Investigadores de la Universidad Técnica de Dinamarca (DTU), la Universidad de Cambridge (IONTAS) y la Universidad de Costa Rica, han descifrado el código para producir antivenenos de mordedura de serpiente basados en anticuerpos humanos.
Los antivenenos basados en anticuerpos humanos tienen el potencial de mejorar considerablemente la calidad del tratamiento de envenenamiento por mordedura de serpiente, evitando los efectos secundarios graves y, en casos raros, letales que pueden causar los antivenenos actuales basados en anticuerpos de caballos.
El antiveneno experimental se ha desarrollado contra las dendrotoxinas de la serpiente venenosa más temida del mundo, la mamba negra, que se puede encontrar en África. Los experimentos y los hallazgos se publicaron recientemente en la revista Nature Communications.
Andreas Hougaard Laustsen, profesor asociado del departamento de Bioingeniería de la DTU , estima que estos hallazgos pueden llevar a un cambio de paradigma en el tratamiento de mordeduras de serpientes.
“Usamos un método biotecnológico para encontrar y luego propagar anticuerpos humanos en el laboratorio para su uso en el tratamiento del envenenamiento experimental con mamba negra. El método que empleamos puede usarse para descubrir anticuerpos humanos en el laboratorio simulando el sistema inmunitario humano, por lo que podemos evitar inyectar a los pacientes el veneno de las serpientes para producir anticuerpos mediante inmunización”, dice Andreas Hougaard Laustsen.
Los anticuerpos para el antiveneno de mamba negra experimental se descubrieron utilizando una biblioteca de anticuerpos, que contienen genes de anticuerpos humanos extraídos de glóbulos blancos en la sangre del donante. Estos genes se insertaron en partículas de virus modificados genéticamente que pueden expresar los anticuerpos humanos deseados en su superficie. Estas partículas de virus se utilizaron luego para detectar y encontrar anticuerpos humanos que pueden unirse a las dendrotoxinas de mamba negra.
Después de que se encontraron los anticuerpos correctos, los genes de anticuerpos se insertaron en células de mamíferos que actúan como fábricas celulares con una gran producción de anticuerpos monoclonales.
Los anticuerpos descubiertos se pueden usar en el entorno industrial para la producción a gran escala, en tanques de fermentación enormes, similar a la producción de insulina en la actualidad.
Andreas Hougaard Laustsen estima que aún pasarán años antes de que la producción de antiveneno basado en anticuerpos humanos esté lista para salir del laboratorio.
“Hemos demostrado que es posible producir un antiveneno experimental de origen humano contra toxinas importantes de una especie de serpiente, la mamba negra. Antes de que las pruebas clínicas del antiveneno en humanos tengan sentido, es importante desarrollar más anticuerpos para que el antiveneno le brinde un espectro más amplio contra varios tipos de veneno de serpiente ”, dice Laustsen.
Por lo tanto, los investigadores están trabajando para desarrollar un antiveneno contra varias especies de serpientes. Si la investigación es exitosa, un médico podrá usar el antiveneno también en los muchos casos de mordedura de serpiente donde se desconoce la especie de serpiente perpetradora. Esto puede potencialmente salvar muchas vidas, no solo en África, sino en todo el mundo.