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Andy Ruiz y Alexa Moreno: cuando los campeones rompen los moldes

La gimnasta Alexa Moreno y el boxeador Andy Ruiz son dos campeones extraordinarios. Los une un denominador común: sus características morfológicas fueron cuestionadas por la opinión pública porque suponían limitaciones de los deportistas.

Aun así, la gimnasta fue reconocida con el Premio Nacional del Deporte 2019, y el púgil entró a la historia del boxeo mundial como el primer mexicano en conseguir un campeonato mundial en los pesos pesados.

Una explicación a esta aparente contradicción se encuentra en la Medicina del Deporte, especialidad de la ciencia médica encargada de analizar las capacidades del cuerpo humano.

De acuerdo con la especialista en Medicina del Deporte Irma Pérez Domínguez, responsable del Laboratorio de Antropometría de la Dirección General del Deporte Universitario de la UNAM, para definir los somatotipos es pertinente determinar las características físicas de las personas: ectomórfia, endomórfia y mesomórfia (gente delgada, obesa o musculosa).

Tal condición de una persona no es suficiente para decidir sus capacidades atléticas por lo que debe realizarse una Evaluación Morfo-funcional. En la parte morfológica se determina entre otras cosas la composición corporal: conocer los porcentajes de grasa, músculo y estructura ósea de un cuerpo. “Con base en esos resultados se puede orientar a las personas a ejercitarse en alguna disciplina deportiva. La antropometría es una herramienta que auxilia a la antropología física, encargada del estudio del hombre a partir de su estructura física”.

Además de otros sistemas –como el nervioso, el cardiovascular, el endócrino y otros– así como la mente, el cuerpo de todas las personas poseen tres componentes modificables por su régimen nutricional y actividad física: grasa, músculo y óseo. Añadió la especialista, “mismos que varían durante el transcurso de la vida. Por consiguiente no se habla de un ideal sino de un recomendable por edad, género y, en el caso del deporte, la disciplina que se practique”.

Por cierto, esta misma recomendación aplica en el ámbito laboral. “Independientemente del trabajo que desempeñe un individuo, requiere de un tipo de cuerpo, ya que de esa manera se adquiere una adecuada salud. De manera que la composición corporal es vital para aspirar a una salud de calidad”.

El cuerpo atlético

Para practicar cualquier deporte, consideró la doctora Pérez, es necesario conocer dos aspectos del cuerpo: el morfológico y el funcional. Con el primero se selecciona a un deportista por su somatotipo (mal llamado estereotipo): alto para un basquetbolista o delgada y menuda para una gimnasta. El segundo permite conocer las capacidades funcionales, “para rendir y ser campeón de medalla, que es a lo que se aspira, deben potencializarse ambas”.

Además, “la eficiencia del gesto motor (técnica deportiva) depende del deporte en cuestión. Por ejemplo, el cuerpo de un lanzador de jabalina, normalmente se requiere que sea más espigado, musculoso y que no sea tan pesado. En cambio, un lanzador de martillo puede ser más robusto pero sin exceso de grasa; aunque se le puede permitir un porcentaje mayor debido a que su biomecánica es totalmente diferente”.

Aptitudes vs desventajas antropométricas

Pese a las aparentes barreras físicas, muchos deportistas alcanzan a destacarse, como Alexa Moreno y Andy Ruiz se alzan con triunfos y campeonatos. En la perspectiva de la académica la evaluación médica (funcional y morfológica) adquiere un peso específico.

“Puede haber una chica que tal vez físicamente no se vea dentro del somatotipo de las gimnastas, pero desarrolla sus cualidades de elasticidad y coordinación; o bien una persona que no tiene un cuerpo atlético pero posee una condición cardiovascular muy eficiente, finalmente será un ganador si el deporte que practica demanda altamente este aspecto. Es el conjunto de todos los aspectos lo que determina a un campeón”.

Ciencia y experiencia

Con años de experiencia en el estudio de las condiciones morfológicas deportivas, la doctora Pérez Domínguez, responde optimista a la siguiente interrogante: ¿En qué disciplina pueden ser campeones los mexicanos? “En la que quieran practicar. Hace años en la Comisión Nacional del Deporte (Conade), se crearon los Centros de Alto Rendimiento en base a estudios metodológicos y respetando las seis regiones socio-políticas del país. Ahí se entrenaba la marcha, el boxeo, béisbol y velocidad en atletismo, en las que ha habido campeones, lo que demuestra que los deportistas mexicanos pueden”.

“Sucede que hay un rezago en educación física. Los niños terminan los niveles de preescolar y educación primaria y no saben ejecutar los movimientos básicos: lanzar, correr y saltar. Al llegar a la Prepa hay que enseñarles esas habilidades, cuando debieron haberlas adquirido a edades tempranas. Falta un programa sistematizado de educación física que nos lleve al deporte de alto rendimiento”.

Alexa Jiménez y Andy Ruiz, son y seguirán siendo ganadores por su propio trabajo y esfuerzo, continuó la facultativa. “Con toda seguridad, los apoya un grupo multidisciplinario, algo decisivo para un atleta. Deben estar bajo el cuidado de entrenadores capaces y un adecuado seguimiento para pasar de una etapa a otra, hasta consolidarse como un campeón: estrategia, técnica y dirección, en suma un equipo multidisciplinario, vital para cualquier atleta”.

“Los ‘garbanzos de a libra’ son, como se le quiera ver, el resultado de un proceso de trabajo sistemático, no aparecen por generación espontánea”.

Finalmente, “los dos ejemplos de los campeones que comentamos son buenos porque quiere decir que todos los mexicanos podemos ser campeones…otra cosa es que todos queramos”, concluyó.