre Boulez, Karlheinz Stockhausen.

Ramón Montes de Oca

El compositor mexicano Ramón Montes de Oca (1953-2006) es egresado de la Universidad Estatal de Oregon del Sur y participó en el Taller de Composición del Conservatorio Nacional de México bajo la guía de Mario Lavista. Fue director de la Escuela de Música de la Universidad de Guanajuato, donde vivió los últimos años de su vida. En un trayecto a la Ciudad de México tuvo un infarto mientras manejaba y murió el 11 de noviembre de 2006, poco menos de un mes después del estreno de su última obra, Ecos del llano.

Manuel M. Ponce

Manuel María Ponce (1882-1948), nació en Fresnillo, Zacatecas. Realizó estudios musicales en Aguascalientes y en la Ciudad de México. Es uno de los compositores que desarrollaron el Nacionalismo musical en nuestro país, aunque en sus obras también se pueden encontrar influencias del Romanticismo, el Impresionismo y posteriormente adoptó un estilo más propio del siglo XX. Impartió clases en el Conservatorio Nacional de Música y entre 1917 y 1919 dirigió la Orquesta Sinfónica Nacional.

Maurice Ravel

En la música de Maurice Ravel (1875-1937), uno de los más importantes compositores franceses, hay una notable influencia española, debida en buena medida al origen vasco de su madre. Títulos como Rapsodia española, Habanera y el Bolero (sin duda su oobra más famosa) dan cuenta de la cercanía que sentía por España. Asimismo, es posible encontrar influencias de jazz en algunas de sus obras. Es junto con Claude Debussy el representante más notable del Impresionismo.

Silvestre Revueltas

Aunque Silvestre Revueltas (1899-1940), el hermano mayor de una de las más notables familias artísticas de nuestro país, es uno de los compositores nacionalistas más reconocidos, en muy raras ocasiones usaba melodías populares, y sin embargo, su música es inconfundiblemente mexicana. Su catálogo incluye obras de cámara, para orquesta sinfónica, ballets y música para cine. Como dato curioso, cuando en 1913 ingresó al Conservatorio Nacional de Música su maestro de violín fue José Rocabruna, quien sería uno de los directores fundadores de la Orquesta Sinfónica de la Universidad, actualmente la OFUNAM.

Dimitri Shostakóvich

Nacido en San Petersburgo, Dimitri Shostakóvich (1906-1975) fue uno de los compositores rusos más reconocidos del siglo XX. Creó numerosas partituras para cine, música de cámara entre la que destacan sus cuartetos de cuerdas, algunas óperas, pero lo más importante de su producción son sus sinfonías. Muchas de sus obras están relacionadas con eventos históricos relevantes de su época y como el compositor más prominente de su generación, su relación con el poder siempre estuvo cargada del riesgo que se cernía sobre los artistas, científicos e intelectuales de la Unión Soviética, particularmente durante el régimen de Stalin.

Ígor Stravinski

Si hubiera que nombrar al compositor más importante del siglo XX, Ígor Stravinski (1882-1971) sería uno de los posibles candidatos. En algunas de sus primeras obras se puede identificar la influencia de románticos nacionalistas como Rimsky-Korsakov o Mussorgski, hasta que revolucionó completamente la música con su ballet La consagración de la primavera, en la que el ritmo toma preeminencia sobre la melodía y la armonía. Con el tiempo, su música exploraría otros estilos, como un retorno a la elegancia clásica presente en Pulcinella o Apollon musagette.

Germaine Tailleferre

Germaine Tailleferre (1892-1983) ingresó al Conservatorio de París, a pesar de la oposición de su padre. Ganó diversos premios como pianista. Formó parte del grupo de Los Seis, junto con los compositores Georges Auric, Louis Durey, Arthur Honneger, Darius Milhaud y Francis Poulenc, además del escritor Jean Cocteau. Su catálogo incluye música sinfónica, concertante, de cámara, ópera y ballet, además de música para cine.

Edgard Varèse

Aunque nació y creció en París, Edgard Varèse (1883-1965) también vivió en Berlín y Nueva York. A lo largo del tiempo se mantuvo en contacto con algunos de los artistas más vanguardistas de su época. Incorporó elementos de la vida urbana moderna a su música a través de grabaciones, e hizo uso de instrumentos electrónicos de reciente creación como las ondas Martenot y el theremin.

John Williams

Especialista en música para cine, John Williams (1932) es particularmente conocido por las bandas sonoras de las películas dirigidas y producidas por Steven Spielberg y George Lucas. De manera abierta reconoce la influencia de autores como Edward Elgar y Erich Wolfgang Korngold. Tiene una habilidad particular para reforzar la narrativa de las películas con temas que representan personajes o situaciones específicos, a la manera del Leitmotiv de Wagner o la idée fixe de Berlioz.

Consulte o descargue el programa general de la Primera temporada 2023 desde el siguiente enlace: https://qrs.ly/yseg5gr