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Antiguos meteoritos arrojan luz sobre los primeros sistemas solares

El origen de la materia orgánica encontrada en los meteoritos que se formaron durante el nacimiento del Sistema Solar hace cuatro mil 500 millones de años, proporcionan información clave para comprender el nacimiento de la vida en la Tierra y de la posible habitabilidad de otros sistemas solares.
Usando muestras del Muséum National d’Histoire Naturelle en París, un equipo científico dirigido por la Universidad de Manchester pasó dos años midiendo e interpretando, con precisión, la composición de isótopos de oxígeno de los orgánicos en algunos meteoritos.

Los resultados de la investigación se publicaron en le revista “Procedimientos de la Academia Nacional de Ciencias de los Estados Unidos de América”, y se dieron a conocer también en un comunicado de dicha universidad.

El estudio constituye el primer análisis de isótopos de oxígeno de alta precisión de compuestos orgánicos de las “condrita” carbonáceos. Los estudios anteriores se centraron principalmente en otros dos componentes fundamentales de la vida, abundantes en compuestos orgánicos: hidrógeno y nitrógeno.

El oxígeno tiene una ventaja crucial sobre otros elementos, como el hidrógeno y el nitrógeno, ya que es bastante abundante en estos meteoritos, que comprende de 10 a 20 por ciento de compuestos orgánicos de condrita. Lo más importante es que está hecho de tres isótopos estables diferentes, mientras que el hidrógeno y el nitrógeno sólo tienen dos variedades estables de isótopos.

Al tener tres isótopos estables, el oxígeno ofrece un nivel extra de información en comparación con los elementos con dos isótopos estables, como el hidrógeno y el nitrógeno, que proporcionan pistas fundamentales para restringir aún más el origen de los compuestos condríticos.

“El patrón de isótopos de oxígeno fue similar a la relación que une la composición del Sol, los asteroides y los planetas terrestres. Por lo tanto, esto probablemente implica que los compuestos de condritas carbonáceas se formaron a través de reacciones químicas en el Sistema Solar temprano, en lugar de haber sido heredados del medio interestelar”, explicó Romain Tartèse, de la Escuela de Ciencias de la Tierra y del Medio Ambiente de la Universidad de Manchester.

El experto es quien coordina el trabajo de investigación en el que analizan la composición isotópica del oxígeno en los materiales orgánicos, los cuales se encuentran en los meteoritos que se originaron a partir de asteorides condríticos, que son tan antiguos como el Sistema Solar.

El análisis isotópico proporciona a los científicos “la firma isotópica” de un compuesto, que actúa como una huella digital de los procesos implicados en su formación.

De acuerdo a los científicos, en este nuevo estudio se confirmó que los materiales orgánicos acumulados en asteroides denominados “condríticos”, probablemente se formaron a través de reacciones químicas durante la “etapa infantil” del Sistema Solar.

Con este trabajo, el equipo ayuda a identificar los orígenes de los materiales orgánicos contenidos en los meteoritos, que se componen de los elementos clave necesarios para la vida, como el carbono, el hidrógeno, el oxígeno, el nitrógeno y el azufre.

Los hallazgos sugieren que si los materiales orgánicos pueden formarse por procesos químicos básicos que operan en nuestro Sistema Solar, existe la posibilidad de que estén diseminados en otros sistemas planetarios.

Las denominadas condritas carbonáceas están hechas de los primeros materiales sólidos, como rocas, orgánicos, hielo de agua y polvo de grano fino, formados en el Sistema Solar. Cuando se encuentran en la Tierra y se analizan en detalle, actúan como cápsulas del tiempo para comprender cómo se formaron y evolucionaron los planetas durante miles de millones de años.

“Los condritos son una instantánea del sistema solar primitivo, que proporciona información clave sobre cómo se formaron y se procesaron los protoplanetas y los planetas”, afirmó el científico Tartèse.